«Llevar la caña es un honor, un privilegio y una satisfacción increíble», asegura Francisco Licinio, de 24 años y natural de San Fernando
Lejos de lo que se pueda suponer, en la Armada Española el comandante no es el encargado de llevar el timón del buque. De ello se ocupa un marinero, que rota dependiendo de las guardias, y que lleva sobre sus hombros la responsabilidad de dirigir, a las órdenes del oficial de dicha guardia, el rumbo del barco.
«Llevar la caña del Juan Sebastián de Elcano es un honor, un privilegio y una satisfacción increíble», afirma el marinero Francisco Licinio Gómez Portillo. Este isleño de 24 años lleva apenas uno en la Armada, donde ingresó por tradición familiar (su padre es sargento primero) y, en su primer destino, ejerce como timonel.
«Estoy destinado en puente, junto con seis compañeros más (marineros, cabo primero, suboficial y oficial) y me dedico a todo lo relacionado con navegación: cartas náuticas, radar, ESDIS, AIS, estar en la caña timoneando y tener el puente siempre listo y alistado», detalla.
Durante la navegación «hay momentos en los que se está más tranquilo a la caña y otros en los que es necesario dedicarle más concentración si cabe, sobre todo cuando son tramos muy estrechos o de poca sonda, en los que no podemos variar mucho el rumbo», cuenta Licinio.
Al tiempo que subraya que disfruta mucho de su trabajo, tanto cuando entra en los puertos, con el recibimiento de la gente, como si hay mala mar durante una navegación. «Llevar la caña en esos momentos, ver cómo te entra el agua por la proa. Eso es increíble. Hay que estar muy concentrado», puntualiza.
«Hasta donde nos lleve la proa»
Para ejercer como timonel ha recibido la formación de la escuela militar, tanto la básica, que abarca los dos primeros meses de instrucción, como la específica de su especialidad, maniobra y navegación, de tres meses de duración. De estos seis meses realizando el 91 crucero de instrucción del Juan Sebastián de Elcano subraya que ha sido «una experiencia única, muy bonita. Los puertos que hemos tocado han sido espectaculares, al igual que los recibimientos en los mismos».
Le decimos que elija un momento que recuerde especialmente y no tiene duda, la entrada en Getaria el pasado día 6 de julio, «bastante complicada, con un recibimiento impresionante, que no se me va a olvidar». «Los vascos nos han recibido y tratado genial, en las calles, en el puerto, cuando venían las visitas… No lo esperábamos y nos ha sorprendido», detalla.
Ahora tiene ganas de llegar a casa, a Cádiz, el próximo domingo 21 de julio y «descansar, estar con la familia y con mi pareja».
Pero «ya mismo estaremos preparando el próximo crucero», explica. Licinio realizará el 92 crucero de instrucción del Juan Sebastián de Elcano, de noviembre de 2019 a abril de 2020 y quizá también la vuelta al mundo del buque escuela, que será el 93 crucero de instrucción y abarcará de agosto de 2020 al mismo mes de 2021, aunque esto último no lo sabe con seguridad, porque está preparándose para ascender a suboficial y, si consiguiese entrar en la escuela, no podría realizar esta undécima circunnavegación del bergantín-goleta. «Adelante, hasta donde nos lleve la proa», sentencia.
Que vendrá por aquí Barcelona Gracias M Pilar
Pise su cubierta en el 71, navegue en Elcano, en el 2017, me cupo la satisfacción de llevar la caña un buen tramo y vuelvo a él este julio a dibujarlo, te buscare y nos haremos una foto. Felicidades y nunca pierdas el rumpo. BZ