FORMACIÓN UNIVERSITARIA

La difícil elección entre oportunidad y vocación

Los jóvenes estudiantes deben optar por una carrera que les lleve por el camino adecuado o la opción que les apasiona

MADRID Actualizado: Guardar
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Elegir siempre es complicado. Es una acción que en el mismo momento de ejecutarla, supone que descartes otras opciones. En ocasiones, no siempre, esa elección no tiene marcha atrás y marcará tu vida.

Los jóvenes que desean continuar formándose una vez han terminado el Instituto, deben plantearse qué quieren estudiar o a qué se quieren dedicar en el futuro, que son dos cosas diferentes. La disyuntiva de vocación u oportunidad entra en escena y se convierte en la incógnita a despejar en la decisión final de los alumnos. El resultado será la carrera que finalmente elijan.

Entre los estudios más solicitados y demandados por las empresas destaca Administración y Dirección de Empresas. Los licenciados en esta ocupación obtienen los conocimientos necesarios para poner en marcha su propia empresa, aunque lo más habitual es que se incorporen a tareas de gestión de compañías ya establecidas. Las áreas más adecuadas para ellos son el marketing, el departamento financiero, el de producción, el comercial y la contabilidad.

Las Ingenierías de Industrial, Informática y Telecomunicaciones, también pertenecen al grupo de estudios preferidos por los jóvenes y con mayor demanda en el sector empresarial. El paro aquí es inexistente, pero la duración y dificultad de esta carrera disminuye el interés de los estudiantes.

En Medicina existe una gran bolsa de desempleo en España. La especialidad elegida una vez terminada la facultad es una de las claves para el futuro laboral de estos profesionales, que tras licenciarse deben realizar el examen MIR (Médico Interno Residente). Una vez hayan elegido una materia específica es cuando deben buscar un empleo, bien en la sanidad pública, bien en la privada, en un laboratorio o en la industria farmacéutica. Precisamente Farmacia es el caso opuesto, ya que apenas hay paro. Poner en marcha la suya propia es una salida habitual, pero ni mucho menos la única. Estos titulados también pueden especializarse en la investigación o ser contratados en empresas alimentarias, químicas, veterinarias, del sector del medio ambiente, cosméticas, de perfumes. Enfermería es otra de las elecciones relativas a este sector.

Las grandes perjudicadas

Sin duda las grandes perjudicadas son las carreras de Humanidades que sufren los estragos del mercado laboral. La demanda en Filosofía y Geografía e Historia es escasa. La docencia es una de las salidas laborales más habituales. Pueden reconducir su trayectoria hacia los medios de comunicación y el mundo editorial.

Otras, como Derecho, tienen una gran demanda, pero también un exceso de oferta. Es muy importante la especialización a la hora de abrirse paso en el mundo del trabajo. Muchos deben completar su formación con estudios de postgrado o mediante los programas mixtos jurídico-económicos de algunos centros.

En la elección de los estudiantes, la oferta y la demanda son dos aspectos importantes que no se pueden dejar pasar por alto. Sin embargo, por encima de ellos está uno mucho más significativo: la vocación de cada uno. Hay jóvenes que la atienden a la hora de decantarse por el camino que realmente les apasiona. Otros le tapan la boca y solo escuchan a quienes les aconsejan que estudie lo que “más salidas tiene”. En fin, la eterna pelea cabeza-corazón, esta vez, vocación-oportunidad.