ruta quetzal 2011

Llegan las caminatas

Los ruteros alcanzan la fortaleza de Kuelap, en el Amazonas, a 3.000 metros de altura

KUELAP (PERÚ) Actualizado: Guardar
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Las caminatas han llegado a la Ruta Quetzal BBVA. Y lo han hecho a lo grande. Pocos entre los más veteranos ruteros recordaban una etapa tan exigente como la que se realizó en la selva amazónica. Bajo un calor asfixiante, los ruteros se lanzaron a conquistar la fortaleza Kuelap construida por los chachapoyas a 3.100 metros de altura.

Lo que debía ser un marcha de dos horas y media para cubrir diez kilómetros se convirtió en una caminata dura, con rampas que nada tienen que envidiar a las etapas alpinas del Tour de Francia, de más de cuatro horas en las que los quetzales, jaguares y águilas -los tres grupos de expedicionarios- pasaron de llanear por los pasillos de los museos peruanos a encontrarse de frente con la alta montaña.

Y claro, pronto llegaron las primeras bajas. El mal de altura hizo su efecto, si bien buena parte de los que regresaron al campamento base situado en Tingo Viejo lo hicieron más por temor a los desconocido. La marcha se cobró una docena de bajas. Todas en la primera hora de recorrido. Ninguna grave. Las crisis se atajaron con cariño del equipo médico y de los monitores. A favor de estos ruteros hay que subrayar que apenas habían dormido cinco horas esa noche después de pasar 15 horas en autobús desde Chiclayo a Tingo Viejo parando en Bagua Grande, donde fueron recibidos por las autoridades y sobre todo se mezclaron con los locales.

Pero el esfuerzo mereció la pena. Y mucho. Alcanzar la fortaleza que los chachapoyas levantaron más cerca del cielo que de la tierra fue una experiencia única. Una más en esta aventura. Desde allá a lo alto se domina la cuenca del río Utcubamba. Kuelap es una ciudad prehispánica que se extiende por una superficie de seis hectáreas y alberga en su interior 420 construcciones, casi todas circulares, así como templos y otros recintos habitados por los Chacha desde el 800 d.C. Estos grupos poblaron el territorios Chachapoya junto con otas etnias como los Luya, Chillao, Pacila y Chilchos hasta que en 1470 fueron sojuzgados por los incas. Esta ciudad fue descubierta en 1843 por Crisostomo Nieto.

Recompensa en la cima

Divisar a lo lejos su muralla era la primera recompensa que esperaba a los ruteros. A las tres horas de caminata, allá se alzaba imponente su espectacular pared de 20 metros de alto, 580 de largo y 110 de lado que fue construida con enormes bloques de piedra caliza con argamasa de arcilla amarilla. Pero todavía quedaba lo más duro de la marcha. Hubo que tumbar en el suelo con las piernas hacia arriba a una veintena de ruteros. Ya no había marcha atrás. La recompensa se tocaba con las yemas de los dedos. Una fiesta les esperaba en la cima. El presidente saliente del Perú, Alan García, había anunciado la celebración de su último Consejo de Ministros en Kuelap. Un grupo de danza indígena les daría la bienvenida. García finalmente no pudo acudir al tener que atajar unas protestas mineras que se han saldado con cinco muertos en las últimas horas. Pero la banda de música sonó y sonó. Y los ruteros que alcanzaron la cima bailaron junto a las muralla de Kuelap rodeado de los extensos valles del Utcubamba.

La fiesta se alargó hasta la madrugada porque los ruteros pudieron acampar en Kuelap, algo que no se había permitido nunca desde que esta maravilla puede ser visitada por los turistas. Otra ciudad de noventa tiendas de campaña se levantó en Kuelap. Para rematar la jornada el astrónomo Javier Armentia impartió una conferencia in situ. En la más absoluta oscuridad y en el silencio del Amazonas, Armentia explicó a los ruteros que también en la etapa de los Chachapoyas se intentaba encontrar respuestas en el cielo. "No hay palabras para explicar lo que hemos vivido", aseguraba la valenciana Laura Sebastiá al término de la charla. Para entonces alguno de los ruteros no había podido vencer al cansancio y dormía plácidamente. ¿Hay alguna forma mejor de quedarse dormido que viendo las estrellas a 3.000 metros de altura en pleno Amazonas? La Ruta Quetzal BBVA avanza ahora hacia la cascada de Gocta.