Defensa asegura que el helicóptero siniestrado en Haití estaba en «perfecto» estado de mantenimiento
Los cuatro fallecidos son un comandante de Intendencia, un teniente y un cabo mayor de Marina y un alférez de navío
MADRID Actualizado: GuardarEl helicóptero accidentado ayer en Haití, en el que murieron cuatro militares españoles, estaba en "perfecto" estado de mantenimiento y había pasado todas las revisiones requeridas. Así lo ha confirmado el comandante del Mando de Operaciones, teniente general Jaime Domínguez Buj.
En una rueda de prensa en la sede del Estado Mayor de la Defensa, el teniente general ha explicado que los dos aparatos que realizaban la misión -un Augusta Bell 212 y un Sikorsky- son los que siempre utiliza la Armada y los que estaban asignados al buque 'Castilla', al que pertenecían los militares muertos. Aunque siguen sin conocerse las causas del accidente, que se produjo en una zona montañosa de Haití cerca de la frontera con la República Dominicana y en condiciones meteorológicas de visibilidad "reducida", Domínquez Buj ha asegurado que la ruta que siguieron ambos helicópteros era habitual para ellos.
Los 440 militares del buque Castilla, que trabajan en misión humanitaria en Haití, viven hoy una jornada de luto y consternación por la pérdida de cuatro de sus compañeros, fallecidos ayer al estrellarse el helicóptero en el que viajaban. "El de ayer fue un duro golpe para todos, una jornada de tristeza, pero ahora queremos recuperar los cadáveres y seguir con nuestra misión humanitaria en Haití", ha dicho el oficial de información pública del Castilla, David Surones.
Mientras, en la zona del accidente, militares españoles han iniciado los trabajos para recuperar los cadáveres de los cuatro compañeros fallecidos en el accidente. los trabajos se centran en situar los cuerpos en un punto desde el que puedan ser introducidos en helicópteros para ser trasladados al buque 'Castilla', que está fondeado en la costa de Petit Goave, a unos 60 kilómetros al sur de Puerto Príncipe.
Los fallecidos son Luis Fernando Torija Sagospe, comandante del Cuerpo de Intendencia, de 44 años, natural de Madrid, casado y con dos hijos; Francisco Forne Calderón, teniente de Infantería de Marina, de 37 años, natural de Barcelona, casado y con tres hijos; Manuel Dormido Garrosa, alférez de navío, de 35 años, natural de Valencia, casado y con un hijo, y Eusebio Villatoro Costa, cabo mayor de Infantería de Marina, de 41 años, natural de Cádiz, casado y sin hijos. Como el resto de militares españoles desplegados en el país, llevaban a cabo desde el pasado 4 de febrero labores de reconstrucción y ayuda, sobre todo sanitarias y de distribución y producción de agua potable, así como trabajos de desescombro en las calles.
Continúa el rescate de los cadáveres
Defensa ha explicado que el siniestro del aparato, perteneciente a la agrupación 'Hispaniola', se produjo en la tarde del viernes cuando regresaba desde República Dominicana de recoger un envío logístico procedente de España. Según ha señalado, los dos helicópteros que realizaban esta misión perdieron contacto entre ellos por baja visibilidad, por lo que se puso en marcha un dispositivo de búsqueda que avistó el aparato siniestrado en una ladera de una montaña de difícil acceso próxima a la localidad haitiana de Fond-Verettes.
Los restos del aparato quedaron desperdigados por la zona del accidente, un área montañosa de muy difícil acceso. Según un miembro del equipo, "el fragmento más grande es el tablero de mandos". Una vez introducidos en bolsas y asegurados, los cadáveres de los militares, que han quedado calcinados, serán llevados al barco de la Armada española.
Los miembros de los grupos de rescate estudian si es más conveniente subir los cuerpos a las cimas de las montañas, en caso de que los helicópteros puedan llegar a ese punto, o bajarlos al pie de las lomas y trasladarlos a una zona abierta donde puedan tomar tierra los aparatos
Un Agusta Bell 212
El aparato accidentado es un Agusta Bell 212, una aeronave concebida para misiones de transporte táctico de personal, traslado de cargas, lanzamiento de paracaidistas, aeroevacuación medicalizada y que también se utiliza para labores de mando y control. Capaz de alcanzar una velocidad de 100 nudos a plena carga, tiene una autonomía de vuelo de casi dos horas y puede operar a un máximo de 20.000 pies de altura, unos 6.000 metros. Según datos de la Armada, el helicóptero está dotado con dos motores de 900 caballos de vapor cada uno y tiene sistema de estabilización automático.
El presidente del Gobierno ha enviado un telegrama a la ministra de Defensa en el que expresa su pesar por la muerte de los cuatro militares y en el que manifiesta su "respeto" y "orgullo" por la labor humanitaria que los soldados españoles realizan allí, quienes, señala, "han dado todo sirviendo a quienes no tenían apenas nada". También los Reyes han enviado hoy telegramas de pésame a las familias de las víctimas del helicóptero accidentado en Haití, así como a los máximos responsables del Ejército del Aire y de la Armada.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, ha expresado directamente sus "más sentidas condolencias" a las familias de los cuatro militares y les ha trasladado el pésame recibido de la Alta Representante para Asuntos Exteriores de la UE, Catherine Ashton. En conversación telefónica con los familiares, Moratinos ha elogiado "los méritos y el valor" de los fallecidos, cuyos restos mortales descansarán en la capilla ardiente dispuesta a bordo del buque 'Castilla' antes de ser repatriados.
La agrupación táctica española de 450 efectivos desplegada en Haití a través del 'Castilla' y bajo la coordinación del capitán de navío Francisco Pañuelas, comandante de este buque y jefe de la 'Operación Hispaniola', tiene previsto permanecer en aquel país hasta el 4 de mayo, si bien este plazo podría ser prorrogado si las circunstancias lo hicieran necesario.
Desplegados en Petit Goave
Los militares españoles están desplegados en Petit Goave, localidad costera situada a 70 kilómetros de Puerto Príncipe. El buque 'Castilla', que partió desde Rota (Cádiz) el 22 de enero, se encuentra navegando frente a las costas de esta población dando apoyo a las unidades de la agrupación española que diariamente se despliegan en tierra, al tiempo que lleva el control de las operaciones terrestres y aeronavales.
Dentro del contingente hay equipos de apoyo logístico y zapadores de Infantería de Marina, que recibieron antes de llegar a la zona conferencias de ambientación del área y se alistaron para los trabajos de desescombro, apertura de carreteras, producción y distribución de agua, entre otros.
Por su parte, la unidad de sanidad embarcada está organizada en tres equipos que trabajan coordinados: un equipo quirúrgico (traumatología y cirugía general) con una célula de cuidados intensivos; un equipo de asistencia para atención hospitalaria que incluye atención ginecológica, atención ambulatoria a la población civil y asistencia pediátrica; y un equipo de apoyo que integra diferentes especialidades sanitarias, con medicina preventiva, farmacéutico, psicólogo, odontólogo y veterinario.