Las otras estrellas de la NBA
Para Jack Nicholson, sus Lakers son tan importante que incluye en sus contratos cláusulas que le permiten acudir a los partidos que los angelinos juegan en casa en medio de los rodajes
MADRID Actualizado: GuardarLa NBA es la liga más espectacular del mundo, sin duda. Pero el espectáculo no se concentra exclusivamente en la pista. Pese a que sobre la cancha se dan cita los mejores jugadores del mundo, todo lo que rodea a cada partido despierta tanto interés como lo que sucede dentro de él.
Si las plantillas las forman constelaciones de estrellas, en las gradas más cercanas al campo de juego se dan cita lo más granado del mundo del espectáculo hollywoodiense. En muchos casos, asistir a un partido de la NBA es absolutamente necesario para exhibirse. En otros, es la pasión por el juego y por los equipos lo que arrastra a los famosos.
El Staples Center de Los Ángeles disfruta noche tras noche de la mayor concentración por metro cuadrado de cantantes, actores y directores de toda la liga. A pie de pista es habitual ver a los protagonistas de las últimas películas en cartelera, a las figuras emergentes de la música y a las ‘it girls’ del momento. David Beckham, Justin Bieber, Leonardo DiCaprio, Cameron Diaz y el español Antonio Banderas suelen dejarse caer cuando los Lakers juegan en casa.
Pero si hay alguien que ha hecho del Staples Center una residencia casi habitual es Jack Nicholson. El genial actor es uno más en la franquicia púrpura y oro y los propios Lakers así lo consideran. El tres veces ganador del Oscar ha aparecido en vídeos promocionales y sus dirigentes suelen aprovechar para regalarle una tarta cuando su cumpleaños coincide con un encuentro de los angelinos.
Nicholson lleva su pasión por los Lakers a extremos sorprendentes. Mantiene desde hace décadas su silla tras el banquillo del rival, al que saluda y recibe como el mejor anfitrión pero al que castiga con sus ácidos comentarios desde que empieza el choque hasta que está resuelto. Habla con el entrenador, descentra a los jugadores y cuestiona puesto en pie junto a la mesa de anotación la labor de los árbitros. Para el protagonista de ‘El resplandor’, ver a su equipo es tan importante que incluye en sus contratos cláusulas que le permiten acudir a los partidos que los Lakers juegan en casa en medio de los rodajes.
Anthony Kiedis, cantante de los Red Hot Chili Peppers, ha dejado también que su amor por el equipo de Pau Gasol se vea reflejado en su trabajo y ha dedicado alguna de sus canciones a su franquicia del alma y a sus ídolos, como Magic Johnson.
Spike Lee, la estrella de los Knicks
Tras Nicholson, el otro caso más destacado del mundo del cine de entusiasmo por unos colores es el de Spike Lee. El territorio del director es el Madison Square Garden. Si la ciudad de Nueva York es un personaje más en sus películas, los Knicks son un amigo más en sus andanzas vitales. Sufre los malos momentos de su equipo como cualquier componente de la plantilla y sus roces con jugadores rivales han pasado a la historia de la liga. Así, Lee se convirtió en enemigo íntimo de la estrella de Indiana Reggie Miller. Ambos se brindaron palabras y gestos poco cariñosos cada vez que los Pacers visitaban Nueva York. Además, el director dedicó uno de sus films, ‘Una mala jugada’, al baloncesto y su trastienda y eligió para uno de sus papeles principales al actual jugador de los Celtics, Ray Allen.
A Eva Longoria le duró su pasión por la NBA lo que le duró el amor por Tony Parker. Mientras la relación entre el base de los Spurs y la actriz se mantuvo, la protagonista de ‘Mujeres desesperadas’ fue una fan más de San Antonio. De hecho, cuando los tejanos visitaban Lo Ángeles, la Longoria no era precisamente bien recibida por lo seguidores locales. Las infidelidades del base francés rompieron su matrimonio y su amor por el baloncesto.