El Gobierno espera cerrar antes del verano el pacto con el PSOE para la reforma territorial
Beteta entrega a los negociadores socialistas un primer borrador de sus planes
Madrid Actualizado: GuardarLas conversaciones entre el Gobierno y el PSOE para llevar a cabo la más ambiciosa reforma de la organización territorial y las administraciones públicas desde la transición comenzaron hoy, según fuentes gubernamentales, con un preacuerdo. Si las cosas salen según lo previsto, el Ejecutivo enviará al Congreso a finales de julio un proyecto de ley consensuado para reducir costes y ganar en eficiencia mediante la eliminación de duplicidades, la reducción de estructuras burocráticas y la fusión voluntaria de ayuntamientos. Eso fue lo tratado, de manera somera, en la primera toma de contacto entre el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, el secretario general de Coordinación Autonómica y Local, Enrique Ossorio (por parte del Gobierno), el secretario de Relaciones Institucionales, Políticas y Autonomías, Antonio Hernando y el secretario de Ciudades y Política Municipal, Gaspar Zarrías (por parte del PSOE). Mariano Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba ya acordaron abrir una negociación sobre este asunto en el encuentro que celebraron en La Moncloa el pasado 25 de mayo. Y, según señaló el líder de los socialistas en una rueda de prensa posterior, la intención es hacerlo con cierta celeridad. El Ejecutivo tiene, de hecho, un mandato del Senado para que las reformas legales necesarias estén listas antes de acabar el año. Conforme a estos plazos, que ya se tuvieron en cuenta en el plan que el Gobierno remitió a Bruselas a finales de abril junto con el programa de estabilidad presupuestaria, el Ejecutivo quiere poder tener listo un texto legislativo en dos meses. A priori, existen coincidencias entre los dos grandes partidos -los dos defienden que es necesario quitar la grasa del sistema y comparten la idea de que hoy por hoy hay en España miles de ayuntamientos inviables-, pero también hay diferencias; la fundamental: el Gobierno quiere fortalecer las diputaciones, el PSOE restarles competencias a favor de las mancomunidades. De momento, los socialistas se han comprometido a estudiar la propuesta que hoy les entregó el secretario de Estado y a hacer sus aportaciones. Pero fuentes del partido señalan que no trabajan con un calendario fijo.