Martín Berasategui: «No entiendo una cocina sin sal ni un cocinero sin tecnología»
El chef, poseedor de tres estrellas Michelin, defiende la necesidad de que los niños aprendan a comer bien
MADRID Actualizado: GuardarMartín Berasategui tiene una misión todos los días. Acude cada jornada a una salita que tiene al lado de la cocina de su restaurante en Lasarte (Guipúzcoa). Conecta el ordenador y charla durante un rato con todos los responsables de los establecimientos que tiene en Barcelona, Sevilla, Tenerife, Barcelona y Shanghái.
Ahora, a esta múltiple conexión se han unido nuevos responsables de varios hoteles caribeños de Melia donde el chef se ha implantado. Habla con ellos para perfilar los menús e intentar resolver las dudas que surjan. "Mando a responsables de mi cocina para que vean como va y después hago uno o dos viajes al año. Además, mi cocina está abierta todo el año para que estos responsables vengan y vean con sus propios ojos las últimas creaciones", explica. Berasategui cree "fundamental el trabajo en equipo" para que todos sus proyectos salgan adelante, al igual que Internet. "Al igual que no entiendo la cocina sin sal, tampoco entiendo un cocinero sin las nuevas tecnologías", dice con rotundidad.
Con la misma firmeza defiende, en Fruit Attraction 2011, la feria hortofrutícola del sector español, la necesidad de que los niños aprendan a comer bien. "Tenemos que crear una asignatura para que dietistas, nutricionistas y cocineros nos juntemos y hagamos que los niños crezcan sabiendo mucho más de algo tan importante como es la alimentación", comenta en el stand de Salanova. El chef guipuzcoano, poseedor de tres estrellas Michelin, se une a una tesis defendida por su colega Ferrán Adriá y el cardiólogo Valentí Fuster, que ya hace tiempo reclamaron una mayor implicación de las autoridades a la hora de planificar qué comen los más jóvenes en los colegios y en sus casas.
"Podemos ser pioneros en el mundo. Un país tiene otra alegría, otro entusiasmo y otra chispa si está bien alimentado. Tenemos que darle importancia porque es algo que hacemos todos cada día", insiste Berasategui. "Tenemos que enseñar a la raíz, que son los niños. Una parte importante de este país es la alimentación y la cocina. Tenemos que empezar a enseñárselo no solo a la gente que tiene dinero para pagarlo, sino a nuestro futuro", culmina.