Jon Aguirre y Fabio Gándara, dos de los portavoces, aseguran que están cansados pero no cesarán en su lucha. / Vídeo: Virginia Carrasco
movimiento toma la plaza

Los acampados permanecerán en Sol, al menos, una semana

Los 'indignados' han creado un comité de permanencia para analizar cómo actuar en caso de desalojo

MADRID Actualizado: Guardar
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La asamblea general ha decidio mantener la acampada en la Puerta del Sol una semana más como mínimo. También han creado un comité de permanencia para evaluar el protocolo de actuación en caso de desalojo. Esta tarde, a las 18:00 horas, volverán a reunirse para estudiar la manera de organizarse en el campamento durante siete días más. También la posibilidad de conseguir electricidad a traves de donaciones o con una propuesta de Inditex.

El movimiento no piden elegir a nadie. Ni a alcaldes ni a concejales ni a presidente autonómicos. Se anuncia, directamente, “no les votes”. Mejor dicho. Se vota protesta. Se vota continuar con la acampada en Sol y con el resto de plataformas que se extienden en 70 ciudades españolas. Y en lo que el extranjero ya se conoce como ‘spanishrevolution’.

Botellas de agua, pulverizadores y protectores solares se van pasando de mano en mano para hacer frente a un sol de justicia, mientras los distintos portavoces de las comisiones van decidiendo sobre lo apropiado de quedarse o no. La mayoría apunta al sí hasta concretar ciertas propuestas mientras los presentes gritan “así, así, así vota Madrid”.

Minutos antes una de las portavoces de la plataforma de la comisión de comunicación, Noelia Moreno, ha explicado que “hay que tener en cuenta de que una vez que se ha movilizado tanta gente, no podemos venirnos abajo. Esto se ha hecho grande y fuerte y tenemos que luchar hasta conseguir nuestro objetivo”.

Lo cierto es que el cansancio se nota ya en las caras. Aún con todo, Noelia Moreno comenta que “los ánimos están muy bien”. En este sentido asegura que “las horas que estamos aquí trabajando hacen mella pero la gente que viene cada día nos carga las pilas y pase lo que pase hay que continuar”. Y de morir de éxito, nada de nada. “Cada vez hay mas gente que se une esto es impresionante y hemos recibido muestras de apoyo hasta desde Egipto”.

Dado que es la jornada electoral, se hace interesante preguntar al respecto: “Yo he votado por correo”, responde Moreno, “y me consta que hay mucha gente por aquí que ha hecho lo mismo. De todas maneras es lo que hemos dicho siempre, que cada uno haga lo que quiera. No buscamos una alternancia política, sino un cambio real en el sistema político y social”.

“Hemos comenzado la jornada electoral recordando a los compañeros detenidos en las manifestaciones de esta semana y gritando: ¡así vota Madrid!”, suena en el altavoz de la acampada. En los corrillos se habla del voto pragmático, nulo y blanco, o sencillamente de abstener. “Defendemos ‘No les votes’”, recuerda un acampado. “Ya, pero acudiendo a votar mostramos nuestra enfado”, le responde otro. “Pues votemos a partidos minoritarios”, coinciden ambos.

Mientras, un joven voluntario explica la Ley D’Hondt en la comisión de legal, bajo el caballo de Carlos III, y un hombre que sigue la clase maestra cuchichea: “Pues sí, qué injusto es, ¿verdad?”. Y sonríe.

Noche tranquila

Los acampados en la madrileña Puerta del Sol han pasado otra noche tranquila, en línea con las anteriores, y ahora han de decidir si mantienen o no las concentraciones una vez transcurrida la jornada electoral de hoy. Precisamente en torno al mediodía ha sido convocada una asamblea para tratar el tema y fijar las próximas directrices a seguir por parte de los concentrados, según ha explicado uno de sus portavoces.

