Interior de la Bolsa de Madrid. / Archivo
MERCADOS | MADRID

China y Grecia meten miedo a los parqués (y más al español)

El selectivo español se aleja de los 8.500 puntos | La prima de riesgo se mantiene en los 315 enteros

MADRID Actualizado: Guardar
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Las Bolsas comenzaron la semana con demasiados frentes abiertos: Grecia, China, el nuevo y más alto objetivo de déficit para España, el crudo, además de datos económicos que siguen apuntando en una misma dirección: recesión. Por su novedad, lo que más cotizó en los primeros cambios de la sesión fue la revisión a la baja de el objetivo de crecimiento de China desde el 8%, vigente desde 2005, hasta el 7,5%. Algunos analistas interpretan que esta reducción es un síntoma de que el país quiere reducir su dependencia de las exportaciones y la inversión en capital y aumentar el peso del consumo en su estructura económica, mejorando los salarios de la población. Pero, y parece que es lo más importante para los mercados mundiales, también implica que el Gobierno chino se encontrará cómodo con niveles más bajos de crecimiento y, por tanto, podría no ser tan activo en la puesta en marcha de políticas de estímulo tanto monetario como fiscal.

Aunque, el presidente Wen Jiabao, en su discurso sobre el Estado de la Nación, pronunciado en el Congreso Nacional del Pueblo, afirmó que el Gobierno mantendrá una política fiscal proactiva y una prudente política monetaria. Pero los índices de renta variable asiáticos no se lo tomaron demasiado bien: el MSCI Asia Pacífico, que había estado subiendo durante once semanas consecutivas, retrocedía un 1% después de conocer el discurso de Wen Jiabao. Además, el índice de actividad no manufacturera en India se desaceleró.

En Europa, la sesión comenzaba, precisamente, con la publicación de datos del sector servicios, en concreto, los datos de gestores de compras: Francia e Italia se colocaron por debajo de lo previsto. No así Alemania. Pero el conjunto de la zona euro se encuentra en terreno contractivo y en un nivel más bajo de lo esperado por los analistas. Además, el índice de confianza de los inversores en la zona euro mejoró menos de lo previsto y continúa en cifras negativas. La única alegría del día vino de la mano de la cifra de ventas minoristas, que se mantuvo plana, cuando los expertos esperaban un descenso del 1,5%.

El baile del crudo

Los malos datos económicos, sobre todo las malas referencias de China provocaron una primera caída del precio del crudo (el barril de Brent llegó a bajar hasta los 122,50 dólares), aunque al cierre recuperaba posiciones por encima de los 124 dólares. Y en sus primeros cambios de la sesión, el barril de West Texas subía ligeramente por encima de los 107 dólares. A esa recuperación del crudo pudieron ayudar los datos publicados en Estados Unidos que, efectivamente, fueron bastante buenos: el índice de confianza de los gestores de compras del sector servicios subió desde los 56,8 puntos hasta los 57,3, cuando los analistas esperaban que se situara en los 56 puntos. Además, los pedidos de fábrica cayeron un 1% en enero, frente al descenso del 1,5% que anticipaban los analistas. La Bolsa de Nueva York terminó a la baja el lunes, luego de las tomas de beneficio desatadas por un débil dato de crecimiento económico en China: el Dow Jones cedió 0,11% y el Nasdaq 0,86%

Respecto a Grecia, la incertidumbre estriba en el número de acreedores que irá al canje de deuda. Según publicaba el semanario alemán Der Spiegel, fuentes del Banco Central Europeo afirmaban que su número sería muy bajo y que se tendrían que activar las cláusulas de acción colectiva, es decir, se tendría que forzar el canje. Y parece que ése es el espíritu que reina en Grecia: "Ésta es nuestra mejor oferta", afirmó el ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos.

En el mercado de deuda, las primas de riesgo de España y de Italia volvieron a subir. Sobre todo la de España: marcó máximos en los 318 puntos básicos y cerró en los 314. La de Italia marcó su nivel más alto en los 320 puntos básicos y cerró en los 310. Por eso, parece que la sesión de ayer fue la primera desde agosto en la que la prima de riesgo de España en su plazo a diez años cerró por encima de la de Italia. Pero el interés del bono a diez años español se mantiene por debajo del 5%. España se ha puesto en primera línea para relajar el cumplimiento de los objetivos de déficit. Si sale mal, España será el saco de boxeo de los especuladores. Igual que si Grecia finalmente fracasa en el canje de bonos, cuyo veredicto conoceremos el jueves por la noche. Y ésta es la semana definitiva. Por eso, ayer, los seguros contra el impago subieron hasta máximos de las siete últimas semanas.

Por lo pronto, los efectos de la nueva inyección de liquidez del Banco Central Europeo han sido muy fugaces. No se sabe si porque estaba descontada o por la decisión del Gobierno español de plantear un objetivo más razonable de déficit para este año. Pero, además, el BCE lleva tres semanas sin comprar deuda en el mercado secundario. Ni siquiera portuguesa. Y en el interbancario sigue habiendo miedo: las entidades financieras depositaron 821.000 millones de euros en la facilidad de depósito del BCE.

Mercado de divisas

En el mercado de divisas, el euro, que llegó a caer hasta 1,3160 unidades, recuperaba posiciones a partir de primera hora de la tarde y se situaba en 1,3222 dólares al cierre de la sesión. En Bolsa, el Ibex-35 fue el peor índice, con un recorte del 1,28%, para dar un último cambio en los 8.453,50 puntos. Más lejos, el Dax alemán, que perdió un 0,79%. A continuación, el Ftse Mib de Milán, con un descenso del 0,68%, el Ftse 100 británico se dejó un 0,61% y el Cac 40 francés, un 0,39%.

Dentro del selectivo español, sólo cinco valores cerraron la sesión en verde. Indra fue el más rentable, con una revalorización del 4,01%, seguramente un rebote tras el fuerte castigo que sufrió a consecuencia de sus resultados y previsiones. A continuación, Dia, con una subida del 1,41%. Los avances de Grifols y de Endesa se acercaron al punto porcentual. Técnicas Reunidas fue la otra compañía que terminó la sesión con ganancias: se apuntó un 0,28%.

En el otro lado de la tabla, Abengoa, que cayó un 4,23%, en clara recogida de beneficios tras la subida de más de un 8% que ganó después de presentar sus cuentas. A continuación, Gamesa, que se dejó un 4%. ArcelorMittal y Sacyr Vallehermoso retrocedieron más de un 3%.

Entre los grandes valores, el peor fue Repsol YPF, con un descenso del 2,30%. De nuevo la petrolera española fue víctima de Argentina, porque la provincia de Chubut, la principal región petrolera de Argentina, amenazó a YPF con retirar sus concesiones en dos yacimientos si en una semana la empresa no presenta un plan de inversiones para aumentar su producción. A la zaga le seguía el Santander, que perdió un 2,04%. BBVA se dejó un 1,76%, Iberdrola, un 0,67%, y Telefónica, un 0,58%. Entre los peores también se situaron bastantes constructoras, como OHL, FCC, Ferrovial y ACS, que cayeron cerca de un 2%.

Fuera del Ibex, Adolfo Domínguez fue el valor que más ganó, con un avance del 9,86%. Sólo otros dos valores del Mercado Continuo, Banco de Valencia y Amper, fueron más rentables que Indra.