Apoyo corporativo y de Wall Street
El selectivo se apunta un 0,70% y las ganancias anuales de la Bolsa se elevan hasta el 7,20%
MADRID Actualizado: GuardarUna sesión muy volátil en el Ibex-35, aunque con final feliz. Y eso que, en algunos momentos, el selectivo llegó a dar miedo. Sobre todo cuando, pasadas las dos de la tarde, marcaba mínimos de la sesión en los 10.413 puntos. Finalmente, el selectivo español cerraba con una revalorización del 0,70%, para dar un último cambio en los 10.568,70 puntos, los máximos del día.
Varios factores se confabularon a favor del Ibex al término de la sesión. En primer lugar, la caída del precio del crudo: en Londres el barril de Brent se cambiaba por 112,62 euros, lo que supone un descenso de casi dos dólares respecto al cierre de la sesión anterior. El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, caía por debajo de los 105 dólares. La OPEP estaría estudiando la celebración de una reunión ordinaria con vistas al incremento de la producción para quitarle presión al mercado. Este factor ayudó al mercado americano a rebotar tras la severa caída sufrida durante la sesión anterior ante el temor que un crudo caro frene la recuperación. Los valores que tiraban del carro de Wall Street eran los financieros, sobre todo Bank of America, ante la esperanza de que este banco en particular pueda ir mejorando sus beneficios en los años venideros y, por tanto, también la rentabilidad para sus accionistas, en forma tanto de incremento del dividendo como de recompras de acciones, de acuerdo con las declaraciones de su primer ejecutivo, Brian Moynihan.
La buena marcha del mercado americano, que siempre tiene un efecto muy positivo en los mercados europeos, coincidió en España con la publicación de una operación corporativa: Iberdrola proponía la absorción de Iberdrola Renovables, la compañía que sacó a Bolsa a finales de 2007, en el pico del ciclo a 5,30 euros por acción y que ahora recompra a poco menos de 3 euros y, además, pagando con papelitos, con sus propios títulos. Tanto Iberdrola como su filial 'verde' fueron suspendidas de negociación por la CNMV a las cuatro y media de la tarde y ya no volvieron a cotizar. En el momento de la suspensión, la matriz avanzaba un 0,37%, mientras que su filial 'verde' ganaba un 1,07%. A ver cómo reaccionan sus títulos en el parqué. ACS, accionista de Iberdrola y que podría ver diluida su participación en la compañía una vez culmine la operación, tuvo una primera respuesta negativa, dado que cayó hasta los mínimos intradiarios de 32,14 euros, para dar un último cambio prácticamente plana en los 32,55 euros. Pero llama mucho la atención que otras compañías del sector de la construcción registraran fuertes avances, como Ferrovial, que subió un 4,85%, ante la expectativa de que el operador chino de aeropuertos HNA compre el 10% de la compañía británica de aeropuertos BAA. Sacyr Vallehermoso también se ha situado entre los valores que más ganaban, con un repunte del 1,40%.
La operación propuesta por Iberdrola tuvo un efecto muy positivo en otras compañías del sector 'verde', como Acciona o Gamesa, ambas, como Renovables, especializadas en la energía eólica. Estas dos empresas sumaron un 2,90% y un 2,15%, respectivamente. Entre los mejores, también se colocaba Repsol Ypf, con un repunte de casi dos puntos porcentuales.
Alzas en el sector financiero
El sector financiero en su conjunto también apoyó al selectivo. El mejor de todos fue Bankinter, con una revalorización del 1,47%, tras anunciar una emisión de bonos obligatoriamente convertibles que le ayudarán a cumplir con los nuevos requisitos de capital y, además, para pasar los estrés test. BBVA, por su parte, ganó un 1,13%, mientras que Santander se apuntó un 0,87%. Sabadell y el Popular, mientras, ganaron algo más de un 0,6%.
En el otro lado de la tabla, Amadeus, que retrocedió algo más de un 2%, posiblemente, ante los perjuicios que puede sufrir por la huelga anunciada por Aena. Telecinco, Inditex y Acerinox, mientras, se dejaron más de un punto porcentual.
Y, siguiendo con el tema corporativo, finalmente, el Comité Asesor Técnico del Ibex decidió incorporar a IAG, fruto de la fusión de Iberia con British Airways, al selectivo que, a partir del 1 de abril volverá a contar con 35 valores. Al cierre de la sesión, la compañía cedía un 0,34%. Parece que los inversores prefirieron mantener la cautela por si finalmente la aerolínea no regresaba al Ibex.
Éstos fueron los valores que no lograron recuperarse de la presión bajista que imprimían otros factores. Por ejemplo, las declaración del aún miembro del consejo de gobierno del Banco Central Europeo, Axel Weber, que dijo no tener ningún interés en contradecir al mercado, que ya cotiza que habrá tres subidas de tipos este año, hasta el 1,75%. Además, se mostró partidario de que el BCE comience a considerar la retirada de las medidas extraordinarias de liquidez para la banca. En este sentido, el gurú Noriel Roubini volvió a insistir: "El BCE se está preocupando demasiado sobre la inflación. Una subida de tipos prematura en la zona euro imprimiría una significativa presión en el Banco de Inglaterra para seguir su misma política de endurecimiento monetario". Además, este experto cree que, si el crudo alcanza los 140 dólares, algunas grandes economías podrían recaer en recesión, aunque no Estados Unidos.
La deuda soberana no da tregua
La crisis de la deuda soberana sigue sin dar tregua. El Tesoro griego vendió 1.600 millones de euros en deuda a 26 semanas, algo más de lo esperado. La rentabilidad subió hasta el 4,75%, desde el 4,64% de la emisión anterior. La demanda fue algo menor en términos relativos, dado que superó en 3,6 veces el volumen de la oferta, frente a las 4,54 veces de la emisión anterior. El Tesoro heleno estimaba que un 31% de esa demanda correspondió a no residentes, una cifra inferior al 50% estimado en otras subastas anteriores. No se podía esperar un mejor resultado después de que Moody's recortara su calificación crediticia nada menos que tres escalones. La curva de los tipos helenos adelanta que habrá reestructuración de la deuda sí o sí, porque los plazos cortos, los dos años en concreto, muestran una gran tensión.
España, por su parte, realizó una emisión sindicada de bonos a 15 años por valor de 4.000 millones de euros a un interés del 6,01%, algo por encima de la cotización de esta deuda en el mercado secundario y que se sitúa en el 5,8%. En el mercado secundario parece que no sentó muy bien esta emisión, dado que el interés del bono a diez años subió hasta el 5,47%, lo que supone una prima de riesgo del 2,17%, siete centésimas por encima del cierre de la sesión anterior. La prima de riesgo de la deuda española se amplió más que la de la deuda portuguesa, por ejemplo, aunque el interés del diez años luso se encuentra en máximos, y así se enfrenta a la subasta de deuda que tendrá lugar hoy.
El euro cotizó el aumento del riesgo periférico con un descenso respecto al dólar, pero reducido dado que, al cierre de la sesión, el tipo de cambio se mantenía por encima de 1,39 unidades. Quizá ayudara la fortaleza de los pedidos industriales de Alemania que se conocía por la mañana. Y, mientras, tanto el oro, como la plata y el platino caían.