La música que las bolsas quieren oir
La acción coordinada de inyección de liquidez permite al selectivo español apuntarse un alza del 3,63%
MADRID Actualizado: Guardar"Cuando parece que va a ocurrir lo inevitable, surge lo imprevisto". Esta frase de Keynes ahora está cobrando más sentido que nunca. Cuando parecía que las Bolsas se iban a hundir e iban a llegar a los mínimos del año 2009, los gobiernos y los bancos centrales se ponen las pilas y comienzan a actuar. La experiencia es un grado. Las autoridades no actuaron durante la crisis de crédito de 2007 y 2008 y el resultado fue la quiebra de Lehman Brothers y el colapso de otras muchas entidades a uno y a otro lado del Atlántico. Quienes están al frente de los Estados y de las autoridades monetarias ya conocen la medicina que hay que utilizar y que ésta funciona. Vamos por buen camino, aunque aún queda mucho por caminar. Pero está claro que ésta es la música que las Bolsas quieren escuchar.
La conversación telefónica que mantuvieron el miércoles Angela Merkel, Nicolás Sarkozy y Yorgos Papandreu surtió más efecto del que se esperaba. Los mercados se han visto satisfechos con el reiterado compromiso de Grecia de que cumplirá con las exigencias de sus socios y el miércoles por la noche tomó nuevas medidas de austeridad. A los inversores también les gustó que Merkel y Sarkozy insistieran en que quieren a Grecia dentro del euro.
Y la actuación coordinada de los bancos centrales (el Banco Central Europeo, la Reserva Federal norteamericana, el Banco Nacional Suizo y el Banco de Japón) para desatascar el interbancario en dólares con tres inyecciones de liquidez en billete verde a tres meses en lo que queda de año. Esta actuación confirma los rumores crecientes de las últimas semanas que apuntaban a la posibilidad de que algunos bancos, fundamentalmente los franceses, pudieran estar teniendo problemas para financiarse en dólares.
¿Soluciona esta actuación los problemas que ahora sufre el mundo? Chris Scicluna, de Daiwa Capital, explicaba en declaraciones a Bloomberg: "Esto aborda un pequeño problema que hay en los mercados en este momento. Hasta que no haya una respuesta global a la crisis de deuda, que es lo que ha estado alimentando las dudas sobre la salud del sector financiero europeo, la banca del Viejo Continente seguirá bajo presión". Y en la misma dirección se manifestó John Taylor, de FX Concepts, también en declaraciones a Bloomberg: "El plan coordinado para prestar dólares a los bancos europeos no soluciona el problema subyacente".
Ánimo para los mercados
Pero el anuncio de esta acción coordinada ha insuflado más ánimos a los mercados. El Ibex-35, que ya estaba en positivo y por encima de los 8.200 puntos, gracias al buen resultado de la subasta de deuda española, escaló hasta los 8.450 puntos al conocerse la noticia y, a continuación, se enfrió ligeramente para dar un último cambio en los 8.337,90 puntos. El Ibex fue el índice más rentable de la sesión, seguido del Ftse Mib de Milán, que ganó un 3,55%. El Cac 40 francés, el PSI-20 de Lisboa y el Dax se apuntaron más de un 3%.
En el Eurostoxx 50, los valores más rentables fueron BNP, con una revalorización de más de un 13%, Intesa SanPaolo, con un avance de más del 10%. Unicrédito, Allianz, ING y Axa ganaron más de un 6%, mientras que Crédit Agricole, Deutsche Bank y Société Générale ganaron más de un 5%.
¿Son sostenibles las subidas? Ricardo Torrella, analista de Interbrokers, escribía en su twitter: "La bajada del oro y del bund, el sentimiento inversor, junto con un cambio de discurso de los políticos dan algo más de credibilidad a este rebote".
En el selectivo español, BBVA lideró los avances, con una revalorización de un 5,39%. Justo lo mismo que Iberdrola. También Santander ganó más de un 5%. Entre los mejores igualmente, ArcelorMittal, con un repunte del 4,84%, mientras que Bankinter avanzó un 4,73%. Red Eléctrica y Técnicas Reunidas ganaron alrededor de un 4,5%. Gamesa y Gas Natural fueron los otros valores que se apuntaron más de un 4%.
Entre los grandes, también destacó Telefónica, con una revalorización del 3,78%, mientras que Repsol YPF se apuntó un 2,51%. En rojo, únicamente dos valores: Indra, que retrocedió un 0,77%, mientras que Grifols cayó un 0,57%. Entre los valores que menos subieron, BME, IAG y Ebro. Fueron los únicos que ganaron menos de un punto porcentual.
En el Mercado Continuo, el mejor fue Dermoestética, con una revalorización del 8,70%. También Vértice ganó más de un 8%. En el otro lado de la tabla, San José, que retrocedió más de un 6%. A continuación, Reyal Urbis y Dinamia perdieron alrededor de un 4,9%.
En el mercado de divisas, el euro fue el que más partido le sacó a la actuación coordinada de los bancos centrales. Cuando se anunció la medida, la moneda única comunitaria se disparó de 1,372 hasta rozar 1,39 unidades. Al cierre de la sesión se situaba en 1,387 unidades.
En el mercado de deuda, la prima de riesgo de los bonos españoles se mantuvo en el 3,47%. Pero el interés de los bonos a diez años subió del 5,35% hasta el 5,40%. Este movimiento se compensó con la subida de la rentabilidad del "bund", desde el 1,87% hasta el 1,92%, ante la menor aversión al riesgo de los inversores. Y lo mismo sucedía con los bonos americanos. En su plazo a diez años, el interés subía hasta el 2,07%.
En el mercado de materias primas, el barril de Brent, de referencia en Europa, se disparó hasta superar los 115 dólares, frente a los poco más de 111 dólares a los que había cerrado la sesión anterior. En Estados Unidos, el barril de West Texas se encaminaba hacia los 90 dólares. Es el efecto de la depreciación del dólar. Mientras, el oro cayó con fuerza hasta los 1.780 dólares por onza. Había comenzado la sesión por encima de los 1.820 dólares.
En la agenda macroeconómica de la sesión, contamos con datos procedentes de Estados Unidos, como la producción industrial, que fue mejor de lo esperado por los analistas. Aunque el índice manufacturero Empire State cayó más de lo previsto. Y el paro semanal aumentó más de lo anticipado. Pese a todo, los índices estadounidenses comenzaban la sesión con ganancias también gracias a los bancos centrales.