El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez. / Efe
Boletín Económico del Banco de España

La economía española se desacelera y crece un 0,2%

El PIB español se deja una décima en el segundo trimestre del año y en la tasa interanual, que crece un 0,7%

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La economía española se desaceleró en el segundo trimestre del año y creció un 0,2% intertrimestral, una décima menos que en los primeros tres meses del año. En tasa interanual, el PIB español también se dejó una décima y creció un 0,7%, según el último Boletín Económico del Banco de España.

El banco emisor apunta a una "recuperación débil" en el segundo trimestre de este año, que se debe, en parte, al retroceso de la demanda nacional, en un entorno marcado por el "agravamiento de la crisis de la deuda soberana en la zona euro". El Banco de España señala que la demanda nacional cayó un 1,9% interanual en el segundo trimestre, pero explica que en el mismo periodo de 2010 se produjo un volumen "excepcional" de gasto por la anticipación a la subida del IVA en el mes de julio. En este sentido, la desaceleración interanual del PIB hasta el 0,7% en el segundo trimestre estaría "influida" por este crecimiento inusual de la actividad en el mismo periodo de 2010.

Ahora bien, el indicador de demanda nacional también descendió un 0,2% en términos intertrimestrales, lastrada por la "atonía" del consumo privado, en un contexto de paro "poco propicio" para el gasto, por la debilidad de la inversión en construcción y, en menor medida, por el descenso del consumo público. En cuanto a la actividad de las empresas, el Banco de España señala que la inversión "acusó el clima de incertidumbre y de inestabilidad financiera" y mantuvo un tono de "debilidad".

Terremoto de Japón y 'crisis del pepino'

Otros elementos que han llevado a esta ralentización del crecimiento de la economía han sido, por el lado de la oferta, el "debilitamiento" de la actividad industrial, debido en parte por el parón en la distribución que supuso el terremoto de Japón, y la alteración en la producción agrícola que supuso la 'crisis del pepino'.

No obstante, en tanto que estos factores son transitorios, la senda de la recuperación de la producción industrial debería restaurarse en los "próximos trimestres", más aún si retorna el tono exportador de los primeros meses del año.

Fortaleza del sector exterior

En cuanto al sector exterior, el Boletín señala que tanto el ritmo de avance de las exportaciones como, en mayor medida, el de las importaciones, se desaceleraron en el segundo trimestre del año, aunque el comportamiento de las ventas al exterior siguió siendo "muy dinámico", lo que permitió un "leve aumento" de la cuota de las exportaciones españolas en términos reales en la primera mitad del año. En el terreno de las fortalezas, la institución remarca también que la reforma de las pensiones "constituye un paso de gran alcance para asegurar la sostenibilidad del sistema de pensiones".

En materia de precios, el Banco de España ha señalado que el IPC llegó a alcanzar el 3,8% en abril, si bien descendió hasta el 3,2% en junio, y apunta que "en los próximos meses" esta tendencia a la baja "debería continuar" al absorberse el impacto que tuvo en los precios el aumento del IVA en julio de 2010.

Superar el clima adverso

El Banco de España considera, a su vez, que la superación del actual clima adverso derivado del recrudecimiento de la crisis de deuda depende de que, a nivel europeo, se pongan en marcha "con decisión y claridad" los compromisos acordados en la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del pasado 21 de julio, aunque avisa de que "la contención de los procesos de contagio exige también respuestas enérgicas de las políticas económicas nacionales".

La institución señala que el aumento de la incertidumbre en los últimos meses "ha acentuado" los riesgos a la baja sobre el crecimiento, y advierte de que las posibles repercusiones de las tensiones en los mercados de deuda soberana sobre la economía real "son la fuente principal de riesgos".

Así, a nivel interno, recuerda que a lo largo del último año se han adoptado en España "importantes reformas" en el ámbito fiscal y de pensiones, en el mercado de trabajo y en el sistema financiero, pero considera que "una pronta y ambiciosa culminación de las mismas contribuiría a reducir la incertidumbre y a restablecer una situación de crecimiento más sólida".

En resumen, el Banco de España señala que la evolución económica de los últimos meses dibuja una situación cíclica de recuperación "débil", apoyada en el dinamismo de la demanda exterior neta. Este patrón de salida de la crisis refleja la corrección de los desequilibrios macroeconómicos acumulados, "cuya culminación resulta imprescindible para restaurar una pauta de crecimiento sostenido, aun cuando limite la capacidad de crecimiento a corto plazo".