Fotografía aérea del Golfo de México difundida por la NASA en la que se observa el rastro de la marea negra. / Efe
vertido de petróleo en EEUU

El mal tiempo amenaza la lucha contra la marea negra en el Golfo de México, que se aproxima imparable a la costa

EEUU se moviliza ante la que podría convertirse en su mayor catástrofe ecológica de las últimas décadas

WASHINGTON Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Vientos intensos y olas de gran altura amenazan con frustrar los esfuerzos por impedir que la marea negra de petróleo contamine las costas de Luisiana y desate una catástrofe ecológica no sólo en ese estado sino también en los de Florida y Alabama. El Servicio Meteorológico Nacional pronostica para este sábado un aumento de los vientos y de las mareas con olas que empujarán el petróleo al interior de las pequeñas bahías del sudeste de Luisiana.

Además, los vientos aumentarán la altura de las olas a lo que se sumará la probabilidad de tormentas eléctricas durante el día en toda la región, señaló. Tom McKenzie, portavoz del Servicio de Pesca y Vida Salvaje de EEUU, ha explicado que es posible que las olas hagan inútiles las barreras flotantes que ya se han instalado a poca distancia de las costas de Luisiana y que, pese a la amenaza de mal tiempo, continúan instalando más de 6.000 efectivos y centenares de barcos.

El Gobierno de EEUU ha intensificado sus presiones sobre la petrolera British Petroleum (BP) para que multiplique sus esfuerzos con el objetivo de poner fin al vertido de crudo y reducir el impacto ambiental. "Es hora de que BP aumente su movilización en momentos en que la marea negra de crudo avanza hacia las costas", ha señalado la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, tras hacer un recorrido por la región. "Seguiremos insistiendo para que BP aumente sus esfuerzos", agregaba.

Tres estados en situación de emergencia

El vertido de unos 5.000 barriles de petróleo diarios -800.000 litros- comenzó después de una explosión el pasado día 20 y el hundimiento dos días después de una plataforma de prospección petrolera de BP a unos 75 kilómetros de la costa de Luisiana.

En una conferencia de prensa en ese estado, Doug Suttles, jefe de operaciones de la petrolera, ha explicado que su empresa ha desplegado el mayor esfuerzo que se conozca en el mundo para resolver un problema de este tipo. "Hemos utilizado todas las tecnologías disponibles, hemos acudido a todos los recursos. Agradecemos cualquier idea nueva y todas las ofertas de apoyo" para esta tarea.

Como Luisiana, también Florida y Alabama han decretado el estado de emergencia, que permite que el gobernador ordene medidas de excepción para asegurar que todos los organismos del estado estén listos para responder si la marea de petróleo llega a las costas. Los primeros signos de que eso está ocurriendo han comenzado a aparecer por aire. Hasta Luisiana han llegado pájaros manchados de crudo que se han convertido en símbolo del que ya está considerado como uno de los peores desastres ecológicos de la historia de Estados Unidos.