PROVINCIA
La llegada de pateras, un goteo que no tiene fin
El buen tiempo y las buenas condiciones del mar hace que los intentos de los inmigrantes por llegar a España no se haya interrumpido este invierno
El goteo de la llegada de pateras a las costas gaditanas no se interrumpe. En las últimas semanas el puerto de Tarifa ha sido testigo de la desesperación de los inmigrantes por lograr el sueño de tener una vida mejor al otro lado de la frontera. Sólo en lo que va de 2016 lo han intentado 458 personas.
El pasado martes las patrullas de Salvamento Marítimo rescataba a 28 subsaharianos que viajaban a bordo de tres pateras. Las embarcaciones, barcas de juguete hinchables, eran localizadas durante la mañana en aguas del Estrecho de Gibraltar y entre ellos viajaba un bebé.
Los últimos años la prolongación del buen tiempo en una especie de primavera constante hace que se estén incrementando también el número de barcas que llegan a nuestras costas. O que lo intentan. La mayoría de las veces son interceptados y rescatados gracias aun trabajo que mantiene en vilo a los servicios de Salvamento Marítimo, Guardia Civil, Cruz Roja y Vigilancia Aduanera.
Ellos mismos llaman
Su labor es muy importante porque más allá de vigilar el paso de indocumentados se trata de salvar vidas. La mayoría de las veces son los propios inmigrantes los que aterrados por su destino en estas frágiles lanchas desisten y llaman para pedir que los rescaten. El problema entonces es dar con ellos. No suelen saber donde se encuentran en alta mar, están desorientados , y muchos de ellos al borde del desmayo con síntomas claros de hipotermia. Además, a veces las pateras en las que emprenden la aventura son tan pequeñas que ni los controles del SIVE pueden avistarlas.
Los centros de coordinación son fundamentales para actuar deprisa y saber cuántos medios hay que enviar. Cuando por fin se les localiza hay que intentar que mantengan la calma ya que la mayoría ni siquiera sabe nadar.
