Balnce económico diócesis de Cádiz y Ceuta

Los ingresos de la diócesis de Cádiz por la explotación del patrimonio descendieron un 82,5% en 2020

La suspensión de las visitas a la Catedral, el Oratorio y la Santa Cueva, claves en el balance de ingresos anuales

Imagen de la reanudación de las visitas en Catedral tras la pandemia Antonio Vázquez

A. M.

La diócesis de Cádiz y Ceuta presentaba este pasado domingo, con motivo del día de la Iglesia Diocesana , los resultados económicos del año 2020 que muestran un equilibrio en las cuentas entre los ingresos y gastos de dicho ejercicio. Según el boletín Nuestra Iglesia, publicado el 7 de noviembre, la iglesia gaditana ingresó 14.427.043,28 euros a través de aportaciones de los fieles, asignación tributaria, patrimonio y otros ingresos corrientes y extraordinarios.

Por su parte, en lo que se refiere a los gastos, 14.427.043,28 euros , se destinaron fundamentalmente a la conservación de edificios (4.725.919,82 euros). Otra parte importante dedicó a las retribuciones al clero (2.035.724,53 euros) y también al personal seglar (3.564.781,41 euros). Además, para las acciones pastorales y asistenciales la diócesis de Cádiz destinó el pasado año 2.988.717,29 euros de sus gastos totales. A estas cantidades hay que añadir las aportaciones a centros de formación, los gastos extraordinarios y la financiación.

Esos son los conceptos en los que de forma sencilla se agrupan los ingresos y gastos de la diócesis. No obstante, tras esos epígrafes se encuentra minuciosamente detallado cada euro que se mueve en el Obispado. Para ese control económico es fundamental la labor del Consejo de Asuntos Económicos presidido por el obispo, Rafael Zornoza , e integrada por distintos miembros, entre ellos, la ecónoma, Carmen Lobato, y Juan Carlos Herrera . Ambos explican y desgranan los números que se han presentado en un año en el que la pandemia del coronavirus ha modificado las circunstancias.

En primer lugar, como destacan Lobato y Herrera, «hay que considerar que las cuentas son el resultado de la suma y consolidación de las del propio Obispado, las de sus 117 parroquias, el seminario diocesano, la Catedral, Cáritas, Obras Misionales Pontificias, Manos Unidas, la residencia de ancianos San José y la Escuela de Magisterio Virgen de Europa».

Ingresos

Entre los distintos conceptos de los ingresos se encuentran las aportaciones de los fieles a través de las colectas, suscripciones, donativos... En este sentido, con 5.314.797,14 euros, se ha producido un incremento del 10,7% con respecto a 2019 , lo que resulta especialmente significativo en un 2020 marcado por la pandemia. Herrera explica que que «la parte de las colectas a través de las parroquias sí se ha reducido por las limitaciones al culto que hemos tenido. Después se recuperó pero ha caído un 18%. Sí se ha producido un incremento en las suscripciones a través de cuotas domiciliadas y donativos. Además de eso están otros ingresos, aportaciones a cáritas diocesanas y parroquiales, donativos diversos... más los servicios religiosos que algunos comportan algunas tasas».

No obstante, el dato más significativo ha sido el crecimiento en un 57,99% de los donativos recibidos por Cáritas, llegando a 2.449.000 euros. Es el reflejo de la sensibilidad y generosidad de los fieles en un periodo en el que el número de necesitados creció en todo el país. «Se ha notado un incremento potente en las donaciones a Cáritas, ha salido a relucir la solidaridad de fieles y no fieles porque también ha habido muchas empresas que han estado ahí . El efecto de volcarse la gente, la solidaridad ha sido impresionante», comenta Carmen Lobato que además añade que «a pesar de la pandemia y que la edad media del voluntariado es elevada han estado allí y también han sido clave las hermandades en su conjunto, los jóvenes de las cofradías... han sido ejemplares, los voluntarios y también los sacerdotes ».

La asignación Tributaria para el Fondo Común Interdiocesano (2.962.000 euros) , que crece un 7,25% con respecto a 2019, procede del porcentaje que le corresponde a la diócesis por los titulares que en su declaración del IRPF marcaron la casilla de la donación a la Iglesia. Como explica Herrera, «ha habido un crecimiento aunque esto viene del 2019 pero nos acercamos a los 3 millones». Carmen Lobato indica además que « hay una labor de difusión a través de Xtanto y bueno se pide el marcaje de la casilla. No supone ningún gasto. Pensamos que hay más concienciación y además se hace un ejercicio de transparencia y se explica en qué se gasta el dinero y esa dación de cuentas que realiza la diocesis de Cádiz y todas las demás va con las exigencias de los tiempos. Ahora se demanda conocer qué es lo que se hace. Cuando uno aporta quiere saber a dónde va».

