Shaq ya es el 'Gran Desempleado'

Entre la seriedad y la broma, a veces con un deje de añoranza en su voz, el gran Shaquille O'Neal confirmó oficialmente anoche su retirada de la NBA, en cuyas canchas labró una legendaria carrera de 19 años y cuatro títulos de Liga. Vestido con un sobrio traje gris, camisa blanca y corbata rosada, O'Neal, de 39 años, anunció su adiós a los duelos en una conferencia televisiva a todo el país, y poco después lo celebró con una exuberante fiesta en el gimnasio de su residencia en la localidad de Windemere, en las afueras de Orlando (Florida).

El ahora expívot, que ocupa el quinto lugar en la lista de máximos anotadores de la NBA de todos los tiempos, se ha llamado a sí mismo 'El Gran Aristóteles', 'Shaq-Fu', 'The Big Shamrock' (El Gran Trébol), 'The Big Shaqtus' (El Gran Shaqtus), 'Shaq Diesel' y 'Superman', a lo largo de una carrera profesional que abarcó también el mundo de las películas y de la música rap. Con su jocosidad acostumbrada, y sentado sobre un gran trono en el que se leía "The Big AARP", O'Neal se despidió de sus fanáticos y amigos pero dijo seguirá incursionando en el mundo del entretenimiento. "De ahora en adelante, ustedes me puede llamar "The Big AARP", siglas en inglés de la Asociación Americana para el Avance de Personas Retiradas.

"Nunca pensé que llegaría ese día", dijo O'Neal. "Padre Tiempo ha terminado por absorber a Shaquille O'Neal", filosofó el Gran Aristóteles de la NBA. En otro momento de su presentación, cogió un teléfono móvil y fingió que atendía una llamada de James Dolan, el propietario de los Knicks de Nueva York, que horas antes habían anunciado el despido de Donnie Walsh, director general y presidente del club. "¿Usted quiere que yo vaya allí a solicitar el trabajo de gerente general de los Nueva York Knicks? Claro que será justo después de ésta conferencia de prensa", bromeó O'Neal. O'Neal, que ganó cuatro títulos de la NBA, tres consecutivos con Los Ángeles Lakers y otro en 2006 con Miami, es por el momento, 'El Gran Desempleado'. Aunque aseguró haber escuchado ofertas para comentarista de televisión, algo irónico para un hombre que a menudo apenas alzaba la voz en las ruedas de prensa, o hablaba en un susurro cuando se trataba de preguntas o periodistas que no le gustaban.

"¿Quien quiera contratarme, mis oficinas estarán abiertas hasta el lunes. Dame una llamada", dijo O'Neal. Dijo que se va con algunas metas inconclusas, sobre todo, no haber llegado a los 30.000 puntos anotados, y nunca haber podido mejorar su desastrosa técnica para los tiros libres, algo con lo que luchó a lo largo de su carrera. "Realmente voy a extrañar mis tiros libres", afirmó con una sonrisa en su rostro. 'Shaq' dijo que dejaba la NBA en buenas manos, con estrellas como sus ex compañeros Dwyane Wade y LeBron James, que ahora juegan para Miami Heat la final de la NBA contra Dallas. También predijo que el pívot de Orlando, Dwight Howard, quien será agente libre después de la próxima temporada, se confirmará como el pívot más dominante de toda la Liga y uno de los mejores de todos los tiempos. "Sólo hay un pívot zurdo dominante ahora y es Dwight Howard", indicó O'Neal. "Si él no gana tres o cuatro campeonatos estaré decepcionado".

El «tipo más afortunado del mundo»

Novato del año en 1993, tras ser seleccionado por los Orlando Magic, O'Neal también tuvo algunas palabras para su ex compañero en los Lakers, Kobe Bryant, con quien hilvanó tres anillos de 2000 a 2002. "Yo toqué los botones de Kobe y Kobe tocó mis botones. Y de esa forma fuimos capaces de ganar tres campeonatos", manifestó O'Neal. Pese a sus deseos de seguir en la cancha, las persistentes lesiones, la última de ellas una indomable dolencia en el tendón de Aquiles, desaceleraron la carrera del gran hombre en los últimos años. Dijo que debido a la lesión en el tendón de Aquiles, es probable que necesite una cirugía para corregir el problema.

"Tengo que hacer eso antes de entrar en el próximo capítulo", dijo O'Neal, y aseguró que el resultado satisfactorio de la operación no va a cambiar su decisión de dejarlo. "Sólo regresaré como jugador y entrenador de mis hijos. Soy el tipo más afortunado del mundo", subrayó O'Neal.