CINE

Martínez-Lázaro vuelve a la cama

Después de rodar 'Las 13 rosas', el director regresa a la comedia, los tríos amorosos y el sexo en 'La montaña rusa'

MADRID Actualizado: Guardar
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Emilio Martínez-Lázaro necesitaba desengrasarse, volver al cien con una película más ligera después de sumergirse en la Guerra Civil con 'Las 13 rosas'. La carga emocional, laboral y de implicación con la cinta fue tal que el director madrileño acabó exhausto. «En 'Las 13 rosas' el rodaje fue difícil. Cuando solo tres protagonistas tiene diálogo y las otras diez no, pero tienen que salir todas juntas, se produce mucha electricidad. Y la electricidad llegó a salir», cuenta el director. Tras la inmersión en las cárceles franquistas, Martínez-Lázaro decidió volver a terreno conocido, a la comedia, cultivado durante muchos años.

Así nació 'La montaña rusa', escrito a la limón con Daniela Fejerman, donde el director madrileño vuelve a centrar la cámara en los triángulos amorosos y el sexo. Y, siempre, alrededor de una cama. «Parece que se ha convertido en una pequeña obsesión._Es verdad», confiesa con media sonrisa. En esta ocasión, los tres vértices de esta historia de amor (y desamor) son Verónica Sánchez, Ernesto Alterio y Alberto San Juan; tres actores que ya han trabajado con Martínez-Lázaro. Los dos chicos formaron parte del elenco de 'El otro lado de la cama y 'Los dos lados de la cama', dos de los grandes éxitos españoles de la última década. Recaudaron entre las dos cintas 20 millones. «Ahora, si recaudas un millón de euros ya es casi un éxito. Tanto ha bajado la gente que va al cine», se lamenta Martínez-Lázaro. Alterio y San Juan son dos grandes amigos. El primero es un «payaso follador» (palabras del bonaerense) irresponsable, que se gana la vida en un club nocturno con su espectáculo y su nariz roja; el segundo, en cambio, es un presentador de televisión de éxito. Y entre los dos se cuela Verónica Sánchez, una violinista incapaz de sentir placer con el sexo. Una nueva vuelta de tuerca a un tema, el de las relaciones humanas, que «se trata desde la época de los griegos».

Martínez-Lazaro recurre a la actriz como voz principal de la película. «En un primer borrador del guion, no había ninguna escena en la que no saliera Verónica», confiesa el realizador, que ha querido darle otro toque cómico a 'La montaña rusa', que se estrena este viernes. «No tiene farsa. Es una comedia que tiene más raíces anglosajonas que españolas. Creo que es una historia mucho más realista que 'El otro lado de la cama', que en el fondo era un musical, y que necesitaba contarlo de la forma más realista posible», explica el realizador madrileño. «En la comedia española estamos acostumbrados a un humor como el sainete, que se elaboró a partir del siglo XIX y XX, o las películas de Lina Morgan y Alfredo Landa._Eran grandes actores con historias malísimas», añade.

Otra de las sorpresas que se guardó en la manga Martínez-Lázaro es el reparto de papeles. San Juan, por sus anteriores colaboradores con él como el peculiar taxista de las dos 'camas', parecía más predestinado para el papel de payaso loco. También barajó la idea, pero al final desistió. «Me gusta cambiar los papeles para que no se ajusten exactamente a sus características. Ya lo hice antes y es divertido. Además, cualquiera de los dos podía haber hecho el papel del otro», confiesa el director.