En principio, el Movimiento 15M propone mantener la acampada en la céntrica plaza después de las elecciones. La asamblea general debate si continúa con esta medida de protesta tras el éxito que han supuesto las concentraciones por toda España. Desde el pasado lunes, miles de personas han acudido al 'kilómetro cero' y han encendido la mecha de la indignación en otras 70 ciudades españolas y del extranjero. La jornada de reflexión concluyó entre ambiente festivo y con un silencio político activo.

Sobre la decisión de que el campamento no muera una vez concluyan las elecciones, la decisión la tomarán a lo largo del día de mañana los portavoces en una asamblea general. Sin embargo, de las palabras de algunos de ellos se desprende la tónica general de que la mayoría se inclinan por quedarse a partir del lunes. "No está previsto que se desacampe o se desaloje nada de esto a partir del lunes. El movimiento no ha nacido vinculado ni en paralelo a ninguna formación política", aseguraba Jerónimo Martín a media tarde de la jornada de reflexión, referenciando ante todo a la reunión que se producirá en las proximas horas.

En estos seis días, el campamento de Sol ha recibido más de 30.000 firmas de apoyo para que se mantuviera activo hasta hoy, coincidiendo con las elecciones municipales y autonómicas. Este era el objetivo inicial que se marcó el Movimiento 15M tras la conclusión de la manifestación celebrada el pasado domingo en Madrid, que congregó a decenas de miles de personas, y que concluyó con una acampada improvisa en la plaza. Dada la dimensión que ha ido tomando la acampada, la idea de la plataforma 'Toma la plaza' era permanecer y hacerse fuerte en el 'kilómetro cero' más allá del 22 de mayo. Así, los indignados darían continuidad a las concentraciones y extenderían su protesta contra el sistema político y financiero vigente a otras ciudades, como finalmente ha ocurrido.

El movimiento cívico tuvo un punto de inflexión el pasado lunes. Después de que la Policía desalojara la noche anterior a un centenar de personas que habían acampado en Sol, una vez concluida la manifestación del domingo pasado, los indignados volvieron a la plaza, se hicieron fuertes y lograron una convocatoria masiva la tarde-noche del lunes. Más de 200 acampados pernoctaron esa noche. El martes eran 300. El miércoles, 400, y así sucesivamente hasta este sábado. Paralelamente, el zona de la acampada extendía sus dominios por la plaza, cubierta con carpas y lonas, y una 'miniciudad' crecía en el corazón de Madrid ante la mirada de todos los españoles y una atónita clase política.

La concentraciones de apoyo sumaban cada día más y más adeptos. Siempre a partir de las 20.00 horas. Después de varios días algunos comercios lo comenzaron a notar. Hasta que el viernes a medianoche, coincidiendo con el comienzo de la jornada de reflexión y la prohibición de la Junta Electoral Central de prohibir las concentraciones, se superaron las 24.000 personas.Entonces, un 'grito de silencio' retumbó en las plazas de todo el país y comenzó una jornada de reflexión pacífica y festiva. Se abrió paso a eso que la plataforma 'Toma la plaza' vino a llamar un «silencio político activo», donde se reflexionaba en numerosos corrillos de debates.

"Vista gorda"

La Policía intentaba controlar que las diferentes asambleas no se extendieran más allá de Sol. Advertían a los presentes de que en el 'kilómetro cero' se haría la «vista gorda», pero en las plazas aledañas se aplicaría la ley si las concentraciones superaban las 20 personas. En suma, que se procedería a multar.

El aviso caló en parte, porque los indignados seguían formando pequeños corrillos en las plazas de Ópera, Jacinto Benavente o Callao. Hablaban de vivienda, de sanidad, de feminismo o de corrupción política. De forma respetuosa y sosegada. Sin tensión. A la mayoría les unía la indignación. Un cambio de rumbo ya.Mientras tanto, la música en vivo improvisada en un pequeño escenario animaba a centenares de personas junto a la calle Arenal.

En el interior del campamento, a los pies de la estatua ecuestre de Carlos III, seguía la vida diaria de los acampados y un poco más arriba, junto al edificio del 'Tío Pepe', un grupo de payasos animaba a los más pequeños en lo que ya se conoce como "república independiente de Sol".