Los partidarios del 'no' denuncian que se ha roto el consenso
Las formaciones contrarias a la reforma constitucional han sido especialmente críticas y piden que el texto se vote en referéndum
BARCELONA Actualizado: GuardarLas fuerzas que han votado no a la toma en consideración del proyecto de reforma de la Constitución, todas menos PSOE, PP, CC y UPN, se han mostrado muy críticas con la "forma" y el "fondo" del proyecto pactado por socialistas y populares, a quienes han acusado de haberles ninguneado en el proceso negociador y de haber roto el consenso constitucional. CiU, IU, ERC, BNG, Nafarroa Bai y UPyD (el PNV no se han posicionado) han reclamado además que la modificación de la Carta Magna sea votada por la ciudadanía en referéndum.
"Todos sabemos, aunque duela, que no es de recibo una reforma exprés en cuatro días", ha recriminado el portavoz del grupo nacionalista catalán, Josep Antoni Duran i Lleida, que ha dado la sorpresa porque Convergencia no ha votado ni a favor ni en contra. Y sobre el fondo, ha reiterado que no es necesaria una modificación constitucional para garantizar la estabilidad presupuestaria porque “rompe el consenso y lamina la capacidad financiera de las autonomías”. Y sin autonomía financiera “no se puede hablar del estado de las Autonomías", ha rematado. En cualquier caso, CiU deja abierta la puerta a un posible acuerdo, siempre y cuando se tomen en cuenta las tres enmiendas que presentarán. "Ustedes (PSOE y PP) me piden una adhesión. Veremos si es posible algún tipo de acercamiento", ha concluido.
El PNV también ha señalado que comparte la idea de que es necesario un equilibrio presupuestario, pero en su caso se niega a que este principio sea constitucionalizado. Según Josu Erkoreka, que ha denunciado el "rodillo" que están aplicando las mayorías, la reforma "supone un atropello a los procedimientos democráticos", "es irrespetuosa con la estructura del estado", "ineficaz", "innecesaria" y "antieuropea". El PNV ha anunciado que si la reforma constitucional es algo tan "nimio" y trivial" presentará sus propias enmiendas con su propia propuesta de modificación.
Un "golpe" a la oposición
En cualquier caso, los más duros con la transformación de la Carta Magna han sido los representantes de IU y ERC. Gaspar Llamazares (IU) ha llamado a los diputados del PSOE a rebelarse contra una reforma que ha tachado de "golpe a la Constitución y secuestro de la voluntad popular". "Esta es una forma moderna de abrir un periodo de involución democrática", ha afirmado Llamazares. "La soberanía popular ha sido sustituida por la soberanía de los mercados", ha añadido. Y de forma enérgica, ha concluido dirigiéndose al presidente del Gobierno: "No soy corrresponsable de este golpe a la Constitución. Puede despeñar a su partido, pero no tiene derecho a matar moscas a cañonazos cargándose la Constitución". Joan Ridao (ERC) también ha sido especialmente duro con los dos partidos mayoritarios. "Con tanta prisa se han olvidado de los ciudadanos. Han humillado la capacidad de debate. Esta reforma de lo que se trata es de una imposición del BCE y de la derecha europea", ha afirmado. Según Esquerra, la reforma es ideológicamente peligrosa, realizada al dictado "neocon" de Aznar y "perpetúa la aniquilación de las políticas keynesianas". "Se carga el último resquicio que les quedaba a las comunidades en su autonomía financiera", ha dicho. Tras reiterar su petición de un referéndum, se ha dirigido a las fuerzas catalanistas a las que ha instado a "no participar en un grave atentado a la gestión de las comunidades autonómas".
Uxue Barkos (NaBai), que ha recibido una calurosa ovación tras su regreso al Congreso después de someterse a un tratamiento contra el cáncer, también ha reclamado un referéndum para una reforma que a su juicio es de "calado" e "inadmisible". "No se entiende el miedo a que la gente se exprese", ha proclamado. Rosa Díez, de UPyD, ha apelado a los diputados que votarán en contra de lo que les dicta su conciencia. "Esto es una chapuza jurídica y un atropello democrático ", ha aseverado. "Tienen miedo a la democracia", les ha criticado a PP y PSOE. En esta línea, el representante del BNG ha señalado que "hoy es un mal día para la democracia y la autonomía de los pueblos", sometida a los "halcones europeos". "Demandamos a todos los diputados demócratas valentía de ir a un referéndum", ha concluido.