El número de víctimas mortales del terremoto en China supera el millar
Monjes tibetanos ayudan en las tareas de rescate mientras se busca a casi 400 desaparecidos
PEKÍN Actualizado: GuardarLa cifra de víctimas mortales confirmada por el terremoto de 7,1 grados que sacudió el pasado miércoles un área tibetana de la provincia de Qinghai (noroeste de China) asciende a 1.144, según datos de las autoridades locales, que elevan a 417 el número de desaparecidos. El portavoz de los servicios de emergencia, Xia Xueping, ha afirmado que un total de 11.744 personas resultaron heridas en el seísmo, 1.192 de ellas de gravedad.
El presidente chino, Hu Jintao, ha decidido acortar su viaje a Brasil, donde participa en un foro de los países BRIC -Brasil, Rusia, India, China-, para regresar a Pekín cuanto antes. "En este momento complicado necesito regresar a mi país urgentemente para estar junto al pueblo de China, trabajando en las tareas de rescate por el terremoto", explicaba a los líderes internacionales. El temblor sorprendió a Hu en Washington, donde asistía a la Cumbre de Seguridad Nuclear. El presidente convocó una reunión de emergencia para analizar las primeras repercusiones del temblor.
Frío y falta de comida
Muchos de los supervivientes del seísmo han pasado una segunda noche a la intemperie, bajo unas temperaturas mínimas, en espera de que llegue más ayuda a la zona. "Hace mucho frío por la noche. Necesitamos tiendas de campaña y comida lo antes posible", ha dicho a la prensa una víctima del terremoto, que ha añadido que una bolsa de harina recogida entre los escombros es la única comida de la que disponen él, su mujer y sus cuatro hijos. En la ciudad de Jiegu, la más afectada, con un 85% de las casas destruidas, muchos residentes buscan alimentos y mantas entre las ruinas.
Mientras, los equipos de rescate, que intentan hacer frente a las malas condiciones meteorológicas y a la falta de oxígeno (la urbe está situada a 4.000 metros de altitud), siguen sacando a las personas bajo los edificios derrumbados. Al menos 7.093 efectivos participan en las operaciones de salvamento de Jiegu, donde ya se ha rescatado a 6.900 residentes. Muchas de las carreteras de la zona han resultado dañadas, entre ellas las que unen área con la capital provincial, Xining, uno de los pocos lugares con hospitales bien acondicionados para tratar a los heridos.
Monjes tibetanos ayudan en las tareas de rescate
Todavía hay mucha gente que permanece sepultada entre los escombros, según los medios, que, conforme pasan los días, van revelando las historias personales de los supervivientes. Xinhua ha informado, por ejemplo, del nacimiento durante estos tres días de varios bebés en la zona afectada. "Debe ser la primera vida que llegó al mundo tras la catástrofe", ha relatado un médico sobre el nacimiento de un niño en una de las tiendas de campaña desplegadas en la ciudad de Jiegu. "El bebé ha traído la esperanza a este lugar en ruinas", ha subrayado.
Unas 10.000 prendas de ropa y colchas, así como 400 cajas de agua potable y fideos instantáneos, llegarán hoy a Yushu, cuya población esta compuesta por un 90% de tibetanos. Precisamente los monjes tibetanos se han unido a las tareas de rescate, durante las cuales se han encontrado ya los cadáveres de 103 estudiantes y 12 profesores.
En una rueda de prensa celebrada en Pekín para informar de las consecuencias del seísmo, Wang Yu, jefe del equipo médico, ha apuntado que "el hecho de que la mayoría de la gente sea tibetana ha dificultado las labores médicas, ya que los doctores tienen problemas para comunicarse con los heridos". Por eso, unos 100 estudiantes que hablan tibetano participan como voluntarios en el hospital de Xining, según el diario China Daily.
El Gobierno chino redobla los esfuerzos
El primer ministro chino, Wen Jiabao, que se ha desplazado a la zona y ha suspendido un viaje a Brunei, Indonesia y Birmania, ha asegurado que "aún cuando sólo hay una mínima esperanza, nos esforzaremos al máximo y nunca nos rendiremos ". Por su parte, el presidente chino, Hu Jintao, ha acortado su visita oficial a Brasil y ha cancelado las que posteriormente iba a hacer en Venezuela y Chile, para regresar a China.
Los sismólogos advierten que podrían producirse fuertes temblores en los próximos días y afirman que "la réplica de 6,3 grados de magnitud que tuvo lugar tras el seísmo se considera de gran alcance en comparación con los registros históricos", por lo que "hay que estar atentos a más temblores que ronden los 6 grados". Según Zhou Rongjun, investigador de la Oficina de Terremotos de Sichuan, "con una investigación sismológica moderna, los científicos son capaces de decir qué lugares son más vulnerables a los seísmos de más o menos intensidad, pero sigue siendo un desafío dar una fecha exacta de cuándo pueden producirse".