Salgado insiste en la solvencia del sistema financiero pese a la intervención de Cajasur
Los clientes realizan sus operaciones habituales a la espera de que la entidad reciba de manera oficial la comunicación de su disolución
CÓRDOBA Actualizado: GuardarLa vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, ha insistido en la solvencia del sistema financiero español pese a la intervención de Cajasur por el Banco de España este fin de semana, que ha calificado como "una señal de firmeza, de control y de solvencia" por parte del instituto emisor.
Salgado ha señalado que "es importante que no se diga que el sistema financiero español está en riesgo por una entidad tan pequeña como es Cajasur" y por eso, el Banco de España "se ha hecho con el mando de la entidad y va a proceder a su subasta competitiva en plazo relativamente corto para que incluso este pequeño problema quede solucionado".
Preguntada por el coste del saneamiento de Cajasur, Salgado ha asegurado que aún se desconoce y que los gestores del FROB son los que tienen que hacer una evaluación, pero ha asegurado que "el futuro pasa porque la entidad (o una parte de sus activos) pueda ser absorbida por otra en un proceso que tiene que ser competitivo para que a los contribuyentes nos cueste lo menos posible".
Tras esta intervención, Salgado ha advertido a los gobiernos autonómicos de que sean conscientes de que "las decisiones deben tomarse con rapidez", y también les ha dejado muy claro que deben favorecer las fusiones entre cajas de distintas comunidades "si en algún momento es conveniente" para favorecer la solvencia del sistema financiero y mejorar "nuestra credibilidad económica".
Salgado ha expresado, asimismo, su esperanza de que el proceso de reestructuración de las cajas de ahorros esté terminado "en pocas semanas" (antes del 30 de junio), tal y como acordaron recientemente el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder de la oposición, Mariano Rajoy. "El Banco de España está en esa tarea y las cajas también", ha zanjado.
Normalidad en las oficinas
La sede central de Cajasur así como sus 474 oficinas han abierto sus puertas a los clientes a las 08.30 horas, en el primer día laborable después de que en la madrugada del sábado la entidad fuera intervenida.
A la entrada de la sede central, en la Avenida Ronda de los Tejares de la capital cordobesa, así como en la oficina principal ubicada enfrente, los primeros clientes que entraban en el edificio manifestaban que acudían a hacer sus operaciones habituales y aseguraban que no tenían ningún tipo de temor por la noticia. Alguno de ellos incluso señalaba que creía que ahora sus ahorros están más protegidos que el viernes, antes de que se produjera la intervención del organismo regulador. Por su parte, los trabajadores han acudido con normalidad a incorporarse a sus puestos de trabajo poco antes de que las puertas de las oficinas se abrieran al público.
Los administradores nombrados por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) tras la intervención del Banco de España llegaron a Córdoba en la tarde del sábado y ya han accedido durante el fin de semana a las instalaciones de la caja. Según la resolución recogida el sábado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), los designados son José Antonio Iturriaga Miñón, Tomás González Peña y Francisco Orenes Bo, quienes actuarán en todas las funciones que le corresponden al FROB, institución que inyectará unos 550 millones de euros en Cajasur para que pueda cumplir los requisitos mínimos de solvencia.
Administradores provisionales
La labor de los administradores provisionales, según el BOE, será dirigir, controlar y ejecutar la actividad diaria de la caja, nombrar el equipo de dirección que consideren oportuno para cumplir sus funciones y conceder y revocar poderes, incluidos los que estén vigentes en la actualidad. Se espera que los órganos de Cajasur reciban hoy de manera oficial la comunicación del Banco de España de su disolución.
La entidad cordobesa, que cuenta con más de tres mil empleados, acumuló en 2009 casi 600 millones de euros en pérdidas y unos 114 millones en el primer trimestre de este año, lo que ha motivado la intervención del Banco de España, una vez que fracasaron las negociaciones para que se produjera la fusión con Unicaja.