Mourinho pasa al insulto
El portugués desprecia al Málaga y a Pellegrini, critica la política de comunicación del Madrid y arremete contra la "banda de cobardes" de la prensa
MADRID Actualizado: GuardarJosé Mourinho incendió este miércoles Valdebebas durante su comparecencia más explosiva y ofensiva desde que llegó al Real Madrid. Tan alejado de los valores de señorío y educación que proclama el club blanco, el técnico portugués pasó al insulto, despreció al Málaga y a Manuel Pellegrini y arremetió contra la "banda de cobardes" de la prensa que coincide, con algunas excepciones, en que sus quejas sobre el calendario y los horarios son excusas. También criticó la política de comunicación del Real Madrid que no le protege y ha convertido al entrenador en "el saco de boxeo de todos los cobardes que se juntan". "Aquí soy yo el que tiene que dar la cara, pero no me importa. Nací, crecí y moriré así, con la cabeza alta y sin miedo a decir las verdades mientras todos los demás están juntos al ataque contra mí", apuntó desafiante ante la carga mediática que soporta en una entidad bajo tanta presión.
Mourinho volvió a perder las formas, llegó a llamar directamente "hipócrita" a un periodista con el que mantuvo un tenso enfrentamiento, y también acusó de "mentiroso", sin citarlo, a Jaume Roures, el presidente del operador televisivo dueño de los derechos de la Liga. En vez de apagar los fuegos que él enciende, se encargó de alimentar aún más la antipatía hacia su persona y hacia el Real Madrid al faltar al respeto al Málaga y a Pellegrini cuando manifestó que a él nunca le ocurrirá lo mismo que su antecesor en el banquillo blanco: "Si el Madrid me echa, yo no entrenaré al Málaga, sino a un gran club en Inglaterra o Italia".
Su declaración de menosprecio al club blanquiazul y a su técnico, a quienes se enfrenta este jueves en el Bernabéu (22.00 h.), también tuvo un tinte clasista.
Consciente de su error y, arrepentido de su ataque al profesional con el que se encaró y al que acusó de hipocresía, le pidió disculpas públicamente, hasta en dos ocasiones. "Me he quedado un poquito mal. No te quería insultar, pero me parece que no estás haciendo un análisis justo y honesto, porque lo mío no son quejas, sino verdades", le dijo al periodista que le preguntó si las excusas utilizadas por técnico no eran para tapar los problemas deportivos del Real Madrid. Minutos antes, Mourinho había utilizado sin embargo el mismo adjetivo despectivo, y más de una vez, para calificar a los representantes de los medios de comunicación: "Si queréis ser hipócritas es un problema vuestro". "La gente que dice que busco disculpas después de un resultado negativo miente, porque lo del calendario lo dije antes del partido contra el Deportivo, igual que lo he dicho muchas veces a lo largo de la temporada", insistió el luso que denuncia un trato de favor hacia el Barça y en perjuicio del Madrid.
Ataques a sus dirigentes
También insinuó que responderá en los tribunales de justicia a quienes le han insultado, como es el caso del presentador Javier Sardá, que el día anterior le llamó "gilipollas", igual que denunció al magnate televisivo Jaume Roures: "Yo no digo que tengo una empresa inmobiliaria y luego vendo jugadores de fútbol".
Mourinho demuestra que está muy nervioso, y más duro y nada elegante estuvo al minimizar al Málaga y el trabajo de Pellegrini, aunque después calificó al chileno como "un buen entrenador", recordó que "hizo un campeonato muy bueno, un trabajo positivo para el Real Madrid", y le abrió las puertas del vestuario blanco.
"Pellegrini dijo que deberían superar su temporada, pero dijo una parte de la verdad, porque bastaba con pasar la eliminatoria de Copa para hacerlo mejor y pasar a octavos de la 'Champions'. En la Liga, el segundo es el primero de los últimos", subrayó 'Mou', antes de considerar al Málaga como un club menor que no es merecedor de sus conocimientos y prestigio.
Contundente también se mostró cuando se le preguntó si no se sentía como un muñeco de pim, pam, pum desamparado por los dirigentes del Real Madrid: "¿Por qué se van a quejar ellos si me quejo yo?", se cuestionó. "En otros clubes el entrenador está protegido. Aquí no, pero esa es nuestra estrategia de comunicación.
Ni pienso que el club me respalda ni que no. Aquí salgo yo, que es lo que vosotros queréis. Los jugadores no forman parte de una estrategia. No atacan ni defienden a nadie, sino que salen a las ruedas de prensa a decir cosas normales porque no entran en políticas de comunicación. Con las entrevistas de la web a los jugadores ya tenéis mucho -señaló con su habitual ironía-. Para criticarme e insultarme a mí tenéis veinte páginas de periódicos".
Mourinho considera que él y el Real Madrid son víctimas de una conspiración auspiciada por la Liga y las televisiones y no deja de insistir con sus protestas a las fechas y horarios. Volvió a recurrir, al igual que la pasada semana, a los nombres del Barça y el Valencia, aunque pidió "disculpas" al club 'che' y a Unai Emery, ya que el portugués dice sentirse "obligado a poner ejemplos". "No es normal que el Valencia juegue el domingo por la noche en San Mamés y hoy contra el Barça, igual que no es normal que el Málaga jugase el lunes y lo haga mañana jueves contra el Real Madrid y que nosotros tengamos dos días más que ellos para preparar el partido", recordó, aunque quiso puntualizar, como ya hizo la víspera de medirse al Deportivo: "Es chocolate que nos dan para engañar a las personas, pero a mí no me engañan".