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Villaronga sube el nivel medio del festival
'Pa negre', la historia de una familia rural catalana en la postguerra, convence al público
SAN SEBASTIÁN Actualizado: GuardarAgustí Villaronga ha llegado a San Sebastián, una vez más, y ha convencido con su última creación. Pa negre (Pan negro) ha logrado subir la calidad media del festival y colocarse en la lista de candidatas a obtener a algún premio. El director catalán, que estuvo en el festival con Tras el cristal (1986) y Aro Tolbukhin (2002), adapta una historia de Emili Teixidor situada en una zona rural catalana de la posguerra. Allí conviven los vencidos y los vencedores, con sus heridas todavía latentes, intentando sobrevivir en las batallas diarias.
La película gira en torno a Andreu, interpretado por Francesc Colomer. Es un niño que perdió la guerra. Una mañana se encuentra los cuerpos de un vecino y su hijo. El alcalde (Sergi López) ve la posibilidad de colgarle el muerto al padre (Roger Casamajor). Para ayudarle, Andreu buscará una explicación e intentará descubrir al verdadero asesino, mientras las mujeres de su familia intentarán protegerlo. El director ha insistido en que el film trata sobre la postguerra pero desde un punto de vista "emocional, no político". "Se centra en la persona", ha comentado.
Villaronga ha destacado que en Pa negre tiene mucha importancia lo sucedido antes de la película. "El peso del pasado está muy presente. Todos los personajes están atrapados en una tela de araña", ha añadido. Además, ha apuntado, hizo un esfuerzo en el guión para que los personajes "no fueran de una pieza", ni tan malos ni tan buenos.
Por otra parte, ha destacado el trabajo de todos los niños, sobre todo de Francesc y de Marina Comas, que da vida a una prima que perdió una mano. Tal era la implicación de los chavales, que el primero se ha inventado una segunda parte por si Villaronga se anima. Eduard Fernández, Nora Navas y Laia Marrull completan el reparto. Además, López vuelve a repetir como fascista, al igual que en El laberinto del fauno.
Bebés a la japonesa
Por otra parte, Naomi Kawase ha presentado Genpin, una película documental sobre la maternidad y el parto. La directora japonesa cuenta la vida de varias mujeres que deciden acudir a la consulta del doctor Yoshimura, situada en Okazaki, una ciudad del centro del país.
Este médico se caracteriza por utilizar los métodos tradicionales en el parto. las mujeres, en vez de dar a luz en un paritorio convencional, lo hacen en una estera en medio del tatami. Pero además, este curioso doctor cambia la manera de llevar el parto. Insta a las mujeres a hacer ejercicio todos los días, como cortar leña con un hacha o hacer sentadillas. El sistema debe funcionar, ya que las futuras madres acuden desde todo el país en busca de un parto natural que no depende de la intervención médica.
Pero no todo es oro todo lo que reluce. El médico tan bien se enfrenta al desprecio de su hija, que le reprocha que no le hace caso, y al de las comadronas, que lo califican de dictador. "No quiero transmitir sorpresa, sino que hay dieferentes maneras de dar a luz. Y en esta, las mujeres dan las gracias y están más felices", ha comentado Kawase. Además, ha añadido que el doctor Yoshimura ha atendido a más de 20.000 partos en Japón.