Los Príncipes y los nietos de los Reyes percibirán unos 70.000 euros cada uno por la herencia de un empresario menorquín
Los Príncipes donan su parte a una fundación para discapacitados en Menorca y a becas para la inserción laboral de los jóvenes
MADRID Actualizado: GuardarLos Príncipes y los nietos de los Reyes percibirán aproximadamente 70.000 euros netos cada uno por la herencia que el empresario menorquín Juan Ignació Balada Llabrés, fallecido el pasado 18 de noviembre y al que no conocían, les dejó, y a la espera de que se proceda a la venta de una serie de bienes inmuebles, ha informado hoy la Casa del Rey.
La herencia alcanza una cuantía tasada en 10.636.330,63 euros que, restados gastos y deudas, se queda en 9.832.995,42 euros. Por expreso deseo del fallecido, la mitad de la herencia se destinará a la creación de una fundación de ámbito nacional y de interés general presidida por los Príncipes y que tendrá un patrimonio fundacional cercano a los cuatro millones de euros. El empresario dejó que fueran sus Altezas quienes concretaran en qué áreas se centraría la nueva institución.
La Casa del Rey ha avanzado hoy en un comunicado que esta futura fundación se dedicará a apoyar a la juventud "en temas de empleo y formación, promoción de proyectos de carácter social y fomento de la cultura". Estas finalidades se enmarcan no obstante dentro de la voluntad de Balada, expresada en su testamento, de que la Fundación sirva para apoyo a la institución monárquica y su fomento a través de las ciencias y las artes.
Su presidencia de honor recaerá en los Príncipes, el Protectorado lo ejercerá el Ministerio de Educación y sus patronos serán Gonzalo Urquijo, Juan Luis Iglesias y Enric Brancos, todos ellos patronos de la Fundación Príncipe de Asturias y la Fundación Príncipe de Girona. En un principio, la parte de la herencia que irá a parar a esta nueva institución estará libre de impuestos.
A partes iguales
El resto se reparte a partes iguales, como así dispuso Balada, entre los Príncipes y los ocho nietos de los Reyes. Tras pagar el Impuesto de Sucesiones a la Comunidad Autónoma de Baleares (estimado en un total de 3,3 millones de euros) los Príncipes y los ocho nietos de los Reyes percibirán en torno a 70.000 euros netos cada uno.
Será la Comunidad Autónoma de Baleares la que notifique en un futuro a cuánto asciende concretamente la liquidación correspondiente del Impuesto de Sucesiones, y para ello han de presentarse previamente determinados documentos que acrediten el inicio del proceso de creación de la nueva fundación.
Nada más conocerse la noticia de la herencia en enero pasado, los Príncipes agradecieron el gesto del empresario menorquín, al que no conocían, y avanzaron que la parte que les correspondía la destinarían a fines de interés general y social, es decir, ya adelantaron entonces su intención de aceptar la herencia.
Casa Real ha precisado hoy en un comunicado que Don Felipe y Doña Letizia destinarán su parte de la herencia, unos 140.000 euros, a la Fundación para personas discapacitadas de la Isla de Menorca y al apoyo de los jóvenes, mediante becas de inserción en el mundo laboral y formación profesional. La fundación menorquina pondrá en marcha un proyecto que llevará el nombre de Balada.
Minoría de edad
Con respecto a los ocho nietos de los Reyes, y dado que, por ser menores de edad, se precisa autorización judicial para ceder o donar su parte en la herencia, corresponde a sus padres administrar, hasta su mayoría de edad, su parte del legado. Una vez alcanzada la mayoría de edad, decidirán sobre el destino de la cantidad recibida.
Y es que precisamente por su menoría de edad, los padres de los ocho nietos de los Reyes no pueden ceder, ni regalar, ni donar la parte que les corresponde a sus respectivos hijos en la herencia, sin autorización judicial. Por eso se ha tomado la decisión de esperar a que los menores cumplan la mayoría de edad y decidan libremente, en esa fecha, el destino de la parte heredada.
Hay una parte de la herencia que permanece sin distribuir entre los herederos y la Fundación, y que corresponde al conjunto de los bienes inmuebles de la herencia hasta tanto se efectúe su venta. Se trata de un local comercial explotado como cafetería, siete pisos y una finca rústica, valorados por la Comunidad Autónoma de Baleares en unos 1,8 millones de euros. Casa Real ha querido aclarar que se respetarán en sus derechos a los actuales arrendatarios.
El empresario menorquín dispuso en su testamento que, en el caso de que los herederos renunciasen a la herencia, ésta pasaría al Estado de Israel. El legado de Balada se compone, de acuerdo con el informe del albacea, exclusivamente por bienes inmuebles situados en la isla de Menorca y valorados en 1,8 millones de euros, el 100 por ciento de la sociedad ADALAB (unos 5,2 millones de euros) que se disolverá, valores mobiliarios cotizados en bolsas y depósitos de dinero en bancos. No consta que tuviese industrias, negocios ni explotaciones económicas de ningún tipo.