El límite de la investigación está en el derecho a la vida
La Conferencia Episcopal Española se muestra a favor de los avances científicos si no suponen destruir a un ser humano
Madrid Actualizado: GuardarEl portavoz y secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Juan Antonio Martínez Camino, ha recordado que el límite de la investigación y las terapias o tratamientos con células madre está en destruir la vida y, concretamente, el embrión.
Preguntado por la investigación con células madre para lograr avances en el tratamiento de enfermedades como el ELA, de la que este jueves se celebra el Día Mundial, Martínez Camino ha señalado que la Iglesia «no se opone a la investigación científica» sino «al abuso de la dignidad humana en cualquier aspecto y concretamente al derecho a la vida».
En esta línea, ha explicado que destruir a un ser humano, sea de uno, dos o tres días, es «inaceptable sea con la finalidad que sea» y ha subrayado que «el fin bueno de encontrar terapias ha de buscarse por caminos adecuados» porque «el fin no justifica los medios». No obstante, ha recordado que también existen células madre «que no implican la destrucción de vidas humanas».
«No se puede comerciar con la vida humana, es un principio básico de la sociedad occidental y la vida humana es indivisible. Vale tanto un enfermo como un sano, un ser humano de un día de vida que uno de 99 años. Si lo fragmentamos y decimos que hasta los 14 días se puede privar de la vida a un ser humano, hemos perdido la base de la convivencia», ha destacado.
En este sentido, ha aplaudido la sentencia del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo que prohíbe que se patenten proyectos de investigación que impliquen la destrucción de embriones pues, según ha señalado, la investigación «nunca puede ser a costa de la dignidad y de la ética».