Bruselas niega que la UE esté presionando a Irlanda para que acepte la ayuda financiera internacional
Dublín se compromete a trabajar junto a una misión conjunta de la Unión Europea, el BCE y el FMI
BRUSELAS Actualizado: GuardarEl presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, ha negado que los socios o las instituciones europeas estén presionando al Gobierno irlandés para que acepte la ayuda financiera internacional. En una rueda de prensa celebrada junto al primer ministro húngaro, Viktor Orban, el presidente del Ejecutivo comunitario ha aclarado que las conversaciones abiertas entre las autoridades irlandesas, la CE, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional tienen como objetivo, de momento, evaluar la situación presupuestaria y financiera del país, nada más.
"Antes de tomar ninguna posición definitiva tenemos que evaluar cuál es la situación real, y eso es lo que estamos haciendo. Ése es el propósito de las conversaciones que están teniendo lugar", ha afirmado Barroso. "Quiero ser absolutamente claro: no estamos presionando a Irlanda para que recurra al mecanismo europeo de asistencia financiera, pero reiteramos que está listo para ser utilizado, si se solicita".
Barroso ha recordado que el Gobierno irlandés "está haciendo enormes esfuerzos" y ha expresado su confianza en que el plan financiero para los próximos cuatro años, que será presentado pronto, así como el presupuesto para 2011, "confirmen que el plazo de 2014 para corregir el déficit excesivo es firme y creíble". Irlanda, según puntualizaba el presidente de la CE, "está haciendo frente a un problema muy específico en lo que se refiere al sector bancario", problema que debe ser afrontado "de forma rápida y decisiva, para que pueda recuperarse la confianza plena". "Las autoridades irlandesas se han comprometido a trabajar con la Comisión, el BCE y el FMI para determinar la mejor manera de hacer frente a los riegos del mercado, especialmente en lo que respecta al sector bancario. Veremos cuáles son las conclusiones del trabajo técnico que va a tener lugar", concluía Barroso.
Similitudes con Hungría
El primer ministro húngaro también ha recomendado a las autoridades irlandesas que no demoren las decisiones que tengan que tomar. Hungría ejercerá la presidencia de turno del Consejo de la UE a partir del 1 de enero, y también ha tenido que recurrir a la ayuda financiera de la Unión y el FMI para superar una grave crisis de pagos, aunque no es miembro del euro. "Me abstendré de dar ningún consejo a ningún responsable irlandés; los conozco personalmente, y no necesitan ningún consejo mío", respondía Orban.
"Hay una cierta simpatía oculta entre Irlanda y Hungría, porque ambos países tuvieron que luchar muy duramente por su libertad" y ha añadido que "mi experiencia me enseña que cuanto más tarda uno en dar un paso decisivo más caro es el precio de la crisis; si uno tiene un problema, tiene que actuar inmediatamente". "Uno puede pensar que puede esperar unas semanas o meses, pero al final acaba pagando un precio más alto", ha insistido.
Misión conjunta en busca de medidas
Irlanda se ha comprometido a trabajar junto a una misión conjunta de la Unión Europea y el FMI en medidas inmediatas para ayudar a su alicaído sector bancario, un proceso que podría conducir a un rescate financiero que hasta el momento Dublín se ha negado a pedir.
Los ministros de Finanzas de la zona euro acordaron el martes por la noche que un equipo de la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo (BCE) viaje a Irlanda el jueves para examinar qué medidas podrían ser necesarias si Dublín decide buscar ayuda. Un día después, el primer ministro irlandés, Brian Cowen, ha explicado que la misión analizará qué tipo de ayuda podría necesitar su país, aunque ha rechazado nuevamente que el Gobierno esté negociando un rescate. "En lo que queremos concentrarnos ahora, durante los próximos días, es en sentarnos y ver qué tipo de asistencia se puede dar para asegurarnos de que estos asuntos puedan ser manejados adecuada y apropiadamente bajo las circunstancias actuales", ha apuntado Cowen al Parlamento. "El Gobierno no se ha cuestionado (...) una negociación de un rescate", insistía para después matizar que consideraba peyorativo el término "rescate".
El ministro de Finanzas irlandés, Brian Lenihan, ha dejado abierta la puerta a esa ayuda al reconocer nuevamente que "nuestra política presupuestaria tiene toda la confianza entre nuestros colegas europeos. Pero en relación a la banca, las medidas tomadas hasta la fecha requieren una ayuda adicional".