Rajoy no logra un compromiso para que intervenga el BCE
El jefe del Ejecutivo pide que actúe para garantizar "liquidez y la sostenibilidad de la deuda"
BRUSELAS Actualizado: GuardarLos líderes de la UE han evitado respaldar explícitamente la solicitud del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, de que el Banco Central Europeo (BCE) intervenga en los mercados con el fin de rebajar los costes de financiación de España o Italia y el propio presidente de la institución, Mario Draghi, ha sostenido ante los líderes europeos que ya ha realizado una "intervención masiva" para aportar liquidez a la banca.
Ni el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ni el de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, se han referido a la cuestión de la liquidez en la rueda de prensa final del Consejo Europeo. Por su parte, Draghi ha dicho durante el Consejo Europeo que "ya había realizado una intervención masiva para que los bancos encontraran liquidez y que vigilaba la situación", según ha explicado el presidente francés, François Hollande. "No hemos debatido sobre el BCE, solo se han expresado algunas opiniones", ha dicho Hollande.
El propio Rajoy no ha concretado qué países han apoyado a España para pedir una mayor intervención del Banco Central Europeo. Ha defendido al término de la cumbre comunitaria la necesidad de plantearse a fondo el futuro de la Unión Europea. Pero, sobre todo, ha insistido en que resulta "capital" que el Banco Central Europeo actúe para garantizar "liquidez y la sostenibilidad de la deuda pública", aunque ha dejado claro que la institución que preside Mario Draghi es "independiente" y por tanto no le corresponde a los líderes europeos tomar esta decisión. "Lo que yo digo es de sentido común, es decir, todos los esfuerzos son importantes, hay que hacerlos, son buenos para la economía, pero hay algo que es capital: si las deudas públicas no se pueden sostener tenemos un problema. Pero eso es una decisión, insisto, que corresponde al Banco Central Europeo, que ya tomó en alguna ocasión", ha recalcado el jefe del Ejecutivo español.
"En este momento", considera Rajoy "la sostenibilidad de la deuda pública de la UE está garantizada". "Pero si hubiera un momento en que no estuviera, las decisiones se pueden tomar en 24 horas", ha recalcado. Ha reiterado que esta intervención del Banco Central Europeo resulta "mucho más" importante que zanjar un acuerdo sobre "el diseño del futuro de la Unión Europea", aunque ha reconocido que en su intervención ante el resto de líderes europeos también ha planteado "que tendría que llegar un momento en que deberíamos discutir cuál es el futuro de la Unión Europea".
Mayor integración
Ese futuro de la Unión Europea ha centrado la rueda de prensa que ha ofrecido el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, al término de la cumbre, resaltando la necesidad de pasar a "una nueva etapa" de mayor integración en la unión monetaria. Los líderes de la UE han acordado pactar en junio unas líneas maestras para proceder a esa reforma. Van Rompuy se encargará de preparar las bases y el método de cara a esa transformación junto a los presidentes del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi; de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso; y del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker.
Van Rompuy ha asegurado que hay un "consenso" sobre la necesidad de "reforzar" la unión monetaria y por ahora no se descarta ninguna vía para proceder a esa mayor integración. "Haremos todo lo que tengamos que hacer en el marco de los actuales tratados", ha señalado, si bien no ha descartado ir más allá de eso, recordando que la UE dispone de vías amplías, como podrían ser nuevos tratados intergubernamentales. Aunque ha resaltado que es "demasiado pronto" para entrar en detalles, ha citado los eurobonos como un ejemplo de los instrumentos que están sobre la mesa.
Eurobonos
Esa última cuestión, la de los eurobonos, ha puesto de manifiesto la división existente en el seno del eje franco-aleman tras la llegada de François Hollande al Elíseo. "Lo que he querido es que haya nuevos instrumentos que puedan ser propuestos, como los eurobonos, la tasa a las transacciones financieras, el mecanismo europeo de solidaridad, para recapitalizar los bancos", ha resaltado Hollande al término del Consejo Europeo.
La canciller alemana, Angela Merkel, ha admitido que ella y Hollande han defendido posturas diferentes durante el Consejo Europeo, pero ha puntualizado que fue un debate "equilibrado y diferenciado". "Cada uno de nosotros ha hablado una vez y hemos articulado diferentes opiniones sobre los eurobonos", ha manifestado. Ha defendido que para la introducción de eurobonos se requeriría una "coordinación económica mucho más fuerte". "Tendríamos dificultades importantes en lo que se refiere a las posibilidades de establecer un acuerdo, si pensamos en el pacto fiscal", ha agregado, en referencia a la oposición del Reino Unido, que imposibilitó incorporar las normas al Tratado de la UE.
Mensaje a Atenas
Otro de los asuntos que han centrado la cumbre ha sido el de la delicada situación por la que atraviesa Grecia. Los Veintisiete han avisado a los ciudadanos de ese país que la "mejor garantía" para seguir en la zona euro tras las elecciones del 17 de junio es escoger un Gobierno que continúe aplicando el plan de ajustes pactado con la UE. "Continuar con las reformas vitales para restaurar la sostenibilidad de la deuda, impulsar la inversión privada y reforzar las instituciones es la mejor garantía para un futuro más próspero en la eurozona. Esperamos que tras las elecciones, el nuevo Gobierno griego escoja esta alternativa", subraya la declaración aprobada por el Consejo Europeo. "Queremos que Grecia siga en la eurozona siempre que respete sus compromisos", prosigue.
Los líderes europeos se muestran dispuestos a "movilizar los fondos estructurales y los instrumentos europeos para devolver a Grecia a la senda del crecimiento y la creación de empleo", pero recuerdan que ya han mostrado una "considerable solidaridad" hacia Atenas con una asistencia financiera que asciende ya a casi 150.000 millones de euros.
Rajoy ha expresado también su gran preocupación por la situación de Grecia y ha transmitido su deseo de que pueda seguir en la zona euro porque sería bueno para los ciudadanos de ese país aunque ahora tengan que hacer esfuerzos para ello y también es muy beneficiosa para el conjunto de la Unión Europea.