Juan Pablo frena al Atlético
Actualizado: GuardarJavi Clemente se estrenó con un punto al frente del Sporting porque sus jugadores mejoraron la actitud pero, sobre todo, porque Falcao convirtió a Juan Pablo en el héroe del partido. No tanto como Toño el pasado fin de semana en Santander, pero el portero evitó de nuevo la derrota local y un triunfo de los madrileños que les hubiera llevado a zona de ‘Champions’. Lo intentó todo Simeone para ganar, cambiando incluso a defensa de tres en el último tramo, pero de nuevo su equipo volvió a estar negado en el remate final. El único gol que marcó lo firmó Canella en propia meta. Y Eguren le endosó el primero después de siete partidos de la era ‘Cholo’. Tiene muy buena pinta un Atlético que murió en el área rival y se muestra voraz pero no resuelve los partidos y ya encadena tres empates consecutivos ante Valencia y dos equipos en descenso.
Ni el ‘clementismo’ ni el ‘cholismo’ entienden de espectáculo para la galería. Sus catecismos se resumen en el trabajo duro, la presión, el choque y el buen orden defensivo como premisas para llegar al éxito. Nada de intentar sacar el balón jugado desde atrás o de tocar en zonas de riesgo. Atrás, a romperla. Y arriba, acabar las jugadas o, si no, hacer enseguida una falta táctica. A partir de esos mandatos, luego tendría que decidir la calidad de los futbolistas. Y ahí tiene mucho más nivel el Atlético que el Sporting.
Desde el primer minuto, cuando Canella dejó un recado a un rival cerca de la banda, ya se vio que este equipo asturiano no se arrugaría y que intentaría marcar territorio en todas las partes del campo. No era ese grupo de amigos que en la primera vuelta salió goleado del Calderón sino un ejército de gladiadores. El Atlético venía de jugar el jueves en Roma y podría acusar el esfuerzo si el partido se hacía físico. Pero salió bien y muy pronto dispuso de un par de buenas ocasiones. Pero Juan Pablo, que tuvo la virtud de mantenerse en pie, superó a Falcao en el mano a mano y Godín cabeceó alto a portería vacía.
A tumba abierta
Como en El Sardinero, los madrileños perdonaban la vida al rival. Esta vez solo marcaron en una acción afortunada. Adrián se escapó, entró en el área, dudó entre tirar o pasar y la envió hacia afuera. Lo hizo mal pero Canella no pudo frenar su desesperada carrera y se la metió en propia meta. Con el 0-1, el Atlético dio un pasito hacia atrás y permitió crecer algunos minutos al corajudo Sporting. En los balones parados, los gijoneses inquietaron. Gregory tuvo el empate en un cabezazo franco antes de que Eguren igualara tras una acción embarullada. Al séptimo partido liguero, el Atlético de Simeone encajaba el primer gol. Lo celebró a lo grande un Molinón acostumbrado a las derrotas. Y también se felicitó de que, en las postrimerías del primer acto, Juan Pablo salvase un disparo de Diego que parecía gol o gol.
El choque se abrió en la reanudación. El Sporting salió de los vestuarios con la intención de dominar pero pronto tuvo que cerrar filas ante el acoso atlético. Falcao y Juan Pablo prosigueron una batalla de la que siempre salió airoso el portero. El Atlético perdió centro del campo sin Koke y sin Diego pero ganó profundidad con Pizzi y Salvio. Cuando entró Perea por Adrián, era para cambiar el dibujo y jugar con solo tres atrás. Pero Juan Pablo podía con todos. Incluso pudo ganar el Sporting. Lo evitó Courtois ante Colunga. Hubiera sido demasiado premio.