un país en jaque por la crisis

Passos Coelho apuesta por un Gobierno reducido

El primer ministro designado de Portugal deja tres ministerios en manos de los democristianos del Centro Democrático y Social

LISBOA Actualizado: Guardar
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El primer ministro designado de Portugal, el conservador Pedro Passos Coelho, ha anunciado la composición de su Gobierno, formado por sólo once ministros, cinco menos que el anterior Ejecutivo socialista, y en el que hay dos mujeres y tres independientes.

Passos Coelho, que ganó las elecciones del pasado día 5 de junio, deja además tres ministerios -Exteriores, Seguridad Social y Agricultura- en manos de los democristianos del Centro Democrático y Social (CDS-PP) con los que ayer firmó un pacto de legislatura para garantizar la mayoría absoluta en el Parlamento.

Miembros del Partido Social Democrata (PSD, centro-derecha) del primer ministro asumirán las carteras de Justicia, Interior, Asuntos Parlamentarios y Defensa, mientras que Finanzas, Economía, Educación y Salud quedarán en manos de personalidades independientes.

Passos Coelho había anunciado en la campaña electoral un Ejecutivo de sólo diez miembros que, según fuentes políticas, se amplió en uno durante las negociaciones del pacto de Gobierno con el CDS-PP.

En el Gabinete conservador desaparecen dos ministerios de la etapa socialista (Cultura y Presidencia) y otros tres quedan integrados en carteras diferentes (Obras Públicas, Transportes y Comunicaciones se integra en Economía, Ambiente en Agricultura y Enseñanza Superior en Educación).

La economía, prioridad de la legislatura

Passos Coelho, designado primer ministro el martes por el jefe de Estado, Aníbal Cavaco Silva, de su mismo partido, tomará posesión la próxima semana, cuando se constituya el nuevo Parlamento luso. El dirigente conservador, cuya formación cuenta con 108 de los 230 diputados de la Asamblea, firmó ayer el pacto de legislatura con el líder del CDS-PP y nuevo ministro de Exteriores, Paulo Portas, que con 24 diputados garantizará la mayoría absoluta del Ejecutivo. Los socialistas, que llegaron al poder en 2005, perdieron en las elecciones de hace dos semanas 23 diputados y, con 74 asientos en el Parlamento, serán la primera fuerza de oposición.

El acuerdo de Gobierno entre el PSD y el CDS-PP da prioridad a los compromisos financieros de Portugal, que debe cumplir un severo programa de austeridad y reformas a cambio de recibir los 78.000 millones de euros otorgados por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) en abril.

Con las acciones previstas en su pacto de Gobierno los dos partidos conservadores de Portugal quieren sacar al país de su grave crisis y recuperar la confianza de los mercados, que mantienen el acoso a la deuda lusa y exigían hoy más del 11% de interés, un récord histórico, por el bono luso a diez años.

Passos Coelho ha destacado, al anunciar su Ejecutivo, que ha cumplido el compromiso de cerrarlo de manera muy rápida para que el país "pueda conocer en tiempo récord quien va a gobernarlo en los próximos cuatro años".

El nuevo primer ministro luso anunció ayer a los portugueses que habrán de vivir "con grandes dificultades" para salir de la crisis, y acordó con los democristianos impulsar reformas en el mercado laboral, la Justicia y la Constitución.