crisis financiera

Merkel apuesta por reforzar la unión política

La canciller alemana abre la puerta a la construcción de una Europa a dos velocidades

BERLÍN Actualizado: Guardar
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La canciller de Alemania, Angela Merkel, ha abogado por reforzar la unión política europea, una propuesta a largo plazo que contrasta con las reclamaciones de muchos de sus socios para dar soluciones urgentes a la crisis de la deuda, en momentos en que España se tambalea.

"Necesitamos más Europa (...) una unión presupuestaria (...) y necesitamos antes que nada una unión política. Debemos paso a paso transferir competencias a Europa", ha señalado Merkel en unas declaraciones al informativo matinal de la primera cadena de la televisión pública AR.

Ese camino supone la construcción de una Europa a dos velocidades. "No debemos quedarnos inmóviles porque uno u otro no quiere todavía seguir" esa orientación, ha subrayado la canciller.

Reduce las expectativas sobre la cumbre de la UE

Merkel ha tratado de reducir las expectativas creadas en torno a la cumbre que la Unión Europea celebrará a finales de junio. Muchos esperan que esa cita constituya una etapa decisiva en la solución de la crisis que ya obligó al rescate de Portugal, Irlanda y Grecia, y que tiene en la cuerda floja a España. No hay ninguna cumbre "capaz de solucionarlo todo de golpe", ha resaltado la canciller alemana.

Una aclaración que servirá de poco consuelo para España, que ayer se dio un plazo de quince días para decidir si pide ayuda a Europa para recapitalizar a sus bancos. La presión de los mercados ha vuelto a hacerse patente hoy. El Tesoro español ha tenido que ofrecer rendimientos en alza, por encima del 6%, para financiar su deuda con obligaciones a diez años. El rendimiento de esos títulos ha subido a 6,044%, frente al 5,743% de la última emisión de este tipo. Alemania consigue en cambio financiarse a niveles históricamente bajos (de 1,357% en los mercados de deuda esta mañana), por gozar de la confianza de los inversores.

El recelo de los inversores ante España se debe a la fragilidad de su sector bancario tras el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008, que paralizó su economía y ha sumido en el desempleo a casi una cuarta parte de la población activa.

Merkel ha reiterado además sus llamamientos a no aflojar los programas de severos ajustes fiscales, pese a las críticas que estos despiertan en sus socios, que los ven cada vez más como un factor de asfixia de sus economías. "La consolidación presupuestaria y el crecimiento son las dos caras de una misma moneda", ha sentenciado la canciller.