Los golpistas cierran el espacio aéreo y las fronteras de Mali
Los combates se han extendido a la ciudad de Gao después de que los rebeldes tomasen varios puntos de la capital
BAMAKO (MALI) Actualizado: GuardarLos militares que ha perpetrado el golpe de Estado contra el presidente de Mali, Amadou Toumani Toure, han dispuesto hoy el cierre del espacio aéreo y las fronteras terrestres del país, según confirmaron fuentes próximas a los propios golpistas. La medida la ha tomado el autoproclamado Comité Nacional para el Restablecimiento de la Democracia y la Restauración del Estado (CNRDRE), bajo el que se agrupan los golpistas, y permanecerá en vigor al menos hasta el próximo martes, indicaron las fuen
Desde anoche, al menos 50 miembros de la guardia presidencial han muerto en los combates entre militares leales al jefe de Estado y los rebeldes, en los alrededores del palacio presidencial, según fuentes de la protección civil. Durante toda la noche se han registrado enfrentamientos en las inmediaciones del palacio presidencial, el único lugar en el que se encontraban desplegadas las fuerzas leales a Touré, que se encuentra en paradero desconocido. Asimismo, según ha constatado la agencia, un civil yacía muerto con varios disparos en el cuerpo en una de las principales vías de la capital.
Esta madrugada el máximo órgano golpista, el Comité Nacional por la Recuperación de la Democracia y la Restauración del Estado (CNRDRE), presidido por el capitán Amadou Haya Sanogo, anunció la derogación de la Constitución y la disolución de todas las instituciones del Estado. No obstante, ha mostrado su intención no es hacerse con el poder, así como de entablar un diálogo con los partidos de la oposición.
A través de la televisión nacional, los soldados han señalado que han puesto fin al mandato del presidente, Amadou Toumani Touré, y que entregarán el poder a un nuevo Gobierno que será elegido a través de un proceso electoral. "El CNRDR ha decidido asumir sus responsabilidades poniendo fin al incompetente régimen de Amadou Toumani Touré", ha dicho el portavoz, Amadou Konare. Asimismo, ha acusado al Ejecutivo malí de fracasar a la hora de poner fin a la rebelión en la región de Azawad, en el norte del país. "Prometemos que entregaremos el poder a un presidente democráticamente electo tan pronto como el país sea reunificado y su integridad no esté amenazada", ha dicho Konare, flanqueado por dos decenas de soldados. Poco después, los militares han declarado el toque de queda "hasta próximo aviso".
Golpe de estado
Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, llamó a la calma y pidió que las diferencias se resolvieran de forma democrática horas antes del anuncio del golpe de Estado. El presidente de la Unión Africana, Jean Ping, ha afirmado que está "muy preocupado por los actos censurables que están siendo perpetrados por algunos elementos del Ejército malí".
El golpe de estado comenzó ayer con un motín en el cuartel de Kati, situado a 15 kilómetros de la capital y que ya había sido testigo de disturbios anteriores el pasado febrero. Los reclutas rechazaban ser movilizados para participar en los enfrentamientos entre el Ejército y las fuerzas independentistas tuareg en el norte de Mali, que se levantaron en armas el pasado 17 de enero para reclamar la autodeterminación de la parte septentrional del país. Este levantamiento ha conseguido hacerse con el control de más del 60% de la región. Los amotinados se dirigieron a la capital donde tomaron la sede de la radio y la televisión estatales y, donde, después de sumar fuerzas, detuvieron a varios ministros, tomaron el palacio presidencial y anunciaron su victoria.