La heredera de L'Oréal da la espalda al fotógrafo al que regaló mil millones de euros

La multimillonaria heredera de la firma de cosméticos L'Oréal, Liliane Bettencourt, asegura que se ha distanciado de François-Marie Banier, el fotógrafo al que durante años hizo regalos por valor de unos mil millones de euros y que ahora se ha vuelto "demasiado cansino".

En una entrevista publicada en la revista 'Paris Match', la octogenaria se refiere al fotógrafo como "un amigo que siempre quiere más" y que la absorbía, por lo que ha decidido tomar distancia. "Debo respirar y, con él, actualmente sentía que no podía. Es una pena, después de tantos años, pero se ha vuelto muy cansino", asegura Bettencourt.

La multimillonaria, de 87 años, dice que el fotógrafo, de 62 años, es "exigente" y "sobre todo posesivo" y asegura que verle ahora sería "una tontería" porque es una persona que no va a cambiar su carácter. La relación de amistad entre la multimillonaria y el fotógrafo y los regalos que este recibió en forma de obras de arte, seguros de vida y contratos de asesoramiento artístico enfrentaron a la hija de Betterncourt con su madre.

El cisma familiar desencadenó en una denuncia de la hija de Bettencourt ante la Justicia, en la que acusaba al fotógrafo de aprovecharse de la debilidad de la octogenaria para lucrarse, proceso que ésta encuentra "indigno". Fue el inicio de un caso que empezó a gotear y derivó en media docena de investigaciones judiciales en relación con un escándalo político y financiero que han salpicado incluso al ministro de Trabajo, Eric Woerth, al que se le investiga para aclarar si recibió financiación ilegal de manos de la mujer más rica de Francia.