Los Gasol, a la conquista del 'salvaje' Oeste
Lakers y Memphis comienzan este domingo su andadura en los 'playoffs' con el morbo de un posible cruce entre los hermanos en la final de conferencia
MADRID Actualizado: GuardarLa fiebre del anillo se ha vuelto a desatar en la NBA. Aunque algunos divisan en el horizonte el brillante contorno de la sortija que acredita al campeón de la mejor liga del mundo, en el camino hacía el título hay margen para muchas sorpresas. Los hermanos Gasol comienzan este domingo su andadura en esa exigente escalada que suponen los 'playoffs'. Lo hacen después de una temporada atípica, la segunda de la historia que se ha visto cercenada por un cierre patronal, lo que ha comprimido el calendario a 66 partidos, jugando cada dos noches. Ni Lakers ni Memphis engrosan la nómina de claros favoritos. Tampoco los Mavericks, que defienden el trofeo conseguido hace un año con unas sensaciones y una plantilla mucho más desgastadas. Las quinielas apuestan por Chicago Bulls, que esta noche han perdido a Rose para lo que resta de competición en el partido frente a Philadelphia ;Miami Heat, que apalizaron a los Knicks; San Antonio Spurs u Oklahoma Thunder.
Tanto en California como en Tennessee afrontan un primer gran objetivo: la final de conferencia. Pero lo hacen de manera muy diferente a pesar de tener el mismo balance con 41 victorias y 25 derrotas. En la franquicia californiana una eliminación prematura sería interpretada como otro desastre agravando una crisis que, aunque se ha relajado desde el fin del plazo para realizar traspasos en marzo, sigue latente en lo más profundo del vestuario. El largo culebrón que tuvo como triste protagonista a Pau Gasol afectó demasiado al estreno de Mike Brown, que se enfrentaba a la complicada tarea de liderar la transición tras la marcha de Phil Jackson.
A pesar de la fallida operación que podría haber acabado con el pívot catalán en un equipo vulgar como Houston Rockets y de haber tenido el cartel de transferible hasta el último momento, Gasol ha continuado siendo una pieza fundamental en los planteamientos de su técnico. Ha disputado cerca de 2.500 minutos en los 65 partidos que ha jugado. Es el segundo más utilizado de toda la competición, solo superado por Kevin Durant, líder de unos Thunder que este año aspiran a todo. El conjunto de Oklahoma, si Dallas no recupera la esencia que parece haber perdido, debería ser el obstáculo que espera a los Lakers si estos superan la serie inicial frente a los Nuggets de Denver.
Con el factor cancha a favor, los de Los Ángeles afrontan la eliminatoria con una baja sensible: la de Metta World Peace, ese alborotador antes conocido como Ron Artest que estará desactivado los próximos seis partidos debido al brutal codazo que propinó a James Harden. El rival, claramente inferior, no tendría que ponerle en demasiados apuros si Kobe Bryant, que parece completamente recuperado de su lesión en la mano izquierda, Gasol y Bynum rinden a un buen nivel. En las cuatro veces que se han enfrentado este año, en tres ocasiones salieron victoriosos.
Donde puede cobrar especial relevancia el factor cancha es en el duelo entre los Grizzlies de Memphis y los Clippers de Los Ángeles. El conjunto de Marc Gasol consiguió retener la cuarta plaza en la última jornada de la fase regular lo que puede valer su peso en oro. Ambos equipos se han visto este año en tres ocasiones. Siempre ganó el local. Dos victorias fueron para Memphis y una para el vecino 'pobre' de los Lakers, que vuelve a unas eliminatorias por el título seis años después. Lo hacen gracias a la espectacular pareja formada por Chris Paul y Blake Griffin, un auténtico portento físico que acostumbra a colarse entre las mejores jugadas de cada jornada con espectaculares mates.
Marc, imprescindible
El pívot español será clave para cortar esta arteria del juego de su rival, ya que Zach Randolph todavía no se ha recuperado al cien por cien de una larga lesión. Un pulso bajo los aros que también puede ser clave para decantar la serie al mejor de siete partidos. Los Grizzlies llegan con la mejor clasificación de la historia de la franquicia. La anterior marca, un quinto puesto, fue lograda cuando el que vestía la elástica del equipo era Paul Gasol. Ahora Marc se ha reafirmado como un imprescindible en los planes de su entrenador, que ahora aspira a mejorar el fabuloso papel realizado la pasada campaña, cuando cayeron en el séptimo partido de las semifinales de conferencia frente a Oklahoma tras eliminar a los Spurs.
Si eliminan a los Clippers, Memphis se encuentrará probablemente de nuevo con el conjunto entrenado por Greg Popovich. Los Spurs liderados por Parker, Ginóbili y un incombustible Tim Duncan han sido el mejor equipo del Oeste, compitiendo hasta la última jornada con Chicago por ser el campeón de la liga regular. Llegan a las eliminatorias frente a los Jazz con la ilusión renovada y sueñan con conseguir, gracias a su profundidad de banquillo, un título que sumar a los conseguidos en 1999, 2003 y 2005.
Sin embargo, si los equipos de los Gasol superan sus respectivos compromisos en el Oeste podría llegar a verse en una final de conferencia en la que los dos hermanos se podrían jugar el pase a la gran final de la NBA. Si los Lakers se plantan en el último escalón de la lucha por el título, quién sabe si Mitch Kupchak, gerente de la franquicia, se replantearía la opción de deshacerse de Pau Gasol para conseguir una renovación que dé un nuevo aire al equipo.
Si la lógica se cumple, en el Este todo indica a que finalmente se tratará de un pulso entre los Bulls y los Heat de LeBron James, que ansía conseguir un anillo que el año pasado le arrebató Dirk Nowitzki en la final. Boston Celtics, Orlando Magic, Philadelphia Sixers, Indiana Pacers y New York Knicks completan un cuadro que parece mucho más previsible que el del Oeste. Por el momento, los Heat se adelantaron en la serie al cuadro neoyorquino tras apalizarles por 100 a 67. Chicago, que también se ha impuesto por un contundente 103 a 91, recibió un duro revés. Y es que Dereck Rose, su jugador franquicia se lesionó en su rodilla izquierda, lo que le deja fuera de juego para lo que queda de temporada.