El Valencia agradece los límites del Stoke

El Valencia ejerció de aguafiestas en Stoke-on-Trent. En la localidad inglesa en la que principal atracción es su equipo de fútbol, el equipo español impuso su orden y sobriedad para obtener un resultado positivo para el encuentro de vuelta. Los miles de seguidores que acudieron a la inédita cita de un club con casi 150 años de historia que apenas se ha acostumbrado a la ‘Premier League’ observaron con impotencia como el previsible juego de su equipo resultó anulado por la organización de los de Emery.

Disfrutaron los seguidores locales durante los primeros minutos del juego de presión y empuje de los rojiblancos. Incluso uno de sus numerosos balones largos sorprendió en la primera jugada a Rami y Walters pudo animar a los parroquianos con un disparo a puerta. Pero resultó una sensación esporádica, porque Guaita nunca más tuvo que responder. Ni siquiera los anunciados saques de banda de Delap hallaron la cabeza de Crouch para rematar a puerta.

En cambio, el Valencia se agarró a su toque y al voluntarioso día de Feghouli, el más cercano al gol aunque con falta de inspiración en la tarea de anotar. Todo lo contrario que Topal. El turco miró solo en una ocasión a la portería rival y resultó letal. Un gran disparo desde fuera del área se colocó en la escuadra de Begovic y en la ventaja de la eliminatoria.

El resto del encuentro midió el balón raso y la velocidad de los españoles con el choque y la pasión de los ingleses. Ni siquiera los últimos minutos de gresca empañaron el buen trabajo de los ‘ché’. Se aplicaron los defensas al juego aéreo y ningún inglés disfrutó de ocasiones. El estudio previo al partido de Unai Emery resultó fundamental porque sus futbolistas se sirvieron del predecible y limitado del Stoke, un equipo de la zona baja de Inglaterra con solo un plan para atacar.

Al final, el Stoke acabó sin fiesta y el Valencia ganó por segunda vez en su historia en un campo inglés. La vuelta, en Mestalla el próximo jueves.