Kevin López se despide con un monólogo
El sevillano, que renuncia al Mundial, gana en los 800 de un campeonato en el que Úrsula Ruiz logra la tercera mejor marca de la historia
SABADELL Actualizado: GuardarEn un rincón de la pista, donde muy pocos miran, siempre en los márgenes del atletismo, las lanzadoras iban a lo suyo. Ya están acostumbradas a competir al borde del haz de los focos. Pero allí, mientras tres sevillanos trajinaban por las medallas de la prueba estelar del fin de semana, los 800, toda la atención para ellos, una chica de Murcia, Úrsula Ruiz, se convertía en la estrella de unos Campeonatos de España en pista cubierta del siglo pasado, con marcas, en la mayoría de los casos, más propias de hace 20 años.
Mientras Luis Alberto Marco, siempre de manual en la pista cubierta, se desenvolvía con inusitada torpeza, mientras Antonio Reina se colocaba detrás de Kevin López, siempre de ariete, siempre convencido de sus opciones, directo al triunfo, Ruiz iba tejiendo el mejor concurso de su vida. Su serie estuvo repleta de premios. Más allá del oro, del título nacional, Úrsula Ruiz realizaba cuatro lanzamientos por encima de los 17 metros. Y el mejor de ellos, esos excelentes 17,63, elevaban su tope personal en un metro y veinte centímetros, lograba la mínima para el Mundial de Estambul y los Juegos de Londres, y ascendía al tercer escalón del ranking nacional de todos los tiempos, a 19 centímetros de Margarita Ramos y a 31 de Martina de la Puente, la asturiana que, ya de paisano, al borde de aquella esquina, felicitaba a su amiga.
No hubo muchas más grandes marcas. Ni más mínimas. Sí un récord, solitario, el júnior de pértiga de Didac Salas. Y buenos registros en velocidad, como los 53.50 que encumbran a Aauri Bokesa como la sexta más rápida de la historia en 400, o los 23.91 de Plácida Martínez en 200. Pero, al final, la gente se puso en pie con el mediofondo. Con Kevin López, que acaba con cuatro años de triunfos de su compañero Luis Alberto Marco, quien le pasó la guillotina en la recta a Antonio Reina, tercero. Kevin López, pese a que solo quedan dos semanas para el Mundial, ha anunciado que renunciará. ‘Pies calientes’ considera que llegar a Estambul significa dejar muy poco margen para preparar el Europeo de Helsinki, a finales de junio.
Quien sí viajará a Turquía será Javi Abad, que ha demostrado ser el mejor del invierno en un 1.500 donde los grandes -Olmedo, Casado, Higuero y Ruiz- han ‘desertado’. El pupilo de Enrique Pascual, como Manuel Olmedo, rebasó a David Bustos en un apretado final.