El esposo de Isabel II, operado de un bloqueo arterial

El duque de Edimburgo, de 90 años y esposo de la reina Isabel II de Inglaterra, fue sometido con éxito este viernes a una operación para eliminar la obstrucción una arteria coronaria, informó el Palacio de Buckingham. El príncipe Felipe fue llevado al Hospital Papworth de Cambridge después de «haber notado dolores en el pecho», según el palacio real. «Tras someterse a pruebas en el Hospital Cardiotorácico Papworth de Cambridge esta noche, al duque de Edimburgo le fue localizada una arteria coronaria bloqueada que era la causante del dolor», según el escueto comunicado de Buckingham.

Al príncipe Felipe le sometieron a una operación «poco invasiva» en la que le colocaron un «stent» (una cánula que se coloca en el interior de las arterias para evitar su atasco). El marido de Isabel II permanecerá «bajo observación en el hospital durante un breve periodo». El príncipe Felipe fue trasladado al centro hospitalario en helicóptero desde Sandringham House, la residencia de la realeza situada al sudeste de Inglaterra donde la familia real británica tomaba parte de las celebraciones navideñas, según la prensa británica.

El día de Navidad, los miembros de la familia real participan normalmente en una misa en la iglesia Santa María Magdalena situada en Sandringham. El príncipe Felipe, que festejó sus 90 años en junio, contrajo matrimonio con Isabel en 1947, cinco años antes de que se convirtiera en reina. Tienen en común cuatro hijos (Carlos, Ana, Andrés y Eduardo) y siete nietos. El duque de Edimburgo, muy activo -participa en todos los viajes oficiales y es padrino de 800 asociaciones- comenzó no obstante a reducir recientemente su ritmo de trabajo.

En octubre participó, sin embargo, en un viaje oficial de once días a Australia junto a la reina, durante el cual la pareja real visitó Perth, Melbourne, Canberra y Brisbane. El duque de Edimburgo tuvo una excelente salud la mayor parte de su vida. A los 80 años aún participaba en carreras de caballos con carros. En octubre, luego de un resfriado tuvo que abandonar un viaje en Italia. Su última hospitalización se remonta a 2008 por una afección en el pecho.

Salud notable

«Tiene 90 años, pero una salud notable», subrayó Margaret Holder, comentarista de los temas de la realeza de la BBC, tras el anuncio de su hospitalización. «Muchas personas a su edad no podrían soportar largos viajes de ida y vuelta, como los que él realiza», agregó. Tras 60 años como fiel compañero de la reina, se ha convertido en el más longevo de los príncipes consortes británicos.

«Estando casado con la reina, me parecía que mi primer deber era servirle lo mejor posible», admitió en el pasado. El primer ministro David Cameron rindió homenaje al príncipe Felipe en ocasión de su aniversario, subrayando que era «un compañero de todos los momentos» para la reina Isabel. «Nos sirvió con un sentido inalterable del deber», subrayó.

La prensa británica también reconoce al príncipe Felipe su labor al lado de la reina, pero también le ha reprochado en ocasiones su rudeza, sus difíciles relaciones con sus hijos y sus bromas, a veces, de mal gusto. En 1986, por ejemplo, aconsejó a unos estudiantes británicos que pasaban unos días en China que no permaneciesen allá mucho tiempo, «si no, se les van a achinar los ojos», les dijo. En otra ocasión, en una visita a Australia, le preguntó a un aborigen si aún lanzaba «flechas».