Descenso en los ingresos por patrimonio

Los ingresos de patrimonio y otras actividades se reducen en 2020 en su conjunto un 25,9%. En este punto hay que tener presente la facturación bruta de la Escuela de Magisterio Virgen de Europa de La Línea , que ascendieron a 1.286.000 euros y 418.000 de la residencia de ancianos San José de San Fernando , que en su conjunto suponen el 44,22% del total del epígrafe. Además, tal y como apuntan desde el Obispado, aquí se añaden los alquileres de algunos inmuebles y también de terrenos de capellanía en Conil, Barbate, Medina... No obstante, señala Herrera, «esos alquileres están afectos a la sustentación del clero».

En cuanto a la recaudación procedente de la explotación del patrimonio artístico , como era de esperar, sí se ha visto muy afectada por la caída drástica de las visitas durante los tres últimos trimestres del año 2020. De hecho estos ingresos quedaron reducidos a 266.000 euros, perdiendo un 82,5% con respecto a los del año anterior. «Las visitas a la Catedral han caído muchísimo por la pandemia ya que se tuvo que cerrar y también hemos tenido cerrados el Oratorio y la Santa Cueva », expone Carmen Lobato.

En cuanto a los otros ingresos corrientes , del total de 1.837.655,47 euros, el 69,3% procede de subvenciones públicas y legados privados recibidos por Cáritas y el resto se lo reparten Manos Unidas, seminario y Obispado. En 2020 cayeron también los ingresos extraordinariosun 13,8%, de los que 199.000 euros, el 43% proceden de subvenciones en capital y 206.000 de enajenaciones de patrimonio.

Gastos de la diócesis

Con respecto a los gastos de la diócesis de Cádiz durante el ejercicio de 2020 hay que destacar los de acciones pastorales y asistenciales que han subido en conjunto un 15,5%. Sin embargo en este epígrafe la pandemia también influye de forma decisiva ya que las actividades pastorales consumen un 30% menos que en 2019 y, sin embargo, las asistenciales suben un 45,46%, hasta alcanzar la cifra de 2.166.000 euros destinados en su conjunto a Cáritas y Manos Unidas . «Este gasto asistencial es lo que más crece y ha sido posible gracias a los ingresos», afirma Juan Carlos Herrera.

La retribución del clero se mantiene en cifras similares a las del 2019, y la del personal seglar , que suma 3.564.000 euros, recoge 952.000 euros de la Escuela de Magisterio y 956.000 euros de trabajadores de Cáritas, correspondiendo el resto a Obispado, parroquias y seminario.

En cuanto a la conservación de edificios y gastos de funcionamiento incorpora, además de las propias reparaciones y mantenimiento, los seguros, suministros (496.000 euros), servicios profesionales de parroquias y edificios del Obispado (307 euros), así como 418.000 euros de los gastos de la residencia San José de San Fernando y 337.000 de Cáritas. «A esto hay que añadir las amortizaciones de todos los inmuebles que se hace a lo largo del tiempo», explica Herrera.

De los gastos extraordinarios de la diócesis en 2020, que suman 287.000 euros, un 89%, es decir, 256.000 euros, corresponden al programa de rehabilitación de edificios . Ahí lo más importante ha sido la intervención en la parroquia del Saladillo en Algeciras .

El patrimonio inmobiliario reportó unos ingresos de 431.000 euros, frente a unos gastos por mantenimiento, reparaciones y rehabilitación de 886.000 euros, generando un desfase de 455.000 euros en el año . Como explica Carmen Lobato «no hay institución con un patrimonio artístico tan grande. En parroquias ya son muchas, 117, que como mínimo hay que mantener el templo o el complejo parroquial, la vivienda del sacerdote... Además en muchos casos, veintidós, tenemos inmuebles BIC y eso es más complejo de afrontar porque además del mantenimiento, cada intervención requiere un proyecto mas costoso. Por eso es importante la labor de la diócesis con ese patrimonio que sostiene y las cosas que se hacen. Sí es verdad que en ese 2020 la rehabilitación ha quedado un poco paralizada. Se han aplazado muchas intervenciones por la pandemia». De hecho, en cuanto a la rehabilitación de patrimonio se destinaron 260.000 euros menos que el año anterior.

La ecónoma diocesana expone que « en los ingresos hay una parte predecible pero el resto hay que pelearlo cada año y situaciones como la de 2020, dada la caída de ingresos se ha compensado con solidaridad. Se ha hecho un esfuerzo importante, la diócesis mantuvo las parroquias abiertas mientras en otros sitios se han producido ertes en el ámbito de la Iglesia. Aquí ha habido mucha voluntad de coger y hacer ese esfuerzo y por supuesto en destinar los recursos de la forma más eficaz posible».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación