Vista de los monitores informativos que muestran la cotización de los valores del Ibex-35. / Foto: Kiko Huesca (Efe) | Vídeo: Ep
MERCADDOS | MADRID

El rescate, más cerca, aupa a la Bolsa y perjudica a la deuda

Cierra la sesión con una subida del 1,77% pese a los rumores desatados sobre un inminente rescate a España

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Rumores o filtraciones siguen apuntando al rescate de España. Hoy, Reuters, que citaba dos fuentes de la Unión Europea y otra alemana, avanzaba que mañana mismo el Gobierno español pediría el rescate para recapitalizar la banca. Quizás sea inteligente hacerlo antes de la celebración de las elecciones griegas, para así enfrentar su resultado mucho mejor pertrechados. Y también, antes de que el Fondo Monetario Internacional presente su diagnóstico sobre el sector financiero español el próximo lunes y las auditoras independientes el próximo 21 de junio: así, se conocerá el agujero, que puede ser mayor del que se preveía, pero ya contará con dinero para cubrir esas necesidades y, por tanto, reducir las posibles tensiones que puedan surgir. Además, parece que hay convocada para mañana una teleconferencia de los ministros de Economía de la zona euro para hablar sobre España, lo cual alimentaba las especulaciones. Éstas, de todas maneras, no tuvieron un efecto negativo en la Bolsa. Al contrario. De hecho, cuando trascendieron, el selectivo español entró en números verdes, que fueron creciendo a medida que avanzaba la sesión, aunque el Gobierno insistiera en que no había nada decidido. Al cierre, el Ibex-35 ganó un 1,77% para dar un último cambio en los 6.552 puntos. Fue el mejor índice de la sesión y el mejor de la semana, con una revalorización del 8,03%.

Tras el Ibex se colocó el PSI-20 de Lisboa, que se apuntó un 0,38%. El resto de los indicadores terminaron la jornada en negativo: el peor fue el Ftse Mib de Milán, que retrocedió un 0,74%. A continuación, el Cac 40 francés, que perdió un 0,63%. El Ftse 100 británico y el Dax alemán se dejaron poco más de un 0,2%.

En parte, el mercado atribuyó estas caídas a los datos macroeconómicos que se conocieron hoy, sobre todo la balanza comercial de Alemania, que tuvo más superávit de lo esperado, pero tanto las exportaciones como las importaciones cayeron más de lo esperado (sobre todo estas últimas), síntoma del deterioro de la primera economía europea.

De todas formas, el efecto final en el mercado español vendrá de la mano, posiblemente, de la condicionalidad que Bruselas ponga al rescate. ¿Reducción de los costes laborales unitarios? ¿Reducción de la deuda externa con desapalancamiento y, por tanto, reducción drástica del crédito? Son condiciones que pueden provocar un fuerte deterioro de la situación económica de España. El Gobierno debe negociar y convencer a sus socios de que este tipo de medidas, como ya se ha comprobado en Irlanda, Portugal y Grecia, hunden todavía más al país. Aunque es posible que se evite el rescate y la reunión a distancia de los ministros sólo sea para otorgar una declaración de apoyo a España.

La prima de riesgo subió

Aunque la Bolsa acogió de buen grado las noticias sobre el rescate, la prima de riesgo, en cambio, sí se vio deteriorada. De los 470 puntos básicos en que se situaba al cierre de la sesión anterior, subió hasta los 488. El tipo de interés del bono a diez años escaló desde el 6,08% hasta el 6,21%. Los inversores pueden estar preparándose ante la posibilidad de que el rescate no sea sólo a la banca, sino que sea al país entero, o lo contamine, quede estigmatizado y fuera del mercado. Por lo que pudiera suceder, decidieron vender deuda española. Y, como señal de un mayor nerviosismo en el mercado, el interés del bono alemán a diez años cayó desde el 1,37% hasta el 1,32%.

Pero, seguramente, en su evolución pesó la decisión de Fitch comunicada después del cierre de la sesión del jueves de rebajar la calificación de la deuda española en tres escalones, desde A hasta BBB y con perspectiva negativa, lo que significa que puede haber más recortes. Aunque la deuda italiana también se deterioró: su prima de riesgo subió desde los 433 hasta los 444 puntos básicos y la rentabilidad del bono a diez años, desde el 5,70% hasta el 5,77%.

El euro también se vio afectado y de subir hasta el nivel de 1,26 dólares, la moneda comunitaria se dio la vuelta y, al cierre, se cambiaba por menos de 1,25 unidades.

En el selectivo español, Iberdrola lideró los avances, con una revalorización cercana al 5%, seguido de Enagás, que se apuntó un 3,67%. Telefónica y Bankinter ganaron más de un 3%. Entre los valores ganadores, Mediaset y Gas Natural, con subidas de alrededor de un 2,75%. También Endesa, CaixaBank y Repsol YPF subieron más de un 2%. Por lo tanto, los grandes valores fueron los que capitanearon los avances dentro del selectivo español. Los otros dos grandes, Santander y BBVA, también cerraron la sesión en positivo: se apuntaron un 1,40% y un 1,10%, respectivamente.

En general, todo el sector financiero cerró la sesión en positivo. El que peor se comportó fue el Sabadell, que apenas sumó un 0,37%, seguido de Bankia y el Popular, que ganaron alrededor de medio punto porcentual.

En rojo, el peor valor fue Gamesa, que retrocedió un 2,63%, seguido de ArcelorMittal, que se dejó un 2,16%. Abengoa perdió un 1,81%. Grifols, Indra, Acerinox, BME y ACS fueron los otros valores en rojo del selectivo, pero con pérdidas muy inferiores.

Obama anima a Europa

En Estados Unidos, tras la decepción que propinó el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, con un discurso menos agresivo que el que el mercado esperaba, los indicadores americanos parecían querer recuperarse. De salir bien la historia, el indicador Wall Street podría cerrar su mejor semana del año. En cuanto a los datos macroeconómicos que allí se publicaron, contamos con la balanza comercial, algo más deficiaria de lo esperado, mientras que los inventarios subieron un 0,6%, dos décimas más de lo esperado por los analistas.

El presidente Barack Obama, en una comparecencia en la Casa Blanca, habló sobre la situación de la economía a uno y a otro lado del Atlántico. Respecto a Europa, afirmó que hay que continuar con las reformas, pero sin que todo sea recortar, recortar y recortar mientras crece el desempleo. Además, animó al Viejo Continente a poner en marcha programas de recapitalzación de los bancos más débiles. De puertas para adentro, Obama también sigue siendo partidario de los estímulos a la economía. En su conjunto, el mensaje gustó a Wall Street: tras sus palabras, el Dow Jones entró en positivo.

Este fin de semana, además de a las noticias sobre España, el mercado estará atento a los datos que se publiquen en China, como la inflación, la producción industrial y las ventas minoristas.

Todos estos riesgos, España, Alemania y China, cotizaron a la baja en el mercado de materias primas. El barril de Brent, de referencia en Europa, cayó un 2,19%, hasta los 97,74 dólares. El barril de crudo West Texas, de referencia en Estados Unidos, bajaba en la apertura un 2%, hasta los 83,12 dólares. El cobre también retrocedió más de un 2%, mientras que el oro terminaba la sesión prácticamente sin cambios y, eso sí, por debajo de los 1.600 dólares por onza.