Interior de la Bolsa de Madrid. / Foto: Archivo | Vídeo: Europa Press
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El Ibex, bailando a ritmo de Sirtaki

El selectivo cierra en los 9.936,7 puntos, tras anotarse una subida del 0,65%

MADRID Actualizado: Guardar
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"Bailando al ritmo del sirtaki", así titulaba uno de sus comentarios diarios José Luis Martínez, estratega de Citi, haciendo alusión al baile tradicional griego, un ritmo que también parecen haber adoptado los mercados. "Sigo pensando que es complicado explicar en cada momento la reacción del mercado", aseguraba este martes Martínez. Y la jornada de este martes volvió a ser complicada, aunque su saldo fue positivo en general para todos los indicadores de renta variable europeos. "¿Se ha beneficiado el mercado de la aceptación de Alemania de la propuesta francesa para la participación privada en el ajuste de la deuda griega? Es la única explicación", asegura Campuzano.

De hecho, el repunte que registraron los indicadores europeos a partir de las dos y media de la tarde coincidía con la publicación de la noticia de que los bancos alemanes estarían de acuerdo, en principio, con la adopción de la solución francesa a la crisis griega. Pero con eso mismo se había especulado durante el día anterior. Así, según Campuzano, "aunque una subida del 0,7% en las Bolsas mundiales, como la que vemos hoy, también parece responder a un mayor optimismo sobre el respaldo final del Congreso griego al plan de ajuste". Las crónicas explicaban la subida bursátil, la del euro y la de las deudas periféricas aludiendo a la esperanza existente en el mercado de que, finalmente, Grecia aprobará el plan de austeridad y esquivará el impago. Pero, tras el cierre de la sesión en Europa, el líder de la oposición helena volvió a reiterar su voto en contra.

Pero, antes de que se publicara esa noticia, hubo mucha volatilidad, porque hubo muchas noticias contrapuestas. Por ejemplo, las declaraciones del presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, en que afimaba que la autoridad monetaria europea ya se encuentra en modo de "fuerte vigilancia", lo que adelanta una inmediata subida de los tipos de interés, posiblemente, en la reunión de la próxima semana. Y, en relación con ello, este martes se conocía que la tasa de inflación en Alemania se mantenía en el 2,3% interanual en junio. Coincidiendo con las declaraciones de Trichet en Amsterdam, Reuters publicaba una información según la que entre diez y quince de los 91 bancos sometidos a los "stress test" suspenderían, es decir, puede que uno de cada seis bancos examinados, con "víctimas" esperadas en Grecia, Alemania, Portugal y España. Algunos ya se atrevían a decir que en España habría una entidad que no superaría las pruebas de solvencia.

Y la sesión pudo haberse complicado también con la opinión de Fitch sobre el plan de la banca francesa para ayudar a solucionar la crisis griega: sería calificada como un "default". Por eso, poco después, a eso de las cinco de la tarde, saltaba la noticia de que los planes de Francia sólo saldrían adelante en el caso de que no sean calificados de "default". Pero subía el euro. En el mercado circulaban rumores de que habían participantes en el mercado que estaban comprando euros y vendiendo oro. De hecho, la moneda única comunitaria se apreció con respecto al dólar hasta 1,436 unidades.

Bonos de deuda

Porque tampoco cotizó demasiado negativamente el hecho de que LCH aumentara el coste de invertir en bonos portugueses. En realidad, bajó la prima de riesgo de todas las deudas periféricas con bastante fuerza. Especialmente la de la deuda griega, a continuación, la de la deuda irlandesa y la de la portuguesa. Al cierre, el diferencial de rentabilidad entre los bonos alemanes a diez años y los españoles bajó hasta el 2,7% desde el 2,8% en que se situaba al cierre de la sesión anterior. Los datos publicados en Estados Unidos fueron mixtos: el precio de la vivienda continúa bajando al ritmo que esperaban los analistas, mientras que el índice de confianza de los consumidores decepcionó al mercado, al caer de manera inesperada. Y, también de improviso, mejoró el índice de actividad manufacturera de la Fed de Richmond.

El Ibex, que comenzó la sesión al alza, se tiñó de rojo entre las once y las dos y media de la tarde y, a partir de ahí, se mantuvo en verde, con algún que otro tirón de optimismo, coincidiendo con las noticias procedentes de los bancos alemanes y de Wall Street, hasta que, a las cinco de la tarde, Francia condicionaba el "roll-over" a que las agencias de rating no lo calificaran de "default".

Al cierre, el Ibex-35 subía un 0,65%, para dar un último cambio en los 9.936,70 puntos. El índice más rentable de la sesión fue el Cac 40 francés, con una revalorización del 1,46%, con muchos de los bancos a la cabeza, recogiendo el optimismo existente respecto a Grecia. El Dax alemán, mientras, se apuntó un 0,88%, con los bancos entre los mejores, al igual que los fabricantes de automóviles o Adidas, animado por los buenos resultados de Nike. El Ftse Mib de Milán y el Ftse 100 británico ganaron alrededor de un 0,8%. El PSI-20 de Lisboa firmó el peor comportamiento de la sesión, al cerrar prácticamente plano.

Valores españoles

En el selectivo español, OHL lideró los ascensos, con una revalorización del 3,03%. A continuación, Sacyr Vallehermoso, con un repunte del 2,64%. ArcelorMittal fue el otro valor que ganó más de un 2%. Entre los bancos, el mejor fue BBVA, que ganó un 1,59%. El Santander, mientras, ganó un 1,10%. Y, como pista de que no preocupan los bancos españoles, el Popular también subió poco más de un punto porcentual, Bankinter, un 0,34%, y el Sabadell, un 0,14%.

Entre los grandes valores, también descató Iberdrola, también con un repunte de poco más de un 1%. Y Repsol YPF, que ganó un 0,90%, después de anunciar otro descubrimiento en Brasil. Por cierto que este martes el optimismo respecto a Grecia también sirvió para que repuntara el precio del crudo, aunque también la expectativa de que, con vistas a las vacaciones del 4 de julio en Estados Unidos, aumente la demanda de carburantes. Telefónica se quedó atrás: cerró con un mínimo avance del 0,06%, después de que Cable & Wireless presentara un "profit warning".

En el otro lado de la tabla, BME fue el valor que más cayó, con un retroceso del 1,29%. A continuación, Ferrovial, que retrocedió un 0,96%, como consecuencia de que el Sabadell rebajaba su precio objetivo de los 11,27 hasta los 10 euros. Con todo, el potencial de la compañía sigue siendo muy importante. A continuación, FCC, que se dejó un 0,46%. Abengoa y Acciona perdieron alrededor de un 0,3%. Abertis, Inditex y Gamesa completaron la lista de valores en rojo. Fuera del selectivo, Montebalito fue el peor valor, con un descenso del 5,47%. Y, en el otro lado de la tabla, otra inmobiliaria, Quabit, que repuntó un 5,75%, al conseguir otra refinanciación.