ciclismo

Gerrans se lleva 'La Classicissima'

El australiano se impuso en el sprint de los fugados a Cancellara y Nibali

SAN REMO (ITALIA) Actualizado: Guardar
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El australiano Simon Gerrans (GreenEdge) ganó este sábado la 103ª edición de la Milán-San Remo, la primera gran clásica de la temporada, superando en el sprint final a sus dos compañeros de escapada, el suizo Fabian Cancellara y el italiano Vincenzo Nibali.

Gerrans prolonga así el reinado australiano en la 'Classicissima', con 298 kilómetros de recorrido, ya que sucede en el palmarés a Matt Goss, mientras que Cancellara volvió a quedar a un paso de la victoria, después de su segundo puesto de la anterior edición.

La prueba arrancó con una escapada de nueve corredores en el kilómetro 15, a la que el pelotón no prestó demasiada atención. En el kilómetro 204, en el ascenso a La Manie, el británico Mark Cavendish no pudo seguir el ritmo marcado por los corredores de los equipos Liquigas y Farnese, quedando descartado para lograr algo importante.

Al llegar a la ascensión a La Cipressa, con rampas de hasta el nueve por ciento de pendiente, el neerlandés Johnny Hoogerland y el español Patxi Vila pasaron al ataque, mientras que uno de los favoritos a hacerse con el triunfo, el belga Philippe Gilbert, se fue al suelo.

El momento elegido por Cancellara para atacar fue a seis kilómetros de la meta, pero ya llevaba diez preparándolo, llegando hasta las primeras posiciones del grupo de cabeza.

El suizo se lanzó a la ofensiva en la cima del Poggio y realizó un enorme esfuerzo físico del que sacó provecho Simon Gerrans para seguir su rueda, algo a lo que también se apunto Nibali. Finalmente, el australiano fue quien pudo imponerse en el esfuerzo final y llevarse la victoria.

"Es difícil estar más contento. He vivido una jornada excepcional. Comprendí que tenía mi oportunidad cuando seguí sin demasiados problemas a Nibali en el Poggio", explicó el triunfador del día, que ha estado recuperándose en los últimos días de unos problemas de salud, para llegar fuerte a esta clásica.

"Siempre corro para ganar. Mi objetivo era la victoria, quería regalarme esto a mí mismo en la víspera de mi cumpleaños", se lamentó Cancellara, que admitió haber "asumido riesgos" en la parte final de la prueba ya que no podía hacer otra cosa ante la presión de Gerrans y Nibali.

"Creo que he corrido bien. El equipo ha trabajado también bien, pero me han faltado piernas al final", admitió Freire, que dijo no estar sorprendido por la mayor velocidad de Gerrans respecto a Cancellara en los metros finales.