Olas a medida
Una empresa guipuzcoana ha desarrollado un novedoso sistema que genera olas artificiales para hacer surf
SAN SEBASTIÁN Actualizado: GuardarUna empresa guipuzcoana ha desarrollado un novedoso sistema que genera olas artificiales para hacer surf y otros deportes náuticos que pretende revolucionar este mercado por la alta "calidad" de sus olas, el bajo coste de sus instalaciones y la posibilidad de ubicarlo en múltiples espacios.
José María Odriozola e Igor Barandiaran, directivos de la ingeniería Instant Sport, han presentado este producto, 'Wave Garden', que ha suscitado una gran expectación entre surfistas de todo el mundo, en una rueda de prensa celebrada en San Sebastián a la que han acudido periodistas deportivos especializados e informadores franceses.
Odriozola y Barandiaran han desvelado durante esta comparecencia que al conocerse, días atrás, que el nuevo generador de olas, cuyo primer modelo se instalará en Zarautz , iba a ser presentado hoy, la página web de su empresa, que hasta entonces sólo albergaba unos vídeos de demostración del artilugio, registró hasta 220.000 entradas desde 150 países.
Total seguridad
Estas imágenes muestran unas instalaciones de Aizarnabal donde hay instalado un prototipo de la máquina, en las que personas de diferentes edades, incluidos niños de corta edad, hacen surf con total seguridad en un entorno forestal y rural, muy distinto de las playas en las que se practica este deporte. En otro de los vídeos, el surfista guipuzcoano Aritz Aranburu lamentaba no haber podido acudir a la presentación por encontrarse compitiendo en Brasil y manifestaba que "nunca" ha surfeado una ola artificial que se parezca tanto a las del mar.
Odiozola ha explicado que el sistema 'Wave Garden' que utiliza su compañía consiste en "un perfil hidrodinámico sumergido" que proyecta agua hacia las orillas del lago o estanque en el que se instala, a las que se dota de una forma adecuada para crear unas olas que rompen con forma de tubo y que siempre son iguales. Esta característica las diferencia de otras olas artificiales como las "estáticas" que se crean al lanzar agua contra una rampa con forma de onda, o las "dinámicas" que se originan al dejar caer sobre una piscina una gran cantidad de agua en uno de sus extremos.
Odriozola ha detallado las principales ventajas del sistema 'Wave Garden' que se basan en la "calidad" de sus olas, ya que tienen "una forma adecuada de tubo" que "se mantiene a lo largo todo el recorrido" y permite hacer trayectos de hasta 30 segundos en instalaciones de 300 por 100 metros cuadrados, algo que resulta complicado "incluso en la naturaleza".
Coste económico y energético asumibles
El técnico ha aclarado además que este equipamiento tiene un coste económico y energético "lo suficientemente bajo" como para construir unas instalaciones deportivas que "sean rentables" con olas de entre 1 y 1,6 metros de altura, si bien la tecnología permite crear ondas mucho mayores pero con un coste energético y económico mayor asumible en caso de que se pretendieran instalar en parques temáticos o lugares como Emiratos Árabes Unidos.
Ha precisado que una instalación básica podría rondar los tres millones de euros, mientras que otra para la que se prevea "una fuerte asistencia" de practicantes y que incluyera una superficie edificada de mil metros cuadrados, entre otros equipamientos, podría llegar a los cinco o seis millones de euros en función de como se quiera "ordenar" la instalación.
Otra de sus ventajas es que el sistema se puede emplazar en un entorno natural con escaso impacto ambiental, ya que requiere de escasa maquinaria que además está sumergida.
El diputado guipuzcoano de Deportes y Acción Exterior, Iñaki Galdos, ha explicado que la Diputación foral, que ha apoyado esta innovadora iniciativa desde 2005, destinará este año medio millón de euros al proyecto, que contempla la ubicación de la primera instalación de estas características en Zarautz para la creación de un centro de tecnificación de surf.
El otro miembro de Instant Sport, Igor Barandiaran, ha precisado que su empresa pretende convertirse en líder del sector con esta tecnología que les permite mantener una "brecha tecnológica" de tres años respecto a la competencia. Barandiaran ha avanzado que el nuevo producto tiene unas previsiones de un crecimiento medio del 50% anual en el período 2011/14, en los que el 74% de su facturación se realizará en el extranjero y probablemente duplicará su plantilla.
Ha recordado asimismo que la industria del surf ya supera los 3.000 millones de dólares en ingresos anuales y seguirá creciendo en los próximos años.