Los incendios forestales ponen en jaque a Rusia
Unas 200.000 personas luchan contra los diferentes focos, que amenazan a más de 200 localidades del país
MOSCÚ Actualizado: GuardarLas autoridades de Rusia han admitido que los incendios forestales, que han causado 28 muertos y calcinado centenares de miles de hectáreas, son graves, pero están bajo control gracias a los casi 250.000 hombres que luchan contra el fuego.
"Pese a los pronósticos (meteorológicos) adversos, la agrupación de fuerzas que se creó, la adopción de medidas de prevención y el empleo activo de la aviación (...) permiten controlar la situación", ha dicho un portavoz del ministerio de Rusia para Situaciones de Emergencia, citado por la agencia oficial rusa Itar-Tass. Según esa cartera, creada especialmente para hacer frente a los desastres naturales y tecnológicos, un total de 238.000 personas, 25.000 vehículos de diverso tipo y 16 aviones participan en las labores de extinción de los incendios forestales y de protección de aldeas y ciudades.
A las fuerzas de Emergencia se han sumado los efectivos de las Fuerzas Armadas, tal y como ordenó la víspera el presidente de Rusia, Dmitri Medvédev. "Todas las fuerzas de las que disponemos, todos los equipos y destacamentos de bomberos se han incorporado plenamente (a la tarea)", ha precisado el ministro de Defensa ruso, Anatoli Serdiukov, citado por la agencia Interfax, al informar al jefe del Kremlin.
Medvédev, que se encuentra en Sochi, balneario a orillas del mar Negro, le ha insistido a Serdiukov en la necesidad de adoptar todas las medidas imprescindibles para prevenir incendios en las instalaciones militares. "En relación a sus instalaciones, desde luego hay que estar muy, pero muy atentos, porque son especialmente peligrosas. Es necesario impedir cualquier posible propagación del fuego", ha dicho el jefe del Estado.
Por otra parte, el jefe de la cartera de Emergencia, Serguéi Shoigú, ha informado de que cuatro aviones cisternas participan en la extinción de incendios en las inmediaciones del Centro Nuclear de Sárov, en la región Nizhni Nóvgorod, para garantizar la seguridad de sus instalaciones. Shoigú ha agradecido la ayuda de la población que participa activamente en la lucha contra el fuego.
Llamamiento de Putin
El primer ministro ruso, Vladímir Putin, ha hecho un llamamiento a las autoridades federales y regionales a dejar de lado la búsqueda de culpables por fallos de prevención y a centrarse en la reconstrucción de las viviendas arrasadas por los incendios. "No todo se hizo a tiempo ni en el volumen necesario, pero ahora no es momento de buscar responsables", ha manifestado el jefe del Gobierno en una videoconferencia con autoridades y damnificados de las regiones afectadas por el fuego.
Putin ha indicado que en todo el país se han quemado 1.257 viviendas en las que habitaban 1.273 familias y ha recalcado que cada una de esas familias recibirá una casa o una compensación. El jefe del Gobierno ha convocado a los gobernadores de las regiones afectadas por los incendios forestales a una reunión el próximo lunes en Moscú para evaluar la situación.
Según datos del ministerio de Emergencia, en las últimas veinticuatro horas han estallado 787 nuevos incendios, de diversa magnitud, de los cuales 387 han sido sofocados. No obstante, los diferentes focos de incendio aún activos en la zona de Moscú amenazan ya a más de 200 localidades de las regiones de Moscú, Voronezh, Nizhny Novgorod y Mordovia, según ha informado el director del Centro Nacional para Situaciones de Crisis, Vladimir Stepanov.
Desde el comienzo del verano, marcado este año por la mayor ola de calor en Rusia en más de un siglo de observaciones meteorológicas, en el país se han registrado más de 23.000 focos de incendios naturales, un 17% más que en 2009, en una superficie de 404.000 hectáreas. La gravedad de la sequía y los incendios forestales han obligado a las autoridades a declarar el estado de emergencia en 27 de las 83 entidades que conforman la Federación Rusa.