PSOE y PP apelan al voto útil en multitudinarios mítines
Los socialistas urgen a frenar a la derecha "reaccionaria" que "no dice lo que va a hacer"
SEVILLA Actualizado: GuardarCon grandes mítines en Sevilla, los dos partidos con más opciones de conseguir la presidencia de la Junta de Andalucía cierran la campaña electoral apelando al voto útil: para frenar a la derecha "reaccionaria" que "no dice lo que va a hacer" o para el cambio que acabará con el paro y el derroche de 30 años de gobierno del mismo partido.
PSOE y PP echan el resto y protagonizan una maratoniana jornada en la que, una vez más, vuelven a salir a la palestra temas nacionales como la sanidad, educación, la reforma laboral y los dos modelos ideológicos y económicos que se enfrentan en estos comicios.
"Es la derecha que utiliza la crisis para hacer lo que siempre quiso hacer", explicaba el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, en Córdoba. Los socialistas han centrado su campaña en los llamados 'mítines express' o encuentros sectoriales con pequeños grupos, y han dejado la traca final para la última jornada, en la que se ha producido el único mitin conjunto de Rubalcaba con el candidato socialista José Antonio Griñán e incluso 'pesos pesados' como el expresidente Felipe González.
El secretario general de los socialistas reconocía sin pudor que su baza está sobre todo en los indecisos, y a ellos apelaba recordando los recortes en otras regiones para que "no se lamenten dentro de unos meses de por qué se quedaron ese día en casa". Y apelaba a la agenda oculta de los 'populares' andaluces subrayando que "de Arenas no sabemos nada, salvo que se ha presentado muchas veces sin éxito".
En el doble mitin de Córdoba y Sevilla, Rubalcaba ha estado acompañado de Felipe González, que una vez más ha recaudado los mayores aplausos y ha sido recibido con el público coreando su nombre. González no ha dudado en mencionar el principal lastre del PSOE en la campaña, la corrupción. "Meter la pata es humano, meter la mano es una indecencia", ha dicho, "y en el PP alguna vez salen algunos honrados", ha subrayado para mayor algarabía del público.
Ha contrarrestado el llamamiento del PP para un cambio que regenere la comunidad después de 30 años de monocolor, ha aseverado que "la democracia no es la alternancia, sino la aceptabilidad de la derrota". A continuación ha tirado de pedagogía para explicar los motivos de la crisis y las bondades de los servicios públicos que los socialistas implantaron en sus primeros años de Gobierno.
Por ello, y al igual que Griñán -que anunciaba su intención de continuar al frente del PSOE-A aunque pierda las elecciones- ha animado a que Andalucía sea el único "foco de resistencia" ante la "ola reaccionaria que barre Europa". Ha abundado en que su tierra "no debe entrar en la rueda trituradora del conservadurismo, que nos va a meter diez años en la crisis".
Controlar la euforia
Desde el mitin del PP, el líder de los 'populares' insistía también en la necesidad de que los andaluces vayan a las urnas para dar un voto útil para que gane el cambio. Un cambio que Mariano Rajoy ha definido como "dejar atrás el miedo y poner un Gobierno que dé ejemplo".
En clara alusión a los recientes casos de corrupción que azotan al PSOE y al mensaje de 30 años de abusos de poder por parte de un gobierno de un mismo partido, ha abundado asegurando que el cambio también es "abrir las ventanas a la honradez" y que la confianza se use en beneficio de los ciudadanos "pero que nadie se aproveche de ella". "Hay una manera de hacer las cosas bien", ha insistido. También ha tenido una mención para el líder de los socialistas, José Antonio Griñán, del que ha asegurado que tiene "la misma opinión" que sus correligionarios Alfredo Pérez Rubalcaba y Felipe González, con los que departió en el tren camino de Córdoba y Sevilla. "Los andaluces no se merecen que las cosas sigan igual", concluía.
Por su parte, el líder andaluz Javier Arenas volvía a hacer un llamamiento para controlar la euforia, pese a que las encuestas siguen augurando un triunfo aplastante en las urnas, porque los socialistas siguen siendo "un adversario muy fuerte". Arenas incluso echaba en cara a su oponente que "como está tan cortito de logros sociales no ha presentado un proyecto para Andalucía".
En su intervención en un polideportivo sevillano, se ha referido también a los casos de corrupción, y ha defendido que "determinadas gestiones exigen responder ante los tribunales de justicia", para continuar señalando que esa responsabilidad "no puede quedar zanjada con perder las elecciones". No ha eludido las principales críticas que les hacen sus adversarios políticos, y ha asegurado que "habrá recortes, sí, vamos a recortar el paro, los abusos, el fraude de los ERE y el despilfarro".
La anécdota de la jornada se produjo cuando la secretaria de organización del PSOE-A, Susana Díaz, se refirió al "mal fario" para el PP porque se les hubiera ido la luz en el mitín celebrado en Sevilla, y minutos después era Pérez Rubalcaba el que veía, por dos veces, cómo se rompía su micrófono. Un apagón que el público llenó cantando el himno andaluz. "¿Qué cantaran los otros? No me tiréis de la lengua", ironizó el secretario general del PSOE.