Venezuela reflexiona ante unas elecciones parlamentarias que medirán el respaldo a Chávez y su revolución
La oposición volverá a la Asamblea después de cinco años de ausencia tras su retirada de la contienda en 2005
CARACAS Actualizado: GuardarLos venezolanos vuelven a las urnas este domingo para renovar el unicameral Parlamento; unas elecciones en las que se medirá cuál es el respaldo del país a Hugo Chávez y al "proceso revolucionario" que impulsa. Unos 17,5 millones de electores están convocados para elegir a los 165 diputados de la Asamblea Nacional (AN) y decidir con su voto la nueva configuración de la Cámara, después de cinco años bajo dominio del oficialismo por el boicot de la oposición a las últimas legislativas de 2005.
Tanto en las filas del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), creado por Chávez hace tres años, como en los partidos de oposición, ahora aglutinados en una 'Mesa de Unidad', o entre los disidentes del 'chavismo', se advierte que en estos comicios está en juego el "futuro del país", o al menos un modelo de sociedad.
El mandatario venezolano, que ha encabezado decenas de caravanas electorales para llamar a votar por los candidatos de su partido, ha tratado de convertir las parlamentarias en un plebiscito en torno a su mandato con la mirada puesta en las presidenciales de 2012 en las que, ya lo anunció, volverá a solicitar la reelección. En el poder desde 1999, Chávez, que mantiene una indiscutible popularidad, ha recorrido el país en busca de los votos, con la advertencia de que su partido debe obtener una mayoría de dos tercios en la Asamblea para que pueda continuar el proyecto socialista que impulsa en el nombre, afirma, del pueblo venezolano.
El control de la Cámara
La mayoría calificada de dos tercios, es decir 110 de los 165 escaños, permite tener el control de la Cámara venezolana y conseguir, con la aprobación de los diputados afines, la adopción de leyes orgánicas o nombramientos de integrantes de poderes estatales. Entre las elecciones de mañana y la apertura de la nueva Cámara, en enero, quedarán tres meses en los que el Gobierno, aunque haya perdido la mayoría, aún tendrá el dominio parlamentario y podría aprovechar ese plazo para aprobar las leyes o directrices que quiera impulsar.
El mandatario venezolano sufrió en 2007 su primera derrota en las urnas cuando una mayoría de venezolanos dijo 'no' en el referendo a su proyecto de reforma constitucional que, entre otras propuestas, incluía la posibilidad de presentarse a un nuevo mandato. Al año siguiente, en los comicios municipales y regionales de noviembre de 2008, el PSUV de Chávez ganó en la gran mayoría de los estados del país, pero la oposición se llevó algunos de los más importantes como el Zulia, Miranda, y la alcaldía mayor de Caracas.
Tres meses después, Chávez sometió a una nueva consulta popular una enmienda a la Constitución para la reelección indefinida de los cargos electos, incluido el suyo, y en esta ocasión obtuvo el 'sí' de los venezolanos para buscar un nuevo mandato en 2012. El presidente vuelve ahora a someterse, aún sin ser candidato, al veredicto de los venezolanos en unas legislativas que, más allá de elegir diputados, ofrecerán un "barómetro" del escenario político de Venezuela.