Don Felipe: «Nada justifica la barbarie terrorista»
Los Príncipes de Asturias han participado en la inauguración en París del VII Congreso Internacional sobre Víctimas del Terrorismo
PARÍS Actualizado: GuardarFrancia y España se han puesto hoy como ejemplo en materia de lucha contra el terrorismo y han resaltado que ambos países disponen de todos los elementos para afrontar ese combate, por lo que lo único que se requiere es mantener el clima de confianza existente.
El VII Congreso Internacional sobre Víctimas del Terrorismo, inaugurado en París con la presencia de los Príncipes de Asturias, ha servido para que representantes de ambos países se hayan congratulado de un modelo "ejemplar por su intensidad".
"La cooperación hispano-francesa ha sido modélica y debe seguir inspirando la concertación internacional en la materia", ha señalado Don Felipe en la apertura de un acto que reúne hasta el próximo sábado a 450 participantes de 35 países.
"Si respetamos a España es porque hizo el esfuerzo de la democracia" y porque, pese a que una fracción de su población siguió eligiendo al terrorismo como modo de expresión, el país luchó contra el terrorismo con la ley y no aceptó los métodos terroristas, ha explicado por su parte el Ministro francés de Defensa, Gérard Longuet.
Ejes de la colaboración
Los intercambios regulares entre el personal dedicado en España y Francia a la lucha antiterrorista, la creación de equipos comunes de investigación y los acuerdos alcanzados entre la Policía Científica y Técnica han sido los tres ejes destacados de la colaboración entre ambos países en este ámbito.
"Francamente pienso que disponemos de todos los elementos técnicos para trabajar", ha añadido en una mesa redonda el subdirector encargado de la lucha antiterrorista en la Dirección General de la Policía Nacional francesa, Éric Vouilleminot.
Entre las cifras que han servido como reflejo de esa labor conjunta, las 100 peticiones de comisiones rogatorias al año por parte de las respectivas autoridades, el hecho de que los mandatos de arresto se ejecuten "en una media de trece días", o que entre 2004 y 2009 fueran entregadas a España 189 personas reclamadas por la Justicia.
Se ha destacado no obstante que ETA sigue utilizando el territorio francés en cuestiones logísticas, ya sea para servirse de coches o de otros suministros, y se ha hecho un llamamiento a no bajar el nivel de alerta contra una lacra que, según Longuet, "quiere obligar a las instituciones a alejarse de las leyes del Estado".
"El primer principio que se debe tener claro es que los criminales son terroristas. Cuando los operativos tienen dudas al respecto hacen que no se pueda avanzar", ha precisado el exdirector de la Policía y presidente de Les Corts Valencianes, Juan Cotino. Todo ello teniendo en cuenta, a su juicio, que a las víctimas "nunca se les puede llegar a pagar la deuda pendiente" porque su deuda es la pérdida de un ser querido, por lo que "debemos darnos cuenta de esa realidad" y más allá de la misma reconocer "la obligación de hacer" todo lo posible.
Testimonios de las víctimas
Las víctimas, protagonistas de este congreso, han centrado con sus testimonios una de las partes principales de la jornada, y en tanto que representante de las mismas, el director general de la Asociación Francesa de Víctimas del Terrorismo (AFVT), Guillaume Denoix, ha asegurado que su "historia y dignidad es lo mejor" que pueden ofrecer en esta lucha.
Afectados por los atentados de Casablanca en mayo de 2003, en Jerusalén en junio de ese mismo año, en Azerbaiyán en 1991, en Tanzania en 1998 o en Bombay en 2008 han puesto "voz y rostro" a la otra cara de "una barbarie" no justificable ni por "unas ideas, un proyecto político, unas creencias o la apelación a diferencias étnicas o culturales", según ha destacado el príncipe de Asturias.
Esta cita se celebra por primera vez en un país no hispanohablante y el próximo año volverá a España, donde se instauró en 2004, y desde entonces se ha ido alternando con Colombia. Como deseo de fondo del encuentro, la confianza de que la experiencia de víctimas y autoridades sirva a otros, y que con ello pueda mitigarse en parte la incomprensión que sienten algunos afectados ante el hecho de que los terroristas recurrieran a la fuerza "pudiendo utilizar otros mecanismos".