El tiempo se alía con el surafricano Oosthuizen
Los malagueños Alex Cañizares y Miguel Ángel Jiménez mantienen vivas la esperanzas de terminar en lo más alto
ESCOCIA Actualizado: GuardarLuois Oosthuizen ésta cada vez más cerca de ganar la 139º edición del Open Británico en St. Andrews y seguir los pasos de su compatriota Ernie Els, el último surafricano que ganó este tercer torneo de Grand Slam, en 2002 en el no muy lejano campo de Muirfield. Aunque, algunos las aficionados han afirmado que el pulpo Paul ha vaticinado que un español iba a ganar el Open Británico, la distancia entre Alejandro Cañizares, el mejor español en la tabla en el puesto 4º con –7, es de ocho golpes, por lo que no parece que la predicción asuste al surafricano que tiene todas las papeletas en la mano para grabar su nombre en la Jarra de Plata del 150º Aniversario del Open.
Oosthuizen, a quien todos sus amigos le conocen con el apodo de ‘Shrek’ (por los grandes dientes separados como el famoso ogro animado), tomó la salida once horas después que empezar a jugar el viernes y comenzó el día con un bogey al hoyo 1, del que se rehizo en el hoyo 7 culminando los nueve primeros con otro birdie para marcar los dos golpes de diferencia (-13). En los tres últimos hoyos aumentó su ventaja a –15 en una vuelta casi perfecta, pese a las difíciles condiciones de viento y frío. Cuatro golpes le separan del inglés Paul Casey, el único rival capaz de seguirle el ritmo (-11) que desde el hoyo 9 fue incapaz de arrebatarle un sólo golpe a este puro link.
Detrás les persiguen un nutrido grupo de jugadores separados por un golpe ellos, entre los que se encuentran grandes aspirantes al título, como el alemán Martin Kaymer (-8) en tercera posición; seguido de cerca por el sueco Henrik Stenson, el inglés Lee Westwood y el español Alex Cañizares (-7), que no pudo evitar el bogey al 17, pese a jugarlo con gran inteligencia. “Tenía un segundo golpe complicado que yo quería jugar por alto, pero mi caddie, que tiene mucha más experiencia que yo, me ha dicho que ni hablar, que juegue a los lados y a intentar el par, si metía el putt, o al bogey. Es más seguro”, comentó el malagueño, que está dando toda una lección de juego pausado e inteligente.
“Bueno, las mariposas van por dentro. Cuando creí que entraba el eagle del 14, me ha subido un hormigueo por las piernas... En general me he divertido mucho, creo que es una de las mejores rondas de profesional, junto con el último día del Open de Francia, que he jugado. Y no se me ha hecho largo el día”, añadió ‘Cañi’, que tuvo que levantarse a las 4.14 de la madrugada para jugar los cuatro hoyos que le quedaban por terminar. “Ha sido un día un poco loco. Me he levantado a la 4.14, he desayunado, jugado los cinco hoyos que me quedaban, he tomado el segundo desayuno (como los hobbits), he dormido una horita; después de levantarme he comido, me he ido a entrenar y a jugar. Aunque suena agotador, ahora estoy como una rosa”.
Jiménez da el golpe del día
Miguel Ángel Jiménez, entre birdies y bogeys intentó agarrarse al campo y no distanciarse mucho de la cabeza; pero los últimos hoyos fueron criminales. Y eso que dio el golpe del día, el más celebrado y el que más se vio por la televisión. En el hoyo 17, el malagueño se fue al muro, tras un aproach de segundo golpe. Pocas opciones desde alli, por lo que intentó hacer el golpe que hizo tan famoso a Tom Watson. Lanzó la bola contra el muro, ésta se elevó y fue a parar al green, dejándole un putt de dos metros para bogey, que no quiso entrar por los pelos. Fue el doblebogey más aplaudido del día.
“¡¡¡Es un golpe que practico todos los días, 30 ´0 40 bolas!!! –bromeó Jiménez- No la verdad es que la primera vez que se lo vi hacer a alguien fue a Jarmo Sandelin en un Dunhill Cup (de las de antes, la competición por paises). Y siempre que he venido a jugar la Dunhill, practico por curiosidad, aunque nunca me ha salido tan bien como hoy, la verdad. Qué pena que fuera para bogey y que luego el putt no quisiera entrar. Este hoyo me ha penalizado mucho. Pero qué le vamos a hacer, así es el golf”, dijo el malagueño, que terminó su ronda con 74 golpes (-3) para caer hasta el puesto 18º, junto a Tiger Woods e Ignacio Garrido, o Camilo Villegas, entre otros.
Sin embargo Jiménez sólo tuvo palabras de apoyo y ánimo para Cañizares. “Es un chaval que vale mucho y se merece una victoria Grande pronto. Ahí lo tenemos bien colocado. Y si no gana ahora, pues será otra vez, pero muy pronto; estoy seguro”.
García también se anima
Una buena noticia hoy para el golf español fue la leve recuperación de Sergio García que además de su buen juego, esta vez recompensado con una tarjeta con 70 golpes (-4 en total en el puesto 12º) en un día complicado de viento y algún que otro chubasco intermitente, el propio García reconoció que su actitud va mejorando y que hoy se ha divertido (¡por fin!) jugando al golf.
“Tengo que agradece que tengo muchos amigos, mi familia y toda la gente que me rodea que me anima y me apoya y me ayudan a levantarme la moral. Hoy me he divertido en el campo. He jugado mejor. Bueno, todos somos humanos y tenemos bajones en el vida. Sé que ayer dije que no soy un jugar de los que salen al campo a hacer 71, pero hoy el 70, en estas complicadas condiciones de viento, me ha sabido a gloria”, dijo García, mucho más animado, aunque reconoció que quizá le haga falta un descanso para reflexionar. “Mi juego está mejorando, mi confianza también e incluso mi actitud en el campo, como he dicho, pero creo que necesito un descanso. Espero seguir mejorando y volver a ser el que era; el Sergio que todos conocemos, que yo conozco”, comentó el de Borriol.
Nacho Garrido terminó con 73 golpes –3 en el puesto 19º, empatado nada menos que con el último ganador del Open Británico en St. Andrews, el número 1 del mundo Tiger Woods, que no tuvo su día más feliz y volvió a hacer otra tarjeta de 73 golpes (-3). Álvaro Quirós, al par del campo, no acabó muy contento con el día. “El día estaba muy difícil y otra vez he vuelto a sufrir con el calvario del putt. Pero este campo no es el mejor para intentar arreglarlo; en el 10 he llegado a patear con un hierro 4 a ver si le dejaba más cerca”, digo el gaditano.