Los rastros de un tsunami
El terremoto de 8,9 grados que ha sacudido Japón es el cuarto con mayor magnitud de la historia desde que constan registros, según el servicio geológico de EEUU
MADRID Actualizado: GuardarEl tsunami es una gran ola o serie de olas que se producen en una masa de agua al ser empujada violentamente por una fuerza que la desplaza verticalmente. Este término es de origen japonés -compuesto de 'tsu' que significa 'puerto' y de 'nami' que significa 'ola'- y fue adoptado en un congreso de 1963.
Las olas que forman el tsunami llegan a la costa separadas entre sí por unos 15 o 20 minutos. La primera no suele ser la más alta, sino que es muy parecida a las normales; después se produce un impresionante descenso del nivel del mar seguido por la primera ola gigantesca, y a continuación por varias más. Antiguamente se les llamaba "marejadas", "maremotos" u "ondas sísmicas marinas", pero estos términos han ido quedando obsoletos, al no describir adecuadamente el fenómeno. Los dos primeros implican movimientos de marea, un fenómeno diferente provocado por la atracción gravitacional ejercida por los planetas, el Sol y la Luna.
Los terremotos son la gran causa de tsunamis, aunque también pueden provocarlos volcanes, meteoritos, derrumbes costeros o subterráneos e incluso explosiones de gran magnitud. Para que un terremoto origine un tsunami, el fondo marino debe ser movido abruptamente en sentido vertical, de modo que el océano es impulsado fuera de su equilibrio normal. Cuando esa inmensa masa de agua trata de recuperar su equilibrio, se generan las olas.
Velocidad de propagación
El tamaño del tsunami está determinado por la magnitud de la deformación vertical del fondo marino. Existen escalas para describir la energía de los maremotos, aunque, a diferencia de los terremotos, se basan fundamentalmente en las manifestaciones en la costa. Aunque no hay mecanismos para predecir terremotos, sí los hay para alertar del tsunami antes de su llegada a la costa, pues su velocidad de propagación es mucho menor que la de las ondas sísmicas. La alerta funciona eficazmente desde hace años en Japón y en EEUU.
El maremoto más devastador hasta ahora ocurrió el 26 de diciembre 2004, tras un terremoto de 8,9 grados en la escala Richter con epicentro frente a la isla indonesia de Sumatra. Causó 229.866 muertos en doce países ribereños del Océano Indico. Los países con más víctimas fueron Indonesia, con 167.736 (130.736 muertos y 37.000 desaparecidos); Sri Lanka (35.322 muertos), India con 18.045 (12.405 muertos y 5.640 desaparecidos, la mayoría en los archipiélagos de Andaman y Nicobar); Tailandia: 8.212 muertos (de ellos 2.448 extranjeros de 37 países), entre ellos los españoles Manuel Vila y Manuel Perdiguero. En Somalia hubo 289 muertos; 108 en las Maldivas, 75 en Malasia, 61 en Myanmar y 13 en Tanzania. Dos personas murieron en las Seychelles, otras dos en Bangladesh y una en Kenia, según datos de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) de la ONU, divulgados tras el primer aniversario de la catástrofe.