«Es preciso empezar de nuevo, con otros ideales y otras caras»
Javier Alonso de Linaje, psicólogo deportivo, reclama a los dirigentes "que ayuden al trabajador y al emprendedor, porque hay muchas personas válidas que no disponen del medio para alcanzar el fin"
MADRID Actualizado: GuardarResponsable de actividades del Centro de Estudios sobre Deporte Inclusivo (CEDI), destinado a fomentar la integración social de personas con discapacidad, con 31 años no dispone aún de un contrato laboral. Trabaja en el INEF gracias a una beca de la Universidad Politécnica de Madrid. Licenciado en Psicología especializada en deporte y técnico de esquí y montaña, Javier Alonso de Linaje no solo tiene experiencia educativa, sino también empresarial. Gestiona un club deportivo vinculado a un negocio familiar, Deportes Moya, que tiene casi tantos años de vida como él y que, pese a estar consolidado, ahora compite con gigantes, "perdiendo dinero".
"Los españoles estamos empobrecidos. Se han tomado iniciativas que no son las más convenientes, la situación se ha vuelto insostenible, y como sigamos así vamos a ir a peor", augura este joven que reclama a los dirigentes "que ayuden al trabajador y al emprendedor, al futuro empresario, porque hay muchas personas válidas que no disponen del medio para alcanzar el fin". "Si ayudamos a sacar las ideas adelante, ayudaremos al pueblo en general", asegura quien estima que España "está bastante peor que hace cuatro años", aunque en el ámbito deportivo destaca que "se ha mejorado mucho, gracias a la gestión que se ha llevado a cabo".
"Cuando una empresa privada participa en el deporte hay dinero y, en consecuencia, medios y resultados", proclama Javier Alonso, preocupado no solo por el paro, "el detonante que da cuenta de la situación global", y por las condiciones laborales, sino también por los recortes en Sanidad y Educación: "Es inquietante, porque son cada vez mayores en ambos ámbitos. Las reformas no han servido para nada, y ahora se dice que se quiere volver otra vez al Bachillerato, el sistema de enseñanza de hace 15 o 20 años que funcionaba en su día pero que no acaba de cuajar".
Igual que considera que "es necesario un cambio, para que el ciudadano note que hay una intención de que esto mejore y se pueda empezar de nuevo, con otros ideales y otras caras", reconoce que en el deporte, en general, "ha sido positiva" la actuación de CSD presidido por Jaime Lissavetzky: "Se ha tenido en cuenta la promoción deportiva, aunque nunca hay que olvidarse de la base". Lamenta, sin embargo, que en el caso de numerosos clubes, "las ayudas públicas en la Comunidad de Madrid han menguado en un 70-80%" y por tanto, los asociados también han disminuido, "porque en época de crisis, quien no tiene el deporte tan interiorizado ha recortado el gasto y practica por su cuenta, y este es el perfil que más fluye en la sociedad española".
Un cambio "drástico"
Pese a todo, él se considera un afortunado, porque el CEDI que investiga, promociona y asesora a los clubes está subvencionado por una empresa privada, e involucrado en un proyecto a cuatro años (Alianza Estratégica por el Deporte Inclusivo 2010-2015) creado por la Fundación Sanitas y el INEF. También cuenta con el apoyo de, entre otros socios promotores, el Comité Paralímpico Español, la Fundación ONCE y la Fundación Real Madrid. "No dejamos de recibir ayudas, pero siempre de la empresa privada, y estas ayudas han disminuido muchísimo", admite. "A nivel laboral y de oportunidades estamos todos muy comprometidos, y con una necesidad de cambio drástica. No sé si el cambio tiene que venir desde España, a nivel europeo, o incluso a nivel mundial, pero estamos en ese momento de cambio", insiste quien denuncia "el problema de los bancos y las hipotecas" y desearía "que se incentive económicamente a las empresas y que existan contratos justos para el trabajador".
No le gusta demasiado la política, "ni la figura del político, porque todos vienen a contar lo mismo y a hacerse con un puesto". "Las políticas pueden ser más o menos sociales, pero el fin es el mismo, cuando es fundamental tener en cuenta al ciudadano. Se han puesto parches a situaciones muy conflictivas que han ido creciendo y se han impuesto sacrificios que se deberían llevar a otros terrenos", subraya. En su opinión, los destinatarios de tanto recorte social deberían ser otros: "Habría que mirar más los cargos intermedios, públicos en muchas ocasiones, y tomar medidas por ahí".
Respecto al movimiento de los indignados, "apolítico, con el fin de exponer la situación actual", apunta que "es importante que la masa se pronuncie y que el pueblo esté involucrado y que haga que se le escuche". Sin embargo, no alberga esperanzas de que tenga éxito, "porque cuando los medios de comunicación se hacen eco y después se apartan al considerar que la noticia ha quedado desfasada, parece que el movimiento se descompone". "Se necesita mucha fuerza para que triunfe, y es complicado", reconoce este amante del deporte.