El buque escuela de la Armada Española arribó este miércoles en el puerto mexicano, procedente de Cartagena de Indias
El ’embajador y navegante’ español ya se encuentra en México, concretamente en Veracruz, a cuyo puerto llegó este miércoles 20 de marzo, un día más tarde de lo inicialmente previsto. Con un viento del norte leve y los sones jarochos, música nacida de las tres raíces mexicanas: indígena, española y negra, fue recibido el Juan Sebastián de Elcano a su entrada en el muelle de Veracruz, que tuvo lugar a mediodía, entre cañonazos de salvas de honores. También sonaron en la bienvenida las notas de ‘Granada’, canción del compositor mexicano Agustín Lara.
Así, llegaron los 250 miembros de la dotación del buque escuela de la Armada Española, entre ellos los 70 guardiamarinas de la Escuela Naval Militar que se encuentran realizando su crucero de instrucción, el número 91 del bergantín-goleta. Militares a los que Don Anselmo, un vendedor veracruzano de típicos volovanes (una especie de empanada con distintos rellenos), calificaba mientras el barco arribaba en el muelle, «como de nuestra sangre, somos uno mismo».
500 años, de Hernán Cortés a Elcano
Llegar a Veracruz «es una alegría, porque aunque la escala estaba prevista, coincide con el centenario de la llegada de Hernán Cortés», afirmó el comandante del Juan Sebastián de Elcano, Ignacio Paz García. Y es que en 1519 el conquistador español llegó a este lugar, con sus once embarcaciones que zarparon desde la isla de Cuba. Los historiadores aseguran que Cortés (junto con 518 soldados, 110 marineros, 16 jinetes, 32 ballesteros, 13 escopeteros, 10 cañones y cuatro falconetes) desembarcó en la zona de San Juan de Ulúa y en La Villa Rica, ambos lugares en las costas del Golfo de México.
Un quinto centenario que coincide con otra efeméride que el buque escuela lleva a gala por todos los lugares en los que recala, el inicio de la primera vuelta al mundo, que zarpó desde Sanlúcar de Barrameda en 1519, al mando de Fernando de Magallanes, pero culminó en 1522, tres años después, el navegante vasco del que este barco lleva el nombre, Juan Sebastián de Elcano.
«Somos un buque escuela antiguo, que no viejo», afirmó el capitán de navío Paz, al llegar a Veracruz. Una llegada que medios mexicanos han calificado como «un espectáculo para turistas y habitantes del puerto». Es la 14ª visita del Juan Sebastián de Elcano a México, siete de ellas a Veracruz, y supone el quinto puerto de los 14 (en nueve países diferentes) de los que consta su 91 crucero de instrucción.
Homenaje de la Marina de Guerra y el Elcano
Durante la misma, que se dilatará hasta el próximo domingo 24 de marzo, además de las actividades institucionales y protocolarias, se realizarán «jornadas de puertas abiertas, en horario de mañana y tarde, para enseñar la vida y trabajo en el buque», señalan desde el Elcano. Además, se llevará a cabo una jura de bandera a bordo y parte de la dotación asistirá a un cóctel en el casino español de Veracruz.
Por su parte, el comandante del buque escuela impartirá una conferencia en el Cuartel General de la I Región Naval y su unidad de Música dará un concierto abierto al público en la Plaza de la República. Además, «los guardiamarinas visitarán la Heroica Escuela Naval Militar, donde tendrán oportunidad de conocer sus instalaciones y funcionamiento y confraternizar con sus homólogos mexicanos a través de una serie de actividades como competiciones deportivas, visitas profesionales y almuerzos, tanto en el buque como en la Escuela», explican desde el Elcano.
Para concluir su estancia en Veracruz, antes de zarpar hacia su próximo puerto, la ciudad estadounidense de Pensacola, la dotación del Juan Sebastián de Elcano rendirá un homenaje conjunto con la Marina de Guerra mexicana en el monumento a los ‘Héroes Navales’.
De Cartagena a Veracruz
El Juan Sebastián de Elcano llegó a Veracruz procedente de Cartagena de Indias, ciudad colombiana desde la que había zarpado el día 6 de marzo, tras permanecer allí durante seis días, y donde recibió la visita de 1.618 cartageneros.
En ese puerto colombiano el ’embajador y navegante’ realizó una intensa actividad protocolaria y de representación, llevando España a la ciudad en la que el almirante Blas de Lezo se convirtió en héroe. Así, en la mañana del día de llegada, el 1 de marzo, se recibió con honores de ordenanza al embajador de España en la República de Colombia, Pablo Gómez de Olea Bustinza, quien asistió a la comida de protocolo, a la recepción y, asimismo, presidió la jura de Bandera, en la que fue uno de los 82 jurandos. El embajador también ofreció en el Centro de Formación de Cooperación Española en Cartagena una recepción a la dotación y guardiamarinas que fue amenizada por la unidad de música del buque. E impartió una conferencia sobre su visión de la situación actual en Colombia, su peso en la región y en las relaciones vecinales, así como la relación con España.
«En lo que respecta a las visitas protocolarias», explican desde el buque, «el comandante, Ignacio Paz, fue recibido por el vicealmirante comandante de la Fuerza Naval del Caribe y el contralmirante director de la Escuela Naval de Cadetes ‘Almirante Padilla’».
Por otro lado, en lo relativo a visitas profesionales y culturales, los guardiamarinas visitaron la Escuela Naval, donde se celebraron unas jornadas deportivas. Asimismo, un grupo de cadetes de la Armada de la República de Colombia (ARC) visitaron el Elcano, donde disfrutaron de una comida en la cámara de guardiamarinas. Y, en la mañana del 5 de marzo se celebró a bordo el acto de firma de las minutas de la III Comisión Mixta Hispano Colombiana, encontrándose al frente de la delegación española el vicealmirante Ignacio Horcada Rubio.
Además, la dotación del Juan Sebastián de Elcano celebró dos homenajes conjuntos con la ARC. El primero de ellos, en la mañana del día 2 al almirante Blas de Lezo, en la estatua que se encuentra a los pies de fuerte de San Felipe de Barajas. Y, por otro lado, el miércoles 6, en el Museo Naval del Caribe, «se materializó la entrega a la ARC de un ancla donada por la Armada Española, como símbolo de la unión entre ambas Armadas y en recuerdo del navegante y cartógrafo español Juan de la Cosa, fallecido en Turbaco, ciudad próxima a Cartagena», cuentan desde el Elcano.
Parabéns pelo sucesso da missão! Acompanho com entusiasmo as homenagens a Magalhães e a Elcano pela espetacular façanha!