Hushovd se impone al sprint
El campeón del mundo logra su primer triunfo en la quinta etapa | Cunego sigue líder
MADRID Actualizado: GuardarEl noruego Thor Hushovd (Garmin), campeón del mundo de fondo en carretera, ganó la cuarta etapa de la Vuelta a Suiza, disputada entre Grindelwald y Huttwil, de 198,4 kilómetros, en un pulso al esprint con el eslovaco Peter Sagan (Liquigas), mientras que Damiano Cunego (Lampre) mantuvo el liderato. El maillot arco iris del veterano Hushovd apareció con potencia en la última recta para bajar los humos del joven Sagan, de 22 años, el vencedor de la víspera, quien se atrevió a atacar a falta de 500 metros para volver al podio. Pero esta vez que encontró con el gigante de Arendal, quien finalmente celebró su primera victoria de la temporada con un tiempo de 4h.46.05, y el primer triunfo con la distinguida prenda de los siete colores.
Hushovd y Sagan fueron muy superiores al resto. Su duelo con la pancarta a la vista aún abrió una pequeña diferencia de 2 segundos sobre el grueso del pelotón, encabezado por el italiano Marco Marcato (Vacansoleil). El español José Joaquín Rojas (Movistar) se metió en la pelea, pero se conformó con la cuarta plaza. Una jornada de transición que permitió al italiano Cunego mantener el jersey de líder con las mismas diferencias, es decir, 54 segundos al colombiano Mauricio Soler (Movistar) y 1.16 al holandés Bauke Mollema (Rabobank). La etapa se animó en el kilómetro 10 con la escapada compuesta por Chavanel (Quick Step) y Benedetti (NetApp), a quienes se unió a continuación Mondory (Ag2r). Los primeros 50 kilómetros, de perfil llano, permitieron a los aventureros una diferencia superior a los 5 minutos, que se mantuvo hasta el primer ascenso del día, el Leuenberg (2ª, km. 62).
Pero los alicientes estaban concentrados al final, en un circuito de 25 kilómetros que incluía un doble paso por la Cota de Rüppiswil, de tercera. En el primero los escapados mantenían 1.35 sobre un pelotón que avanzaba de manera implacable. Un escenario final exigente con un repecho añadido y ascendente en la zona de llegada. El impulso del Omega Pharma tenía en mente una victoria de André Greipel y terminó con las esperanzas del trío de cabeza a 17 kilómetros de meta. Aventura una vez más estéril, después de un esfuerzo compartido a través de más de 165 kilómetros.
Nueva etapa con el Sky tirando a bloque en cabeza. Batalla por el esprint, a la que se sumaron el HTC y el Liquigas. Ya no se permitieron sorpresas. Había que decidir por velocidad. Lo intentó el veterano alemán Jens Voigt (Leopard), pero se hundió en los últimos dos kilómetros, cuando la carretera "picaba" ligeramente hacia arriba. Entonces, el Liquigas destapó sus cartas. Saltó Sagan con fuerza, puso unos metros de espacio entre él y el pelotón, pero apareció el maillot iris de Hushovd con más poderío aún. El campeón mundial le ganó la batalla al juvenil eslovaco.