Mourinho: «El Real Madrid no puede tener un presidente mejor que Florentino»

Florentino Pérez ha vinculado su destino al de José Mourinho y, tras la cerrada defensa del presidente al entrenador durante la asamblea del Real Madrid, el portugués le correspondió este sábado con una alabanza de las que dejan huella y debería fortalecer aún más una relación que hasta ahora parece indestructible. “El Real Madrid puede tener un entrenador mejor que Mourinho y jugadores mejores de los que tiene, pero no puede tener un presidente mejor que Florentino”, sentenció el técnico la víspera de enfrentarse al Espanyol en Barcelona, donde los blancos acabarán la jornada casi a la medianoche.

Mourinho está encantado con el apoyo público de Florentino, escenificado también en el vestuario de El Sardinero con el abrazo que dedicó al portugués tras una derrota y un empate que debilitaron su posición, y feliz también porque su teoría de la conspiración esté, según él, cerca de alinearse con el pensamiento de los veteranos del club. “Que digan que el señorío siempre ha sido con jugadores a muerte, sudando la camiseta y luchando hasta el final por la gloria del Real Madrid contra la injusticia, es mi mayor alegría”, destacó ‘Mou’ durante una sosegada rueda de prensa en la que mostró una cara amable, huyó de polémicas y ataques irónicos, y estuvo bromista con los periodistas.

El técnico blanco, que también parece dispuesto a comportarse de forma más afable y dialogante con sus futbolistas, respondió sin ninguna crispación a cada pregunta que se le formuló. Con un perfil nada agresivo, sino conciliador. Sin embargo, debe estar preocupado por las bajas, porque a última hora se cayó de una convocatoria muy justa Carvalho, a causa de una lumbalgia, y se sumó a las ausencias de los lesionados Benzema, Pepe y Coentrao y del sancionado Di María. Animó a Higuaín y aseguró que “no es ningún drama” no contar con Benzema contra el Espanyol ni frente al Betis, hizo lo propio con Kaká, y dejó claro que no le gusta “que se dijese que hace un mes era un desastre y ahora ha vuelto a ser el mejor del mundo”. “Hay que ir con tranquilidad con Kaká porque lo queremos a tope siempre. No debemos estropear el trabajo hecho y es importante que esté en el campo bien, con salud, fuerza y alegría. Tenemos que hablar con él, porque si no está a tope es mejor que mañana no empiece el partido”, aclaró, por lo que dejó en el aire que el brasileño vuelva a coincidir con Özil en el equipo titular.

La idea de la barbacoa

Una vez que “la semana negativa se ha terminado”, Mourinho está bastante más tranquilo, y el viernes, como muestra de unión y distensión del preocupante ambiente que se vivía en el club, decidió invitar a una barbacoa a sus jugadores, algunos de los cuales están muy a disgusto por sentirse despreciados por el técnico (caso de Albiol, Granero, “chico inteligente, pensador y filósofo”, o Callejón). Este sábado aseguró que la idea de la barbacoa de Valdebebas que algún medio ya adelantó el jueves, fue espontánea, y no suya, sino de alguien cercano a él, “con mucha sensibilidad, que propuso comer diferente arriba, en vez de hacerlo encerrados abajo en el salón”.

“Me gustó tanto el entrenamiento de la mañana, en el que los jugadores demostraron muy buena aplicación, que decidimos aprovechar para la reunión”, señaló el luso, satisfecho del compromiso de una plantilla a la que recuerda que “ya se han perdido cinco puntos en la Liga”, por lo que espera que no falle ante el Espanyol, “un equipo que juega fantástico y con un entrenador con la cabeza muy clara”. Por ello, está convencido de “un partido en dos direcciones, no como ocurrió en Santander y Levante”. “No terminará 0-0 o con un gol caído del cielo”, aventuró.