Downing Street reconoce que Fox «cometió errores»
El titular de Defensa es el centro de una fuerte polémica por permitir a su amigo Adam Werrity a reuniones y viajes oficiales
LONDRES Actualizado: GuardarEl ministro de Defensa británico, Liam Fox, cometió "graves errores" al permitir a su amigo Adam Werrity asistir a reuniones y viajes oficiales, dijo hoy Downing Street, residencia oficial del primer ministro, según la BBC.
Un portavoz de Downing Street calificó ese tipo de relación entre el ministro y su amigo como "inapropiada" después de que Fox revelara hoy en el Parlamento que Werrity le acompañó en 18 viajes al extranjero y se reunió con él en su despacho en 22 ocasiones sin tener ningún tipo de cargo oficial.
Downing Street considera que las diferencias entre las responsabilidades profesionales y la lealtad personal no están claras en este caso, lo que ha hecho aumentar la "preocupación" entorno a un "potencial conflicto de intereses".
Esta valoración se produce después de que esta mañana el primer ministro, David Cameron, haya manifestado su "total apoyo" al titular de Defensa y que haya asegurado que quiere conocer los hechos antes de llegar a una conclusión sobre la actuación del ministro de Defensa, procedente del ala derecha del Partido Conservador.
Comparecencia en el Parlamento
En una comparecencia en el Parlamento, Liam Fox, aseguró que su amigo Adam Werritty nunca recibió dinero del Ministerio ni accedió a documentos confidenciales.
Fox tuvo que comparecer ante la Cámara de los Comunes para explicar sus vínculos con Adam Werritty, quien le acompañó en viajes oficiales, asistió a reuniones y tuvo acceso al Ministerio sin tener autorización de seguridad, lo que ha levantado sospechas entorno a una posible violación del código de conducta ministerial. En este sentido, el ministro conservador explicó que la cuestionada relación con su amigo siempre se mantuvo en una "esfera social" a pesar de admitir que le acompañó en 18 viajes oficiales.
Según la prensa, se trataba de una reunión destinada a vender al ministerio de Defensa tecnología de cifrado de voz (para proteger las llamadas telefónicas), si bien Fox ha insistido en que el encuentro fue casual y la charla se desarrolló durante una cena. Sin embargo, "The Guardian" informa hoy de que el empresario en cuestión, identificado como Harvey Boulter y que trabaja en Dubai, llegó a pagar más de 10.000 euros al mes a grupos de presión para conseguir una entrevista con el ministro.